La Casa de los Perros: Urge titular de Educación en Zacatecas
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Durante unas 10 horas, la capital de Zacatecas se convirtió en un caos, y todo, cortesía una vez más de la nueva gobernanza.
Esta vez fue la ineficiencia desbordante de quien supuestamente encabeza la Secretaría de Educación del estado, Maribel Villalpando Haro, la que originó que el bulevar López Portillo se mantuviera bloqueado horas y horas y horas.
Al inoperante actuar de la funcionaria, que ha demostrado que es muy buena para repartir despensas y apoyos electoreros como Servidora de la Nación, pero que, de administración pública, diálogo, respeto a la ley y trabajo no le sabe nada, se suma el hecho de que el primer piso de La Casa de los Perros continúe vacío.
Para asombro de los zacatecanos que se quedaron entrampados en el tráfico por la protesta de los maestros federalizados a los que no les han pagado desde hace cinco meses, la nueva gobernanza brilló por su ausencia.
Como acostumbran, todos los funcionarios de la 4T versión Zacatecas corrían de un lado para otro, como gallinas sin pescuezo, sin saber siquiera qué hacer, mientras desde la oficina de Comunicación Social, el silencio y la nula estrategia de comunicación ahí estuvo, contribuyendo una vez más a la desgracia de este gobierno.
Y mientras el inquilino de La Casa de los Perros, después de hacer honores a la bandera, se reunía, por fin, con los presidentes de las cámaras empresariales, su equipo de trabajo se dedicaba a lo que bien le entiende: hacer quedar mal al jefe.
Y es que tal parece que los integrantes del gabinete del gobierno de Morena tienen una misión: que a David Monreal Ávila le vaya mal, muy mal. Y en eso se empeñan todos los días.
De la secretaria general de Gobierno, Gabriela Pinedo Morales, ni sus luces.
De la secretaria de Educación, Maribel Villapando, tampoco.
Por eso, los docentes afiliados a la Sección 34 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), encabezados por Soralla Bañuelos de la Torre, bloquearon el bulevar y ahí estuvieron, en espera de que alguien, por caridad de Dios, les diera una luz sobre el paradero del pago que desde agosto del año pasado les deben a 400 docentes de Educación Inicial, Preescolar, Primaria, Secundarias Técnicas, Secundarias Generales, Educación Especial y Educación Física.
La Secretaría de Educación es un monstruo de mil cabezas al cual Maribel Villalpando no ha podido controlar. Ella, como es su costumbre, sólo está lista para ser comparsa en la repartición de útiles escolares y uniformes. Pero nada más.
Fue hasta que los manifestantes amenazaron, ya cuando la obscuridad invernal permeaba, con quedarse a dormir en casas de campaña en pleno bulevar, que la autoridad signó un acuerdo con la promesa de que el recurso supuestamente será dispersado la primera quincena de febrero. Las demás peticiones las atenderán después. Algún día.
El desastre inició cuando la petición de Soralla Bañuelos de dialogar directamente con Villalpando Haro fue descalificada. La funcionaria simple y sencillamente se negó a dar la cara.
Y así como se ocultó para comparecer ante los integrantes de la LXIV Legislatura, está vez también hizo todo lo posible para mantenerse en su bunker, escondida y envuelta en indolencia.
Los problemas administrativos, que por cierto no se presentan en ningún otro estado, tiene hoy a cientos de docentes sin salario. Como si vivieran del aire.
Además, por si la incompetencia no les alcanzara, desde la Secretaría de Educación se mantiene a otro tanto de docentes con doble carga de trabajo, lo que se traduce en que haya 160 grupos escolares sin docentes.
También hay 216 horas que no han sido asignadas en secundarias generales y técnicas, lo que trae una afectación directa a unos cuatro mil 800 alumnos.
El bloqueo de ayer, a nadie le queda duda, es un fiel reflejo de que este gabinete no ayuda a David Monreal. Pero también es un llamado urgente al gobernador a que ponga orden en su equipo de trabajo.
Despedir a los ineficientes no es un delito y sí es una desgracia mantenerlos ahí recibiendo un salario que ni por equivocación desquitan.
Ilusos
En el peligrosísimo municipio de Guadalupe se registró un ataque armado en contra de un elemento de la Policía Municipal.
El hombre llevaba a su pequeña hija a la escuela cuando sujetos, con la firme intención de ejecutarlo, dispararon sin ton ni son hiriendo a ambos.
Como el ataque sucedió el día que el policía tomaba su descanso, el secretario de Seguridad Pública, Adolfo Marín Marín, sólo atinó a decir que se trató de una acción de “cobardes”.
El problema es que con esta cobarde agresión a un miembro de los cuerpos policiales ya suman dos en el mes. La primera sucedió en el peligrosísimo municipio de Trancoso, cuando el 9 de enero, un policía penitenciario, también en su día de descanso, fue ejecutado a balazos.
Aún y con el antecedente de que Zacatecas es la entidad más letal para los policías, el ayuntamiento de la capital, que encabeza Jorge Miranda Castro (porque sí hay presidente municipal, aunque pareciera que no), tiene la ilusión de que alguna persona “con vocación de servicio, honorabilidad, disciplina y que cumplan con los requerimientos”, se anime a reclutarse a la corporación de la Policía Municipal para recibir un sueldo mensual de 15 mil 600 pesos, más bono de despensa. ¡Anímense!
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