Más mexicanos con carencias sociales
MIGUEL TORRES ROSALES
Sin lugar a dudas, el gran fracaso del gobierno federal es la atención a la pobreza, uno de los principales ofrecimientos de la Transformación de Cuarta (T4). Cinco años después, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) confirma que Andrés Manuel López Obrador es un fiasco.
Los resultados de la encuesta Medición de la Pobreza 2022 del Coneval muestran la crisis que la nación enfrentó en los primeros cuatro años del Gobierno Federal, derivado del autoritarismo del Presidente y de la errada toma de decisiones, que no pusieron en el centro al “pueblo bueno y sabio” ni a los más pobres.
Las cifras son frías, pero cada número representa a una persona afectada por las políticas públicas de la cuatroté.
El Coneval indica que el número de personas sin acceso a servicios de salud CRECIÓ EN 30 MILLONES, equivalente a un 150 por ciento. Esto significa que en el 2018 no contaban con atención médica ni medicinas 20.1 millones de mexicanos, el 16.2% de la población; y para el 2022 la cantidad subió a 50 millones, el 39.1 por ciento.
Se trata de un dramático repunte, originado por las lamentables decisiones unilaterales de eliminar la compra de medicinas y sustituir al Seguro Popular por el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).
Lo que quiero reflexionar es que López Obrador por capricho generó un brutal desabasto de medicamentos a la gente y quitó un sistema que había probado ser eficiente para suplirlo por uno que desde su concepción registró graves fallas. Y, luego, se vio obligado a desaparecerlo también para crear el IMSS Bienestar. Ni con esa acción sacada de la manga pudo recomponer el grave daño que ya había causado a los ahora 50 millones de personas sin acceso a la salud.
Los datos del Coneval también muestran que hay 38 millones de personas en carencias sociales. Es decir, no se clasifican como pobres, pero sí están indefensos ante una contingencia económica, una emergencia de salud y no tienen acceso a la educación. Además, subió la pobreza extrema al pasar de 8.7 millones a 9.1 millones de habitantes, lo que significa que 400 mil más no saben si tendrán por lo menos una comida al día y carecen de vivienda, salud y educación.
También subió en más de 1.5 millones de mexicanos el rezago educativo, pues de 23.5 millones que no iban a la escuela creció a 25.1 millones.
Recapitulemos. En cuatro años el gobierno de Andrés Manuel “sacó” de la pobreza general a sólo 5 millones de habitantes; mientras, en ese mismo periodo dejó sin servicios de salud a 50 millones de personas; hay 38 millones, con carencias sociales; 9.1 millones, están en pobreza extrema; y 25.1 millones de mexicanas y mexicanos no van a la escuela.
En términos reales se registraron más retrocesos que adelantos. Tendenciosamente Morena y todo su sequito “celebran” a grito abierto un solo avance, con el que ruidosamente intenta engañar y mentir a las y los mexicanos para ocultar la verdadera situación que se vive.
Hay avances por las transferencias gubernamentales y el aumento del salario mínimo; no obstante, el retroceso es mayor por la falta de acceso a servicios de salud y educación. Tenemos menos pobres por ingresos, pero hay más personas con carencias sociales, porque no tienen ni lo básico para vivir, como lo es la vivienda, salario digno, salud y educación.
El gobierno de “primero los pobres” tiene una enorme deuda social.
En el Partido de la Revolución Democrática (PRD) hemos advertido sobre los fracasos de Morena. Como Diputado Federal Perredista siempre he levantado la voz para denunciar los graves errores e imposiciones del dictador y mi compromiso es seguir haciéndolo hasta que se corrija el rumbo de México.
