San Andrés Cholula, Puebla.- La presidenta Claudia Sheinbaum denunció las redadas migratorias realizadas en Los Ángeles, California, donde al menos 44 personas fueron detenidas, entre ellas 11 mexicanos. Desde San Andrés Cholula, Puebla, aseguró que el gobierno mexicano brinda apoyo consular a los afectados y rechazó las acciones del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) como medidas injustas y violentas.
“Los migrantes mexicanos en Estados Unidos no son delincuentes; son trabajadores honestos que contribuyen a ambas naciones”, declaró Sheinbaum durante la inauguración de las torres de cardiología y oncología pediátrica en el Hospital de la Niñez Poblana. Las nuevas instalaciones atenderán a 1.5 millones de niños, un contraste deliberado con lo que calificó como “políticas hostiles” contra migrantes.
Las redadas, ejecutadas el pasado viernes con apoyo de la Guardia Nacional —desplegada por órdenes de Donald Trump—, han desatado indignación. Manifestantes bloquearon calles y exigieron el cese de las detenciones, acusando al ICE de tácticas abusivas. Las protestas continuaron el sábado, con consignas como “¡No somos criminales!” y “¡Migrante, resiste!”.
Carlos González Gutiérrez, cónsul general de México en Los Ángeles, confirmó que las autoridades mexicanas están en contacto con los detenidos para garantizar asistencia legal y protección consular.
Sheinbaum insistió en que la solución no radica en operativos represivos, sino en una reforma migratoria que reconozca los derechos de los trabajadores indocumentados. “La violencia no resuelve nada; necesitamos mesas de diálogo y acuerdos bilaterales”, afirmó.
Destacó que, además de la intervención diplomática del canciller Juan Ramón de la Fuente, México mantiene abierto el programa México te Abraza para quienes decidan regresar. “Nuestra prioridad es proteger su dignidad, estén donde estén”, concluyó.
El mensaje de Sheinbaum llega en un contexto en donde la retórica antiinmigrante ha escalado. Su postura refuerza la política exterior mexicana de defensa a migrantes, incluso frente a medidas unilateralistas.
LNY/Redacción