La lucha sigue y venceremos

OSVALDO ÁVILA TIZCAREÑO

En 2024 se cumplen 50 años del nacimiento del Movimiento Antorchista Nacional, desde entonces nuestro objetivo principal ha sido luchar por la redistribución de la riqueza social, para generar bienestar y la satisfacción a plenitud de las necesidades como vestido, calzado, vivienda, educación, salud y alimentación. La tarea no ha sido nada sencilla, siempre hemos enfrentado múltiples dificultades, desde campañas de mentiras que se han  difundido a través de la prensa, pero también intimidación, represión física e incluso agresiones directas que terminaron con la vida de algunos de nuestros compañeros.

Ninguna de las razones mencionadas ha sido motivo para cejar en nuestro intento y detener nuestra labor organizativa y de gestión, los zacatecanos también hacemos nuestro modesto esfuerzo recorriendo comunidades y colonias para concientizar a la gente de la necesidad de seguir luchando, aquí también muchos han sido los avatares que hemos enfrentado, pero ello no ha sido razón para dar marcha atrás.

Congruentes con lo anterior, y a efecto de lograr nuestro anhelo de una vida más digna para los menesterosos de la patria, hemos acudido ante las autoridades de diversos municipios a efecto de solicitar atención a modestas solicitudes que empatan perfectamente con los programas institucionales y las obligaciones constitucionales contenidas en el Art. 115 de nuestra Constitución.

A principio del año hice una convocatoria para apersonarnos en los ayuntamientos, a efecto de exponer las solicitudes de un gran número de ciudadanos de distintos puntos de la geografía zacatecana que militan en nuestro movimiento. A efecto de dar noción de lo acontecido y fijar las metas próximas, me permito traer a cuenta lo avanzado recientemente en diversos municipios. Veamos.

El 17 de enero, los fresnillenses acudieron a solicitar inclusión en obras de pavimentación de calles, apoyos alimentarios, acciones de mejoramiento a la vivienda, edificación de domos escolares entre otras  acciones de orden social en beneficio de familias del municipio. La respuesta inmediata de la Alcaldesa Riña Quiñones y su equipo, dio lugar al diálogo y el compromiso de analizar puntualmente cada una de las solicitudes a efecto de atenderlas. Como me referí en una colaboración anterior la actitud comedida y disposición inmediata dejaba un buen sabor de boca.

Posteriormente nos apersonamos en el municipio de Guadalupe donde se plantearon solicitudes similares que fueron expuestas a Francisco Solís y Eleazar Limones, Secretario Particular y de Gobierno respectivamente, donde hubo una respuesta atenta y el compromiso de plantear las demandas al titular del ejecutivo municipal, y ofrecer una pronta respuesta que no necesariamente sería positiva.

También se apersonaron los villanovenses para solicitar audiencia con el Alcalde Rogelio González, esto a efecto de dar continuidad a los acuerdos pactados el año pasado y que igualmente constituyen acciones de  orden social; a ello se le suman el encarpetado de diversas carreteras del municipio. Ante estas peticiones se programó una reunión que se efectuará el próximo 12 de febrero.

En la alcaldía de la ciudad capital, donde encabeza el Ayuntamiento el Dr. Jorge Miranda Castro, expusimos a su secretario particular Martin Cervantes diversas peticiones, la respuesta fue respetuosa y se comprometieron a ponderar cada una de las solicitudes para dar respuesta a la brevedad.

El último caso aconteció en Trancoso, donde una comisión representativa expuso al Alcalde Antonio Rocha demandas similares a las expuestas en otras latitudes, aquí, a diferencia de los demás casos la respuesta fue más puntual y se establecieron compromisos precisos que deberán cumplirse en un lapso relativamente breve.

Los casos anteriormente mencionados dan cuenta de una tónica general de atención y disposición al diálogo que contrastan significativamente con la actitud mostrada al inicio de la administración federal (quizá por la cercanía de la elección), pero sea cual sea la causa, bien vale la pena recordar que la naturaleza de nuestra lucha lleva aparejadas esas vicisitudes.

Vale la pena recordar las adversidades que han enfrentado los movimientos sociales, o los pueblos en su ruta hacia el progreso. Al respecto, viene a cuenta lo acontecido en China a principios del 2008, año en que se celebraron los Juegos Olímpicos, primero hubo fuertes avalanchas de nieve y luego un trágico terremoto acontecido en Wenchuan el día 12 de mayo que implicó graves afectaciones; ante ello la respuesta del pueblo no se hizo esperar, brotó la hermandad y la solidaridad, donde la firmeza entre autoridades y pueblo se puso de manifiesto y la resultante todos la conocemos, las olimpiadas  fueron un acontecimiento majestuoso que conmocionó al mundo entero.

El ejemplo anterior debe servir a los antorchistas para disponernos a luchar con firmeza, seguros que el camino correcto es la hermandad, sabedores que más temprano que tarde venceremos, no lo dudemos jamás.