Zacatecas, Zac.- El diputado Carlos Peña Badillo cuestionó la paz oficial durante la Glosa del Cuarto Informe de Gobierno. Su intervención respondió a la comparecencia del secretario de Seguridad Pública, general Arturo Medina Mayoral. La quema de 37 vehículos en carreteras estatales esta madrugada evidenció la crisis. El acto criminal generó pánico en la población y adquirió relevancia nacional inmediatamente. Los videos del ataque contradijeron el informe gubernamental sobre la pacificación.
Peña Badillo confrontó el discurso triunfalista del funcionario estatal. El legislador reconoció el esfuerzo del general Medina Mayoral y su equipo, pero consideró insuficiente el trabajo de las autoridades ante la violencia evidente. Señaló que los delitos cotidianos imposibilitan cualquier declaración de paz. El ataque coordinado demostró la fragilidad operativa de las corporaciones.
La crisis de seguridad en Zacatecas posee profundas raíces históricas. El estado padeció la presencia de cárteles como Los Zetas y Los Talibanes desde 2010. Aquella administración construyó dos Escuadrones Militares y cinco Unidades Regionales de Seguridad. Dicho gobierno duplicó el número de policías estatales y mejoró su equipamiento. La narcoviolencia persistió por la falta de una intervención federal contundente.
La estrategia de seguridad del gobierno federal actual agravó la situación nacional. El año 2021 registró una violencia extrema en todo el país. El sexenio anterior acumuló más de 200 mil homicidios dolosos. Esta política permitió la operación impune de los grupos del narcotráfico. Zacatecas sufrió las consecuencias de este abandono táctico.
La paz oficial resulta inexistente para la ciudadanía zacatecana durante esta administración. La población sufre inseguridad dentro de sus hogares y en espacios públicos. Los delitos de cobro de piso afectan hasta los negocios más pequeños. Las desapariciones forzadas y los feminicidios permanecen en la impunidad. La realidad cotidiana desmiente los reportes gubernamentales presentados en la glosa.
Zacatecas dista mucho de alcanzar una paz verdadera según los hechos. La retórica oficial choca con la evidencia de la violencia criminal. El estado requiere una estrategia integral y efectiva beyond los discursos. La solución demanda más que operativos mediáticos y comparecencias. La seguridad pública exige resultados concretos y permanentes para la población.
LNY | Redacción