Zacatecas, Zac.- Este 8 de septiembre, Zacatecas celebra 479 años de historia desde que en 1546 Juan de Tolosa halló las primeras vetas de plata, descubrimiento que transformó a la región en uno de los centros mineros más relevantes de la Nueva España y dio origen a una de las ciudades coloniales más admiradas de México.
Gracias a su prosperidad, el rey Felipe II otorgó a la entonces joven comunidad el título de ciudad, un escudo de armas y la distinción de “Muy Noble y Leal”, consolidando su evolución de asentamiento minero a núcleo urbano de gran relevancia. Con el tiempo, Zacatecas se convirtió en escenario de episodios que marcaron la historia nacional: en la Independencia fue un bastión insurgente y en la Revolución Mexicana fue sede de la emblemática Toma de Zacatecas de 1914, encabezada por Francisco Villa, decisiva para la caída del régimen huertista.
El auge de la minería dejó como herencia un paisaje urbano de enorme valor artístico. Templos de estilo barroco, palacios y casonas de cantera dan forma a un centro histórico único, cuya máxima joya es la Catedral Basílica de Zacatecas, considerada una obra maestra del barroco novohispano.
Este esplendor fue reconocido en 1993, cuando la UNESCO declaró al Centro Histórico Patrimonio Mundial. Más recientemente, el 6 de junio de 2025, el Gobierno de México publicó el decreto que lo protege como Zona de Monumentos Históricos, abarcando 105 hectáreas, 169 manzanas y 827 inmuebles de los siglos XVI al XIX, garantizando su preservación para las futuras generaciones.
Hoy, la capital zacatecana y municipios vecinos como Jerez, Fresnillo, Guadalupe, Sombrerete y Nochistlán mantienen su vocación minera, agrícola y turística. Zacatecas continúa siendo una ciudad de cantera rosa que conserva su esencia virreinal mientras se proyecta como un referente histórico, cultural y patrimonial para México y el mundo.
LNY | Redacción