Jerez, Zac.- La diputada federal Julia Olguín Serna presentó su Informe de Actividades Legislativas en el Teatro Hinojosa de Jerez, Zacatecas, donde afirmó estar preparada “para los desafíos que vienen”. Ante empresarios, liderazgos políticos, representantes de distintos sectores sociales y cientos de ciudadanos, aseguró que su compromiso con Zacatecas “no responde a una ambición personal ni a una causa de partido”, sino a una vocación de servicio.
El evento se desarrolló en un ambiente político de expectación y asistencia plural. Olguín sostuvo que lo mejor para Zacatecas “está por venir” y afirmó estar lista “para las decisiones que el tiempo y el pueblo habrán de tomar”. Su discurso, cargado de referencias a la esperanza y al sentido de pertenencia, marcó el tono de un mensaje orientado tanto a rendir cuentas como a proyectar liderazgo político.
Durante su intervención, la diputada destacó que su trabajo legislativo se ha enfocado en atender las causas más nobles que unen a la sociedad: la justicia social, la igualdad, la esperanza y el amor por su tierra. En su calidad de integrante de las Comisiones de Presupuesto y Cuenta Pública, Seguridad Ciudadana y Trabajo y Previsión Social, subrayó su participación en la discusión y aprobación de reformas estructurales y presupuestos federales que impactan directamente en la vida de las familias mexicanas.
En materia de salud, la legisladora informó sobre la gestión de más de 55 millones de pesos destinados a medicamentos, insumos y equipamiento médico para hospitales y clínicas de distintos municipios zacatecanos. Aseguró que estos recursos han beneficiado a miles de familias que enfrentan limitaciones en el acceso a servicios básicos. “Comparezco no solo para rendir cuentas, sino para compartir los frutos de un trabajo que ha nacido desde el pueblo”, expresó ante los asistentes.
Sobre seguridad, Olguín refrendó su respaldo a las reformas impulsadas por la presidenta Claudia Sheinbaum, enfocadas en atender las causas estructurales de la violencia, fortalecer las instituciones policiales y garantizar la paz desde una perspectiva integral. Enfatizó la importancia de construir confianza entre sociedad y gobierno mediante la transparencia y la participación ciudadana.
También manifestó su apoyo a la reforma judicial promovida por el Ejecutivo federal, la cual —dijo— busca consolidar un Poder Judicial más cercano y representativo de la ciudadanía. En materia laboral, defendió la necesidad de impulsar la justicia salarial y mejorar las condiciones de los trabajadores, subrayando que “la dignidad en el trabajo debe ser una prioridad del Estado mexicano”.
La diputada dedicó un apartado especial a reconocer el esfuerzo de los migrantes jerezanos y zacatecanos que envían remesas desde Estados Unidos. Afirmó que “cada remesa es una historia de amor por esta tierra” y reiteró su compromiso de impulsar políticas públicas que reconozcan su contribución al desarrollo nacional y garanticen la protección de sus derechos.
Durante el acto, Olguín reafirmó su orgullo por ser zacatecana y su compromiso con las comunidades que representa. Aseguró que cada paso que da en la Cámara de Diputados “lleva el rostro y la esperanza de las familias” del estado. Hizo un llamado a las juventudes para involucrarse en la transformación política y social del país, convencida de que “Zacatecas es más grande que sus problemas” y que los jóvenes poseen “la energía y la visión para levantarlo”.
En el auditorio, el mensaje resonó entre aplausos y expresiones de respaldo. Entre los invitados destacó el senador de la República Saúl Monreal Ávila, quien reconoció públicamente la trayectoria y el trabajo parlamentario de la diputada. “Julia es una mujer con experiencia, con trabajo, con resultados y con presencia en todo el estado. Es un perfil importante dentro de la vida política de Zacatecas”, señaló.
El gesto del senador —al subir al pódium y levantar el brazo de Olguín ante el público— fue interpretado por los asistentes como un mensaje político de respaldo. Para muchos, el acto simbolizó la confluencia de dos liderazgos que comparten una misma visión sobre el futuro de Zacatecas y su papel dentro del proyecto nacional.
La diputada cerró su informe con un mensaje que sintetizó su identidad política y su sentido de compromiso: “Ser zacatecana es un orgullo, pero también una responsabilidad. Cada voto que emito en el Congreso lleva el rostro de una familia que espera soluciones”. La ovación final se prolongó varios minutos en el Teatro Hinojosa, donde resonó una frase que encapsuló el espíritu del evento: “Esta tierra es mi orgullo y mi destino. Voy a dejar el alma para salvar a Zacatecas”.
El discurso de Julia Olguín combinó rendición de cuentas, reivindicación de origen y afirmación de liderazgo. Mostró a una legisladora que busca consolidar su papel en la arena política nacional a través de resultados, cercanía con la gente y una narrativa que apela a la identidad colectiva. En un escenario político marcado por la renovación de liderazgos, su mensaje dejó claro que su proyecto no termina en el Congreso.
LNY | Redacción