Rechazan diputados federales, trato indigno a policías estatales de Zacatecas

Ciudad de México.- Los diputados federales Miguel Torres Rosales, Noemí Luna Ayala y Miguel Varela Pinedo ofrecieron su respaldo y apoyo a los casi 800 policías estatales que desde ayer se manifiestan por despidos injustificados y actos de hostigamiento, de ahí que desde San Lázaro exigieron al Gobierno de Zacatecas que atienda cuanto antes sus demandas laborales.

Los legisladores del PRD y PAN lamentaron que el gobernador David Monreal Ávila carezca de la sensibilidad para resolver las dificultades que cotidianamente enfrentan los encargados de proteger a la población, especialmente cuando Zacatecas está entre los estados con mayor índice de homicidios, feminicidios, desapariciones y desplazamientos forzados.

Recordaron que la inseguridad en la entidad no sólo afecta a la población, sino también a los policías, tal y como lo demuestra el asesinato de 16 elementos en lo que va del presente año, por ello indicaron que en el análisis del Presupuesto Federal 2022 exigieron para Zacatecas mayores recursos para seguridad.

El perredista Miguel Torres y los panistas Noemí Luna y Miguel Varela rechazaron el trato indigno que se da a los policías estatales, lo que les llevó a hacer públicas sus inconformidades y exigir la destitución de mandos superiores al interior de la corporación, lo que evidentemente no se cumplió y hoy se manifiestan de nuevo.

Llamaron al Gobierno del Estado a resolver la situación y revisar el despido de los siete elementos, de los cuales cinco fueron integrantes de la mesa de negociación del paro realizado a mediados de marzo, lo que a todas luces se puede interpretar como represalias contra ellos.

Coincidieron los diputados en la necesidad urgente de atender las demandas laborales de los policías y llamaron al Ejecutivo a atender personalmente a los afectados, tal como ellos lo solicitan para exponerle personalmente sus inquietudes y demandas, a fin de encontrar una pronta solución y no se deje al pueblo de Zacatecas a merced de la delincuencia y violencia.

LNY/Redacción