Ciudad de México.- El descarrilamiento de la locomotora principal de un convoy del Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec en Nizanda, Oaxaca, provocó este domingo la muerte de 13 personas y lesiones a otras 98. El siniestro ocurrió en la Línea Z con 241 pasajeros a bordo, activando una investigación federal para determinar las causas técnicas y operativas del percance ferroviario.
La Secretaría de Marina (Semar), institución responsable de la operatividad del proyecto ferroviario, confirmó que en la unidad viajaban además nueve tripulantes. De acuerdo con el reporte oficial, 139 personas resultaron ilesas, mientras que de los 98 heridos, 36 requirieron hospitalización inmediata. Cinco de los pacientes se reportan en estado de gravedad. El despliegue de auxilio incluyó a 360 elementos navales, unidades aéreas y terrestres, así como el uso de drones tácticos para localizar a víctimas que cayeron por un talud de aproximadamente siete metros de altura.
La atención médica de los lesionados se concentró en instalaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el programa IMSS-Bienestar. El director general del instituto, Zoé Robledo, informó que 23 personas fueron ingresadas al Hospital Rural de Matías Romero, de las cuales seis debieron ser trasladadas posteriormente al Hospital General de Zona 2 en Salina Cruz para recibir atención especializada. Otros afectados fueron canalizados a unidades médicas en Juchitán e Ixtepec.
En el ámbito judicial, la Fiscalía General de la República (FGR), bajo la conducción de Ernestina Godoy Ramos, inició formalmente una carpeta de investigación. Peritos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y agentes ministeriales de la Fiscalía Federal en Oaxaca se trasladaron al sitio para recolectar indicios técnicos. Paralelamente, la Semar mantiene coordinación con la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario para determinar si el origen del descarrilamiento responde a fallas en la infraestructura, errores operativos o factores externos.
La presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo, instruyó al secretario de Marina, Raymundo Pedro Morales Ángeles, y al subsecretario de Derechos Humanos, Arturo Medina Padilla, para personarse en la zona del siniestro y gestionar la atención a los deudos y heridos. Por su parte, el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, confirmó la instalación de un módulo operativo de emergencia en conjunto con la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Nacional para asegurar la zona y restablecer la operatividad de la vía férrea una vez concluidas las diligencias periciales.
LNY | Redacción

