La sequía e indiferencia de AMLO acaban al campo zacatecano

JACOBO CRUZ

Los campesinos de Zacatecas que dependen de la presencia de lluvias para cultivar frijol, maíz y avena de temporal, afirman que la sequía y la indiferencia del gobierno federal a cargo del mandatario mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO), acaban con la esperanza de vivir de los productos del campo y prevén que será un año muy complicado para sus familias al no tener semillas para el autoconsumo.

Y es que a pesar de que el mes de septiembre es históricamente cuando más llueve, en el presente ciclo agrícola no es así y eso se puede corroborar al recorrer cualquier región de la entidad donde la esperanza de los productores agropecuarios se termina al contemplar como sus cultivos se secan por la falta de humedad sin poder hacer nada para remediarlo.

Felipe Galindo Raudales, campesino antorchista del municipio de Trancoso, calificó de lamentable la situación, pues en la zona de San José del Carmen, donde tradicionalmente se cosechaba frijol de buena calidad, está cultivado un 20 por ciento de la superficie y las plantas se están secando.

La misma suerte sufren los ganaderos que dependen directamente del pasto de los agostaderos y del agua que se retiene en los bordos para abrevadero del ganado, pues tampoco cuentan con dinero para el rescate de vacas flacas; sólo tienen la esperanza de que el resto de septiembre y octubre llueva, para que enfrenten el estiaje en las mejores condiciones, “pero a como se ve, será un año de pobreza”, argumentan.

Hay datos oficiales que alarman, como los que dio a conocer de forma reciente Juan Manuel Martínez, subsecretario de Agricultura de la Secretaría del Campo (Secampo), al informar que no se sembraron cerca de 700 mil hectáreas del millón 160 mil, mientras que el resto que sí se sembró, está en peligro de perderse por sequía.

Según el último reporte publicado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Zacatecas es uno de los únicos cinco estados del país con la totalidad de su territorio en condiciones de sequía, y a pesar de las lluvias esporádicas de la última quincena, el número de municipios en sequía extrema pasó de 37 a 41, mientras que en sequía severa permanecen 15.

Como es evidente, la crisis que se vive en el campo se ahonda más, pues aunque los funcionarios del gobierno del estado han procurado no contradecir al Gobernador morenista David Monreal Avila, que pretende vender la idea de que López Obrador está ayudando mucho al estado, en la Secampo ya no pueden, ni quieren sostener el argumento, y han denunciado la falta de interés de la federación.

Jesús Padilla Estrada, secretario del Campo, tronó contra el gobierno federal al denunciar que el campo está abandonado pues no hubo aportación para el seguro catastrófico y no se ha declarado zona de desastre a la entidad pese a que han documentado los estragos por la sequía.

El titular de la Secampo dijo que solicitaron al gobierno de México se declare zona de desastre a Zacatecas por la falta de lluvias a través de las delegaciones de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua), pero lamentó que será hasta noviembre cuando tendrán respuesta a pesar de que actuaron desde el el 25 de julio, una vez que concluyó el periodo de siembra.

Afirmó que Santiago José Argüello Campos, coordinador general de Agricultura en la Sader, se comprometió con 10 millones de pesos para adquirir semilla de avena, pero “es tiempo que no han dado a conocer las reglas de operación”.

Respecto al seguro catastrófico para el campo, Jesús Padilla precisó que el 80 por ciento del monto destinado a este concepto provenía de la federación, aunque sólo cubría  el 45 por ciento de la superficie de cultivo. El monto por hectárea siniestrada era de mil 200 pesos,  sin embargo, este fue uno de los programas que eliminó López Obrador alegando que había corrupción, y que tuvo alcance hasta el año 2018 con lo que campesinos de Zacatecas, recuperaban una parte del dinero invertido por las pérdidas debido a las condiciones climáticas.

En ese sentido Padilla Estrada dijo que Zacatecas no puede solventar con sus propios recursos una emergencia como la que se avecina, en tanto son las delegaciones de Sader y Conagua las que deben hacerse cargo de dar curso a las gestiones, pero las solicitudes no se han elevado a quien corresponda, pues la declaración da posibilidad de acceder a fondos federales.

El funcionario de Secampo denunció que sigue sin ser respondida la solicitud de declaratoria de zona de desastre por sequía hecha por ellos, quien culpó a las autoridades locales de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) y de Conagua de no informar al presidente de la república sobre la crisis actual, lo que ha frenado los apoyos.

Ya queda un año de que termine el sexenio de López Obrador y por todas estas condiciones del campo, por el desinterés de reactivar el proyecto de la presa Milpillas para traer agua desde Teúl de González Ortega a la zona conurbada e industrial, por la falta de recursos para culminar las carreteras a Aguascalientes y Guadalajara, no se ve por ningún lado el “amor con amor se paga”, que presumen los morenistas de Zacatecas.