La Casa de los Perros: el único que sí está en lo que debe estar
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Cuando la nueva gobernanza llegó a Zacatecas, hace ya tres años, la conformación del gabinete se convirtió en el problema más serio al que se enfrentó el inquilino de La Casa de los Perros.
El incrustar a personajes sin la menor experiencia y sólo como pago de favores electorales, cubrir cuotas a los cuates y cumplir caprichos trajo como consecuencia el desastre que vive Zacatecas.
Secretarios que no cubren el perfil, que no trabajan, que se someten, que están ahogados en subejercicios devolviendo recursos a la Federación por no cumplir con sus obligaciones son sólo apenas unas migajitas de la realidad.
De ahí que el contar con un funcionario como Ricardo Olivares Sánchez en la Secretaría de Finanzas es como una bocanada de aire puro y fresco.
Exsenador y especialista en materia fiscal, Olivares Sánchez es reconocido como el creador de los Impuestos Ecológicos en México. Su visión federalista al implementar este gravamen lo distingue de sus compañeros de gabinete que, hasta el momento, siguen sin conocer la O por lo redondo.
Ricardo Olivares ayer se presentó en la Glosa en el Congreso del Estado y los diputados, los oficiales, sus aliados y los de la oposición, sin excepción, reconocieron su trabajo.
El secretario de Finanzas remarcó ante el pleno lo que hasta el momento ha sido su mayor logro: la no contratación de deuda ni de corto ni de largo plazo, además de que no se ha solicitado adelanto de participaciones y, mucho menos, hubo reducciones al gasto público.
Porque no se debe olvidar que en el ejercicio fiscal 2023, Zacatecas sufrió la caída de ingresos por casi tres mil millones de pesos, la más fuerte en todo el país, y todo porque hubo un desplome en los ingresos petroleros; la recaudación federal participable igual a la baja; la reducción del IEPS; otros fondos en los que quedó fuera la entidad, y los cambios en el cálculo del PIB por parte del INEGI.
Como quien dice, puras desgracias.
Por eso, explicó a los diputados, todas están malas noticias se compensaron con el Fondo de Estabilización del Estado de Zacatecas, por cierto, único en su tipo en el país; el Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas; además del superávit de ingresos propios y unos 498 millones de pesos de diferencias por responsabilidad financiera.
Así, en la Secretaría de Finanzas sacaron la casta porque, dijo Olivares Sánchez: “no podemos regresar a esos tiempos de seguir endeudando al estado”.
Total, que la libraron. El déficit fue de 354 millones de pesos, y nada más, cuando las cosas pintaban para algo peor.
Y como las cosas han ido tan bien, el funcionario que sí está en lo que debe estar, para blindar al estado de nuevo endeudamiento trajo a Zacatecas la Ley Antiquebranto, porque ya es tiempo de que la administración saliente se tome tan en serio eso del año de hidalgo y deje las arcas en ceros.
Y si no que le pregunten a Miguel Varela Pinedo, Javier Torres Rodríguez y Rodrigo Ureño Bañuelos que heredaron puras penas de los gobiernos morenistas.
Ricardo Olivares detalló además que como parte de la disciplina financiera para regular la contratación de nueva deuda pública se deben tener ojos en todas partes, de ahí que si a alguien se le ocurre realizar una consulta pública se llevará a cabo sí, y sólo sí se reúnen los requisitos establecidos en la nueva legislación. Si no, pues no.
Mientras los diputados ponían cara de entender lo que el funcionario les decía, se destacó que el sistema de alertas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público HCP, ubica a Zacatecas con un nivel de endeudamiento sostenible, con un 15 por ciento de ingresos excedentes que son de libre aplicación.
De ahí que existe una mejora en la calificación crediticia, por lo que Zacatecas no sólo tiene estabilidad financiera, sino que no tiene comprometidas sus finanzas.
Ricardo Olivares también presumió que Zacatecas se ubica en primer lugar nacional con mayor eficiencia recaudatoria.
El funcionario adelantó que para noviembre se presentará el paquete económico a la LXVI Legislatura, y prometió a los diputados que será un presupuesto con responsabilidad, privilegiando equilibrio fiscal, con una perspectiva municipalista.
Al final, los legisladores lo felicitaron, lo agasajaron, lo festejaron y todos fueron felices. Harto contentos.
Sólo les faltó gritar: ¡Ricardo gobernador, Ricardo gobernador!
El tercero en homicidios
A ocho días de que Claudia Sheinbaum tomara las riendas de la presidencia de México, sin lugar a duda no había habido uno tan triste para la nueva gobernanza y los creadores del famosísimo año de la paz como el de ayer.
Muchas lágrimas rodaron de las rozagantes mejillas de quienes se ufanan todos los días de que la paz por decreto ha llegado a Zacatecas, cuando ayer salió a escena el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, en la conferencia matutina de Sheinbaum.
El flamante funcionario presentó la gráfica que mostraba la tasa de homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes en los estados.
Y ¡zaz!
Resulta que el informe reveló cifras alarmantes en varias entidades del país durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, el más violento en la historia de México.
De enero de 2018 a septiembre de 2024, los números muestran que los tres estados con la mayor tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes son: Colima con el 94.7 en el primerísimo lugar; Baja California, con el 69.82 en el segundo lugar, y Zacatecas, con el 57.81 en el tercer lugar.
Las tres entidades son gobernadas por Morena, por eso el enojo de la presidenta porque, según la narrativa de la 4T, Guanajuato gobernado por el PAN es lo peor del mundo mundial y no estaba ahí entre los violentos, por eso, rauda y veloz pidió que cambiaran la gráfica para mostrar sus datos.
Claro que el error de García Harfuch de inmediato sirvió para que las redes se dieran vuelo. La diputada federal Noemí Luna Ayala fue una de las que no dejó pasar el momento para resaltar no sólo que esas tres entidades están vestidas de guinda, sino que además tienen en común, posteó: una estrategia federal de seguridad fallida y pésimos gobiernos estatales.
La cuestión es que las palabras del representante del gobernador, Rodrigo Reyes Mugüerza que se atrevió, orondo como es él, a gritar a los cuatro vientos: “la administración encabezada por el mandatario estatal David Monreal Ávila quedará en la memoria de la ciudadanía como la que pacificó a Zacatecas”, con esa gráfica del secretario de Seguridad se fueron al caño.
Ni modo. Ahí será para la otra. Mientras que hasta la nueva gobernanza disfrute lo votado
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