Semáforo Delictivo

JOSHUA H. MENDOZA

En días pasados confirmamos en Zacatecas lo que muchos de nosotros conocíamos o sentíamos: Zacatecas es uno de los estados con mayores índices delictivos de alto impacto, lamentablemente no pasa un solo día sin que veamos una nota o registremos el hallazgo de algún cadáver en algún municipio del estado.

Según las cifras presentadas por el Semáforo Delictivo, Zacatecas ocupa el tercer lugar a nivel nacional con más asesinatos con 25.8 por cada 100 mil habitantes, colocándose sólo por debajo de Guerrero que registra 29.7 y de Colima, que lidera el ranking con 40.4.

Así mismo, Zacatecas es el segundo lugar con más secuestros de México con 1.5 plagios por cada 100 mil habitantes, mientras que la media nacional es de 0.4.

Somos, también, ya el tercer lugar nacional en extorsiones, con 5.5 por cada 100 mil habitantes, mientras que la media nacional es de 2.0, lo que nos posiciona por detrás de Nuevo León que registra 5.9 y Baja California Sur con 8.4.

Y, por si fuera poco, nuestro bello estado ostenta el tercer lugar en violaciones sexuales con 11.9.
Sin duda, son indicadores alarmantes que debemos agradecer a la pésima administración de Miguel Alonso Reyes. Estamos a sólo dos meses del quinquenio de Alejandro Tello como gobernador del Estado y poco se ve respecto al plan estatal para enfrentar esta gran crisis en Zacatecas. En particular, no se ha referido comentario alguno de parte de la Secretaria de Gobierno, del procurador del Estado o del mismo Jefe del Ejecutivo.

Aquí cabe la siguiente pregunta: ¿cómo piensan atraer inversión a Zacatecas? La respuesta debe atender, primero, a informar los mecanismos para revertir estos indicadores y dejar de lado la frase de que la situación del estado no es tan grave, pero, sobre todo, evitar decir que en Zacatecas no pasa nada.

El secretario de Economía tiene un reto muy importante: por un lado buscar inversionistas que quieran llegar a una entidad que se encuentra en el podio de los estados más peligrosos (por delitos graves) en México; y, por el otro lado, ofrece una paupérrima infraestructura para el desarrollo del sector productivo.

Estos hechos no pueden negarse y lamentablemente son las condiciones en las que, parafraseando el título del programa de la periodista Cristina Pacheco, «Aquí nos tocó vivir».

El tema es delicado y espero que en esta nueva contienda electoral para elegir a quien liderará la capital del estado, sea uno de los temas torales para cada uno de las y los candidatos.

El municipio de Zacatecas no es ajeno a estos delitos, nos ha tocado presenciar balaceras, escuchar disparos o leer en los medios de comunicación que asaltaron, quemaron o destrozaron algún lugar de «entretenimiento» dentro de la zona con urbana.

Entramos hoy a una nueva etapa de veda electoral, poco más de 20 días de campaña y una elección extraordinaria que definirá al próximo alcalde o alcaldesa de la capital a partir del próximo 4 de diciembre.

Ojalá y no echemos en saco roto lo que el Semáforo Delictivo nos señala. Zacatecas está en focos rojos.

Nos vemos la próxima semana. No olviden enviar sus comentarios al correo [email protected] o seguirme a través de Twitter como @JoshJasso.