La Casa de los Perros: Los aviadores de Comunicación Social
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Burocracia, ineficiencia y pago de favores políticos son las características que identifican, a kilómetros de distancia, a la Coordinación de Comunicación Social del Gobierno del Estado. Un monstruo que mantiene 36 «jefes de prensa» en igual número de dependencias, cuya productividad es nula.
Durante el pasado sexenio, los titulares jamás lograron promover las cosas buenas que pudiera haber realizado el gobernador en turno, convirtiéndose así en la dependencia que más problemas de imagen le generó a Miguel Alonso Reyes.
Fueron los coordinadores Patricia Mercado y J. Guadalupe Soto Landeros, quienes con evidentes conflictos de interés, navegaron por esa oficina favoreciendo a sus cuates y familiares, llevando a la Coordinación a la quiebra. El dinero nunca les alcanzaba y por ello, con la mano en la cintura se dedicaron a solicitar ampliación tras ampliación de presupuesto que benefició los bolsillos de unos cuantos.
A ello, se le sumaron los yerros cometidos, a diario, uno tras otro, producto solamente de unos titulares faltos de profesionalismo y honestidad.
Según un análisis de la productividad de las oficinas de prensa, hasta septiembre del 2016, dependencias como el Inselcap no emitió un sólo boletín, mientras que la Coordinación Jurídica, la Secretaría de Administración y Oretza lograron enviar a los medios de comunicación uno en todo el año. La Junta de Monumentos alcanzó la extraordinaria cifra de tres boletines. Iban ya de gane.
Las más productivas resultaron ser la Sezac, con el periodista Jonahtan Santoyo al frente, con 105 boletines, y Semujer, con la también periodista Mary Chávez, con 84. Y párele de contar.
De hecho, de enero a septiembre del 2016, la Coordinación de Comunicación, con Soto Landeros al frente, emitió mil 405 boletines, algo así como 3.84 por día. Esto quiere decir que, en promedio, cada uno de los 36 jefes de prensa entregaron a los zacatecanos, 3.25 boletines al mes.
Finalmente, si no tenían nada que informar, lo más lógico era llevar a cabo una depuración y mandar a su casa a aquellos que sólo llegaban ahí a calentar la silla, utilizar el Internet para fines personales, o simplemente pasarla campechanamente. Total, qué tanto es tantito.
A todo este desastre se suma el hecho de que al llegar el nuevo coordinador, Héctor Alvarado Gómez, se encontró con una lista de al menos una veintena de personas que tienen como especialización la aviación.
Sí, Guadalupe Soto Landeros heredó hasta una oficina de representación en Fresnillo, la que dijeron habría sido desmantelada –aunque la verdad es que jamás existió–, pero cuyos encargados siguen cobrando puntualmente su salario.
Además que, no se debe pasar por alto, Guadalupe Soto le dio trabajo a su hijo, a quien ubicó en el área de «redes sociales».
P
or ello, a la primera reunión que sostuvo Alvarado Gómez con los beneficiarios de la gordísima nómina acudieron personas que jamás nadie había visto trabajando por ahí, pues ni a cobrar acudían, les depositaban su salario ganado con harto esfuerzo en su tarjeta. Ni esa molestia se tomaban.
El problema surge cuando el hoy coordinador, a pesar de haberse comprometido con tres periodistas, incluida quien esto escribe, a entregar la lista de los aviadores, se negó con el pretexto de que «antes no trabajaban pero ahora ya los puse a trabajar», cosa que no es del todo cierta, pues hay algunos que mantienen su condición de fantasmas.
Además, la obligación de Héctor Alvarado, en concordancia con el gobierno diferente, era denunciar de manera inmediata la conducta corrupta de su antecesor ante la Secretaría de la Función Pública, no negar la información a un medio de comunicación ¿qué ironía no?, y menos, mucho menos, mandarlos a trabajar.
Y es que, por ejemplo, las fracciones X a XII del Artículo 215 del Código Federal prevén sanciones para aquellos funcionarios que contraten aviadores, y también para aquellos que reciben un salario sin devengarlo de manera honesta, es decir, trabajando.
Este delito cometido en la Coordinación de Comunicación Social es penado con una pena de uno a ocho años de prisión, de 50 hasta 300 días de multa y destitución e inhabilitación de uno a ocho años para desempeñar otro empleo, cargo o comisión públicos. Igual sanción se debe imponer a las personas que acepten los nombramientos, contrataciones o identificaciones a que se refieren las fracciones X a XII.
Hoy, que el inquilino de La Casa de los Perros, ha dicho hasta el cansancio no sólo que es el más honesto del mundo mundial, sino que no aceptaría ninguna conducta irregular de parte de su equipo, ponga cartas en el asunto ya.
Por lo pronto, esperamos que Héctor Alvarado haga pública la lista de los aviadores, para evitar suspicacias y que vayamos a creer que es cómplice de esta vergonzosa situación. Tan fácil que era ser transparente.
A parir chayotes
Finalmente, el TEPJF, en su Sala Monterrey, decidió abrirle el camino a Emilia Pesci y Jaime Enríquez, para que puedan participar en la elección extraordinaria del próximo 4 de diciembre, cuando zacatecanos irán a las urnas a votar por su nuevo alcalde capitalino.
Esta decisión sin duda pondrá a parir chayotes a los partidos y sus candidatos, ya que es bien seguro que la inconformidad ciudadana hacia los gobiernos priistas, a los enjuagues perredistas y a la negativa de Morena de participar, se canalizará hacia la joven que, sin rubor, tomó la Tribuna, les dio lecciones de lectura y valentía a los diputados, todo para exigir sus derechos.
Ahora sí, que se caliente la elección extraordinaria.
Monreal vs Cuarón
Y que Ricardo Monreal, muy en su papel de delegado de la Cuauhtémoc, le quita sus conos al afamado director del cine Alfonso Cuarón y provoca tremendo zafarrancho.
Los unos acusan agandalle al cerrar las calles en la Tabacalera; los otros que los dejaron limpios y cargaron con celulares y hasta dinero.
Pero de que el video, transmitido en vivo vía Periscope, está muy divertido, lo está. Lánzate a mi cuenta de Twitter si te quieres reír un rato.
Twitter: @lasnoticiasya @claudiag_valdes
