La Casa de los Perros: Priistas al borde de un ataque de nervios
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Priistas, panistas y perredistas de Guadalupe, en su mayoría mujeres que andan suspirando por ser candidatas a lo que sea, se retrataron muy sonrientes y casi abrazados al concluir reunión en la sede del tricolor.
Pero la verdad es que nadie esperaba que llegaran unas 15 aspirantes con uñas y dientes, literal, buscan adueñarse de una candidatura sea como sea.
Están en disputa el Distrito local III, hoy en manos de un diputado que era del PT, que se cambió a medio camino a Morena, que recibía espaldarazos desde La Casa de los Perros para apoyar las iniciativas del PRI y del todavía inquilino de esta finca, que es apodado en el bajo como Lolo y a quien le gusta retratarse con Mario Delgado al que, dicen algunos, ya le ofreció algunos negocios con su constructora con tal de no quedar fuera de la boleta electoral.
El otro distrito que está en juego es el IV, que ganó gracias a Andrés Manuel López Obrador, la morenista Alma Dávila Luévano y que hoy quiere retener a través de la reelección, cosa muy lejana porque como “no ha pedido perdón” a los Monreal por lo hecho, o pensado hacer por ella, sus familiares, sus amigos y sus antepasados, ha sido definitivamente borrada de la lista.
Así las cosas, en Va por Zacatecas, las cosas se calientan y de la mano de Osvaldo Ávila Tizcareño, el salvador de Guadalupe, estas mujeres quieren llegar a Congreso a cobrar como se debe por hacer poco.
Así, se agarraron del chongo la actual diputada plurinominal Perla Martínez, quien por cierto habría reprobado el examen de la Fundación “Jesús Reyes Heroles”, lo que la dejaría fuera de cualquier aspiración; Isadora Santibáñez, la que trae más trabajo y, por lo tanto, más canicas en Guadalupe; Flor González, a quien conocen por registrarse como aspirante a una diputación y también a la alcaldía, pero nada más; Petra García, quien por si las moscas se registró ya como candidata independiente a la alcaldía, y Erika del Cojo, quien ya fue síndica de Guadalupe y ahora apareció otra vez de la nada.
Estas priistas, muy agresivas dicen los que ahí anduvieron, quieren no sólo el Distrito IV, que es el siglado al tricolor, sino también el III, que supuestamente le tocaría al PRD, además de la sindicatura, las regidurías y las plazas de la intendencia, por si algo se ofrece.
En sus dimes y diretes también optaron por hacer a un lado a Maritere López García, la única panista en la reunión y quien, al final de cuentas, si se lleva a medición este asunto, hasta les podría dar un susto a las del Revolucionario Institucional.
Las priistas se dijeron tan seguras de sí mismas que dejaron con los ojos de plato al propio Miguel Torres Rosales, el perredista que ya tiene en la bolsa la candidatura a la diputación federal por el Distrito IV y que se ha convertido en el negociador con más aplomo en estos desgarriates, cuando dijeron que, si las medían con David Monreal, hasta a él le ganaban.
Osvaldo Ávila tampoco sabía para dónde hacerse y optó por mejor no moverse o hasta su candidatura le andaban bajando.
La duda que surgió tras la reunión fue: si estas priistas son tan reconocidas y cuentan con todo el respaldo de la gente de Guadalupe, para qué entonces se juntaron con el PRD y el PAN si ellas pueden solas. En sus ínfulas olvidan que el actual alcalde morenista, Julio César Chávez, le ganó al tricolor con una diferencia nomás de 20 mil votos. Bien raro todo.
Equidad
La pandemia, en el 2020, echó por la borda la realización del Festival Cultural Zacatecas que, al final, y a regañadientes, terminó siendo un evento virtual que, si bien gustó a los internautas, obviamente no tuvo el impacto esperado.
Este año, para como pintan las cosas, y ante el fracaso de la campaña nacional de vacunación contra el coronavirus emprendida por el gobierno de la 4T, lo más seguro es que otra vez el Festival Cultural deba ser suspendido, aunque la palabra no les guste a los del gobierno diferente,
Y así, mientras son peras o manzanas, los artistas locales ya andan desesperados buscando que alguien en el Instituto Zacatecano de Cultural los voltee a ver y los contrate para presentarse vía Internet, como deberá ser este 2021. Ni modo.
Por lo pronto, el colectivo “No Vivimos del Aplauso Zacatecas” pide a Alfonso Vázquez Sosa que a diferencia de lo sucedido el año pasado, esta vez sí tomen en cuenta a los artistas locales y las contrataciones sean, mínimo, 70-30 con favor a los de casa.
Pero eso sí, quieren que haya una convocatoria pública y equitativa para dejar a un lado el uso discrecional tanto de los recursos como a la hora de seleccionar a los participantes, y que la lista de los encargados de dar el veredicto sea conocida por todos y no sea el secreto mejor guardado del IZC.
Y ya entrados en las peticiones, los artistas quieren que el pago que se les otorgue por sus servicios sea justo y digno, y que no solo desembolsen el dinero a manos llenas a quienes ni viven ni gastan en Zacatecas.
Apoyo universitario
El rector de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Antonio Guzmán Fernández, luego de que la propuesta de la 4T para vacunar a los mexicanos contra el coronavirus nomás no funcionó y se convirtió en un acto meramente electorero que pone en riesgo la salud de millones, puso a disposición del siempre sordo gobierno de México, los conocimientos y recursos que tiene la Máxima Casa de Estudios para participar en serio en el Plan Nacional de Vacunación.
Por lo pronto estarían listos los estudiantes de Ciencias de la Salud para integrarse en las Brigadas de Vacunación, además de que ponen a disposición las áreas físicas del Campus UAZ Siglo XXI, para instalar de centros de vacunación y que los pobres, pero ya vacunados servidores de la Nación no anden en las colonias y comunidades, casa por casa, con su bien puesto chaleco de Morena, perdón, del gobierno de la 4T, nomás dando lástima.
Antonio Guzmán ofreció además tres ultracongeladores para el almacenamiento y conservación de las vacunas.
Ya ves que sí se puede.
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