Educación de calidad para todos: ¿Mito o realidad?
MANUEL IBARRA SANTOS *
En el año 2000, en la Conferencia Mundial sobre Educación celebrada en la ciudad de Dakar (capital de Senegal), los Jefes de Estado de las Naciones del Mundo, – entre ellas México- se comprometieron a velar porque, a más tardar en el 2015, las necesidades de aprendizaje de todos niños, jóvenes y adultos del planeta quedaran satisfechas y garantizadas mediante un acceso equitativo y adecuado a programas de preparación para la vida activa.
A 13 años de la definición global de los Objetivos de la Educación para Todos (EPT), programa internacionalmente coordinado por la UNESCO, se puede afirmar que sus metas establecidas han sido incumplidas y las cifras así lo demuestran. En México existen en la actualidad más de 32 millones de ciudadanos en condiciones de rezago educativo.
En la entidad los datos cuantitativos no son optimistas ni menos dramáticos: más de 490 mil zacatecanos de 15 años o más, se ubican en situación de rezago escolar, porque no han terminado sus estudios de primaria, secundaria y/o bien se localizan en el estatus de analfabetas tradicionales, sin contar aquí el elevado número de analfabetas funcionales.
El concepto cobra relevancia, debido a que la semana pasado el presidente Enrique Peña Nieto inauguró y participó en el Foro Nacional México Educación de Calidad para Todos, en donde ratificó el compromiso del Estado con la reforma integral del sistema educativo, la que –dijo- no tiene reversa. Las iniciativas de contra/reforma no encontrarán eco, si estas no se desplazan por la vía del diálogo y del respeto a la legalidad, y menos si persisten en mantener la dinámica de la insurgencia y el choque violento.
El debate de la educación pública en México se ha convertido en la primera gran prueba de gobernabilidad para la administración del presidente Peña Nieto, con la insurgencia magisterial del sur/sureste del país, que se resolverá no sólo con medidas policiacas, sino también con el ensanchamiento de los mecanismos de diálogo político y con el reconocimiento de que el respeto a la legalidad es una condición indispensable para el progreso. La democracia moderna no puede existir en un contexto de impunidad y al margen de la ley. La educación, no obstante los cambios de época, jugará también un rol concreto como aparato ideológico en la modificación del proyecto de Nación
Pero el asunto de fondo es discutir debido a qué se ha avanzado tan poco en el país y en Zacatecas, en el logro de los objetivos del Programa Mundial de Educación Para Todos (EPT). Y es que hay una realidad que se impone: existe una pobre cultura de la evaluación institucional, del seguimiento de las acciones gubernamentales y de la planeación estratégica, que propicia en consecuencia que se imponga la improvisación y el voluntarismo personal. Es tiempo de modificar esa tendencia inercial.
La oferta de una educación de calidad para todos es una demanda social por cubrirse y atenderse, si es que se quiere pavimentar la carretera del crecimiento y el desarrollo. Y debemos aceptar que no se cuenta a plenitud con esa herramienta del progreso, no obstante los avances registrados a la fecha.
Los objetivos del programa global de educación para todos:
En la Conferencia Mundial de Educación del 2000, académicos expertos, Jefes de Estado, investigadores, padres de familia y representantes de la sociedad global, se plantearon seis objetivos a cumplir a más tardar en el 20015, entre los que destacan los siguientes:
1).-Velar porque las necesidades de aprendizaje de todos los niños, jóvenes y adultos quedarán atendidas y cubiertas; 2).-aumentar la protección y educación integral de la primera infancia, en espacial para los niños de sectores más vulnerables; 3).-garantizar a niños y niñas una enseñanza gratuita y obligatoria de calidad; 4).-aumentar el número de adultos alfabetizados; 5).-suprimir las disparidades de atención educativa entre los géneros; y 6).-Propiciar los parámetros más elevados de calidad en la enseñanza.
El logro de los objetivos del Programa Global de Educación para Todos (EPT), no podrán cristalizarse con un sistema de enseñanza obsoleto e ineficiente como el que tiene en la actualidad la sociedad mexicana.
El 2015 está a la vuelta de la esquina y se puede anticipar que en México y en Zacatecas no se cumplirán los planes, fines y metas del Programa Internacional de Educación para Todos. Aunque tenemos que aceptar que nunca es tarde para corregir el camino, sobre todo cuando haya voluntad de hacer mejor las cosas.
El rediseño de estrategias y fines educativos:
Los indicadores de rezago escolar colocan a Zacatecas como una de las entidades con mayores atrasos educativos en el ámbito nacional, que es necesario superar y que obligan a colocar el tema en uno de los asuntos de primer orden de la agenda del desarrollo local.
Debemos impedir que el concepto y la categoría de Educación para Todos, se constituya en un mito genial, inalcanzable para nuestra sociedad.
