PABLO PEDROZA
Julio llega, y con él se cumple un año desde que David Monreal Ávila anunció el inicio de la construcción del segundo piso del bulevar, “como parte de un proyecto integral de movilidad que incluía, en su momento, el plan de rescate carretero de tramos federales, estatales y de cuota concesionados”, registraron medios locales el pasado 1 de julio.
El presupuesto asignado para el segundo piso, como ya es sabido, se anunció en 3,600 millones de pesos, mientras que el monto total del proyecto de movilidad (MOBI) superaba los 7,000 millones.
El destino de este proyecto es de sobra conocido, por lo que no vale la pena ahondar en ello. Basta con decir: la ciudadanía ganó y la administración canceló.
En lo que sí es necesario profundizar es en los supuestos 3,600 millones y el fideicomiso en proceso de extinción. Sobre todo porque la versión inexacta —o intencionalmente falsa— que dio a los medios Ernesto González Romo, el desinformado secretario de la Función Pública, lo exige.
Con los datos recabados por este servidor, puedo afirmar lo siguiente:
El 28 de junio, el Periódico Oficial publicó el Decreto que establece las Bases para la Constitución de un Fideicomiso Irrevocable de Administración, Inversión y Fuente de Pago para la Ejecución del Proyecto “Viaducto Elevado Boulevard Adolfo López Mateos y Calzada Héroes de Chapultepec”. Esto ocurrió meses antes de que se presentara ante la Legislatura el paquete económico para 2024.
Los diputados de la LXV Legislatura no pueden alegar sorpresa, pues meses antes habían autorizado el instrumento que hacía viable la obra. Entre ellos, el impreciso Ernesto González Romo, quien aún no logra desentrañar la madeja del engaño legislativo.
Únicamente tres diputados votaron en contra del Presupuesto de Egresos 2024, el cual incluía el fideicomiso del segundo piso: Juan Mendoza Maldonado, Priscila Benítez Sánchez y Enrique Laviada Cirerol.
El Fideicomiso se ha venido fondeando con recursos provenientes del Fondo de Inversión Pública Productiva establecido en la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios (federal) y en la Ley de Austeridad, Disciplina y Responsabilidad Financiera del Estado. Inicialmente se asignaron 1,000 millones, luego 500 millones del Fondo de Estabilización – todos ellos ingresos excedentes -, y posteriormente 450 millones del presupuesto 2024 aprobado por los entonces diputados, excepto tres que como siempre terminaron lavándose las manos. ¿Verdad, Ernesto González Romo?
Al momento de la cancelación de la obra del Segundo Piso, el Fideicomiso había acumulado 1,950 millones más los recursos adicionales generados. De este monto, aproximadamente 540 millones se utilizaron como anticipo a los constructores, quienes tendrán que devolver lo no devengado de acuerdo con el Convenio de Terminación Anticipada entre el gobierno (es decir, la administración) y las empresas constructoras.
Por lo tanto, el saldo remanente del Fideicomiso ascendería a aproximadamente 1,410 millones, más los intereses o rendimientos generados y, en su caso, las devoluciones por parte de los constructores.
Por ello la importancia de la transparencia e información clara, pues estaríamos hablando de que, de los 3,600 millones que se esperaban de ese fideicomiso, en el mejor de los casos quedarán poco menos de 2,000 millones – cantidad que no es nada despreciable.
Esos 2,000 millones, gracias al Decreto aprobado por los diputados de la LXV Legislatura, regresarán al erario una vez que se finiquite el Fideicomiso. Así quedó establecido claramente en el decreto: los recursos retornarán a las cuentas del Ejecutivo.
“ARTÍCULO 11. Por su naturaleza y fines, el FIDEICOMITENTE no se reservará el derecho a revocar el FIDEICOMISO, ni a revertir la totalidad o parte de su patrimonio, sino hasta que se encuentren totalmente pagadas las obligaciones que el Gobierno del Estado de Zacatecas tenga con los FIDEICOMISARIOS en Primer Lugar.
El FIDUCIARIO, una vez que se cerciore que no existen obligaciones pendientes de pago con los FIDEICOMISARIOS en Primer Lugar, procederá con la extinción del FIDEICOMISO y transferirá al FIDEICOMITENTE las cantidades y derechos que integren el patrimonio fideicomitido restante.”
El Fideicomiso iniciará su extinción de acuerdo con lo establecido en el Decreto, una vez que se concrete el acuerdo de liquidación entre los constructores y la administración. Para este proceso se establece un plazo máximo de 60 días; de cumplirse en tiempo, el fideicomiso estaría finiquitado para agosto.
Finalmente, los recursos regresarán al Fondo de Inversión Pública Productiva, contando con un plazo máximo de un año para su ejercicio. En esta etapa será fundamental demostrar la habilidad y sensibilidad de la administración para reencauzar estos recursos, tomando en cuenta los Ejes Tractores, el Plan Estatal de Desarrollo, las necesidades urgentes de esta ciudad que requiere rescate y responsabilidad compartida, así como las demandas de la sociedad en su conjunto.
Tres de salida
UNO. De haber quórum este lunes en el Congreso, se aprobaría una reforma a la Ley Electoral para redistribuir -léase acaparar- las diputaciones plurinominales aún existentes, favoreciendo a los partidos con mayor porcentaje de votación. Esta modificación beneficiaría principalmente a Morena y al PRI, lo que ha llevado a la opinión pública a vislumbrar un “PRIMOR” que podría afectar la competitividad de uno de estos actores de cara a 2027. La reforma perjudica no solo a partidos como el Verde y MC, sino también a los aliados tradicionales del PRI: PAN y PRD.
¿Tendrán el PRI local, su dirigencia y diputados -no sus militantes- la autoridad moral o ética para criticar futuras reformas electorales que impulse Claudia Sheinbaum, después de este acuerdo con Morena? Si, como parece, desaparecen las plurinominales, ¿qué pasará con aquellos partidos que hoy, confiados en mantener buenos porcentajes de votación, apoyan esta iniciativa?
DOS. Se aproxima la reforma de la presidenta Claudia Sheinbaum que, como todo en su proyecto, representa la versión 2.0 de lo establecido en el manual de Andrés Manuel López Obrador.
TRES. Geovana Bañuelos de la Torre tiene altas probabilidades de asumir la presidencia del Senado. Cuenta con presencia y fuerza en el debate, a diferencia de esa “mediocre y corrupta” -en palabras de Saúl- que busca revivir glorias pasadas. De alcanzar la presidencia, sus posibilidades para obtener la candidatura gubernamental se fortalecerían considerablemente.
La conozco y he tratado con ella durante años. Siempre ha demostrado empeño en prepararse, crecer y construir relaciones en el ámbito de la política partidista.
