Radar Electoral 2018. Las ocho campañas de Osvaldo “El Antorcho” Ávila

GABRIEL CONTRERAS VELÁZQUEZ

Las Herramientas Legislativas son un arma de doble filo, me advierte Osvaldo “El Antorcho” Ávila, candidato al Distrito 4, en Guadalupe. Por un lado son un instrumento útil de vinculación social, sin embargo, confirma, las tareas de beneficencia no deberían jugar un papel medular en la tarea de los legisladores.

Es por ello que, en buena medida, depende de la ética de cada servidor público el saber traducir los recursos de gestión legislativa en atención verdadera a la gente, o de lo contrario abrir la puerta a la triangulación de recursos públicos.

Esto nos lleva a un tema central, entender el proceso de gestión como un contacto obligado con la ciudadanía que, con su voto, decidió por un proyecto político como el de Osvaldo. ¿Qué hacer entonces? El diputado con licencia, y aspirante de Antorcha Campesina, no se niega a la posibilidad de anular el presupuesto que los diputados destinan a la beneficencia social.

De llegar a ese escenario, Ávila Tiscareño me comenta que volverá a su trabajo de toda la vida: gestionar en cada oficina pública, día a día, porque los compromisos que asumió con la gente no pueden abandonarse.

Y en algo tiene plena razón, la gente no siempre distingue en específico la labor del diputado, pero no por ello, como servidor público, le va a cerrar la puerta a la población que a diario visita el recinto legislativo en busca de “una ayuda” o “un apoyo”.

Tampoco a le gente que en las colonias le pide infraestructura social básica, educativa y deportiva.

¿La alternativa? Que la Legislatura destine una bolsa de recursos específicos para gestión social, y regresar el presupuesto restante al Capítulo 3000, para los servicios generales que requiere el Poder Legislativo, tal y como se venía realizando hace seis o siete años.

Lo que es cierto es que el tema de las Herramientas Legislativas no va a ser el mismo en esta misma campaña electoral, o al concluir la misma. Y como toda estrategia para construir un proyecto sólido, la flexibilidad de soluciones es la mejor táctica.

¿Y la campaña en el Distrito 4? “El Antorcho” es un consumado hiperactivo. Por eso, me responde, efectivamente en cuanto tiene oportunidad de ejercitarse, ya sea en la madrugada o a media noche, no renuncia a una disciplina de vida.

El horario varía, pues participar -dentro de sus límites- no sólo en su Distrito sino en siete campañas más, impide mantener una rutina estricta. Vetagrande, Trancoso, Guadalupe en el municipio con Enrique Flores, y en el Distrito 3 (asesorando al candidato suplente de Antorcha, Fernando Benítez).

Igualmente movilizando apoyos para el cuarto Distrito federal con Roberto Luévano, algunas comunidades y municipios del Distrito tercero en Zacatecas con Carlos Peña, y la campaña con Claudia Anaya y Raúl Rodríguez. Apenas para llenar el gusto proselitista del enérgico candidato.

Víctor Armas en severos aprietos… otra vez

Tal y como lo adelantamos aquí hace una semana: el fichaje de Gabriela Perales al equipo tricolor en el municipio de Guadalupe atravesaba por un compromiso específico, que la regidora se desistiera de la denuncia que había interpuesto en contra del ex secretario de Agua y Medio Ambiente, Víctor Carlos Armas Zagoya.

Pues en la última audiencia que realizó con ambas partes la Unidad de lo Contecioso Electoral del IEEZ, llegó el escrito con el desistimiento de la otrora militante de Morena. Y como aquí también se advirtió, el desistimiento no procedería, pues en un Procedimiento Especial Sancionador en materia electoral no se juega un interés entre particulares (civil), sino entre expresiones políticas enfocadas en lo público (gobierno y partidos).

La denuncia que promovió el Movimiento de Regeneración Nacional se mantiene. Y resulta que ahora sí Don Virgilio Delgadillo, desquitando el salario, encontró por fin que su colega Víctor Carlos utilizó recursos públicos para posicionarse en el ánimo de los votantes del Distrito 3, cuando estaba al frente de la SAMA.

El Tribunal de Justicia Electoral del estado ya tendrá elementos para abrir la posibilidad de poner en riesgo la candidatura del “súper asesor” Armas. Con ello se derrumba el falso discurso del aspirante, donde aseguró al inicio de su campaña respetar a las reglas del juego y al árbitro de la elección.

La cereza del pastel: Gerardo Cervantes Ramírez se presentó como abogado defensor del travieso candidato. ¿Y quién es Gerardo? Nada más y nada menos que Director en la Secretaría Técnica de SAMA, lo cual no sólo muestra, nuevamente, conflicto de interés, sino que también acredita que Víctor Armas continúa utilizando recursos (ahora humanos) de una dependencia de gobierno para favorecerlo en temas electorales. ¡Autogol a los de casa eh!

Meade no se baja

Ante las presiones del ala empresarial para apuntalar a Ricardo Anaya como rival único de Andrés Manuel López Obrador, el equipo de José Antonio Meade responde con un rotundo NO. El cabildeo de los capitanes industriales ha llegado a los extremos de amenazarlo con quitarle fuentes de financiamiento.

Sin embargo, el candidato toma una bocanada de oxígeno con la Segunda Encuesta Nacional de Clima Político Electoral, de mayo del 2018, de Pop Group. Con esta medición busca poner freno de mano temporal a quienes claman su renuncia, y se sube a la pelea por el segundo lugar.

La encuesta fue aplicada, cara a cara, a dos mil 515 personas en las 32 entidades de la república. En ella, dos datos son significativos para el equipo de Pepe Toño. El voto de los indecisos lo pondría de nuevo en el handicap de la carrera presidencial, pues rebasa a Ricardo Anaya en este rubro, y gana a sus contrincantes en términos de identidad con el votante. Pero falta todavía el tercer y último debate.

¿Alguna información en su radar? Con gusto la recibimos en el correo: [email protected]