Viable el uso de franjas de nopal para evitar erosión en tierras
El uso y adopción de franjas de nopal, en tierras de cultivo, es una técnica que permite la captación de agua y disminuye de manera significativa los avances de la erosión eólica, son cortinas que frenan la velocidad del viento y ayudan a conservar los recursos agua y suelo y ésto podría aplicarse en unas 500 mil hectáreas productivas, expresó el secretario de Desarrollo Agropecuario, Enrique Flores Mendoza.
Señaló que los logros que después de cuatro años se reflejan en comunidades como El Bordo, del municipio de Guadalupe, representan el esfuerzo y la preocupación del productor que, ante el inminente deterioro de sus tierras, cultivadas con frijol o maíz, ante los bajos rendimientos y la escasa agua para conseguir una buena cosecha, echó mano de esta técnica utilizada ya en otros países con resultados satisfactorios.
En este sentido, el director general de la Comisión Nacional de Zonas Áridas (Conaza), Luis Carlos Fierro García, precisó que las acciones que en esta materia está desarrollando el gobierno de Miguel Alonso Reyes, se conjugan con aquellas de la reconversión productiva y paquetes tecnológicos, aplicados por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), especialmente en zonas o regiones consideradas de alta marginación.
Expuso que tanto la ganadería como la acuacultura deben dar mejores resultados con la aplicación de nuevas tecnologías, para elevar la producción y la calidad de la misma.
En el caso concreto de la acuacultura, subrayó que la dependencia federal podría incrementar la producción de pescado, a través del Instituto Nacional de Pesca, con acceso a las nuevas tecnologías para producir pescado a baja escala y contribuir así a mejorar la alimentación de los pobladores de las regiones áridas y semiáridas.
Existe preocupación por parte de la Sagarpa para cuidar los recursos tierra y agua, de ahí la importancia de impulsar y fortalecer, conjuntamente con el Gobierno de Zacatecas, una cultura real de conciencia ecológica, inculcarla en las nuevas generaciones para evitar en la medida de lo posible los efectos de la desertificación y luchar, día a día, por la preservación de los recursos naturales, concluyó.