La Casa de los Perros: Alejandro Tello y Morena
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
En Zacatecas, 366 mil 371 ciudadanos decidieron que querían que Andrés Manuel López Obrador fuera el próximo presidente de México, 27 mil 572 más los que en el 2012 se decantaron por el priista Enrique Peña Nieto. Ellos, credencial en mano, acudieron el 1 de julio a su casilla y cumplieron con su obligación ciudadana.
Sin presiones, marcaron su boleta con la esperanza de que el PRI-gobierno no sólo saliera de Los Pinos, sino de que los actuales representantes populares entendieran que su actuar no es bien visto y que urgen cambios inmediatos.
Fueron los Distritos III y IV en dónde López Obrador obtuvo el mayor número de votos. En el de Zacatecas se contaron 99 mil 44 votos y en el de Guadalupe, 98 mil 571 sufragios.
En los Distritos I, de Fresnillo, los votos para AMLO fueron 89 mil 136; en el de Jerez, tierra blanquiazul, los sufragios sumaron 78 mil 159.
El mensaje fue claro y contundente, tanto que la participación este 1 de julio fue del 65.23 por ciento.
Por ello, el inquilino de La Casa de los Perros, a pesar de que su candidato, el priista José Antonio Meade, hubiera perdido, salió el 2 de julio por la mañana a felicitar, no a reconocer el triunfo, ese ya había quedado claro en las urnas, del de Morena, y todo por una simple razón, tenía que comenzar a tejer fino para que a Zacatecas le vaya bien.
Durante la campaña, los funcionarios del gobierno diferente colmaron las redes sociales, por ejemplo, con fuertes descalificaciones hacia el tabasqueño que, a partir de diciembre, comenzará a gobernar el país. El mismo Tello Cristerna organizó y encabezó, por dar sólo un ejemplo, una comida privada en Jerez para manifestar su apoyo incondicional al priista, cuando este visitó la entidad en plena campaña proselitista.
De ahí que, como el propio Alejandro Tello Cristerna lo confirmara, la noche del 1 de julio tomó el teléfono para felicitar personalmente a López Obrador, que el virtual presidente electo no le contestara la llamada eso ya es otro cantar. Pero el intento se hizo. Hasta hoy, la relación entre el gobernador de Zacatecas y el próximo presidente de la República no existe, pero con el tiempo se construirá, de eso estamos seguros.
Este jueves, a invitación expresa de Manuel Velasco, mandamás en Chiapas, verde ecologista y presidente de la Conago, López Obrador se reunirá con todos los gobernadores y, obvio, Tello Cristerna está invitado; ahí tendrá la oportunidad de saludar personalmente al ganador de la elección del 1 de julio e iniciar una relación constructiva para que los siguientes años, o al menos los tres que a Alejandro Tello le quedan como jefe de la administración gubernamental, las cosas sean provechosas para Zacatecas.
Hoy, la relación dista mucho de ser estrecha, pero en bien de todos, y sabiendo el cariño especial que hay, de ambos, por Zacatecas, los agravios surgidos en campaña quedarán atrás y comenzará un trabajo que, todos esperamos, saque del atolladero a la entidad.
Las primeras muestras
Y una muestra de que hay interés de Alejandro Tello porque se superen los tiempos electorales y se inicie un trabajo en pro del estado son las reuniones que ha comenzado a sostener con los ganadores, de todos los partidos, no sólo del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Ayer, Saúl Monreal Ávila, alcalde electo de Fresnillo, acudió a La Casa de los Perros y ahí sostuvo un encuentro privado con Tello Cristerna. Ellos dos estuvieron solos, sin que nadie los molestara o interrumpiera. Platicaron a gusto, con respeto, y con altura de miras.
De hecho, el benjamín de los Monreal salió muy contento del encuentro, reconociendo de antemano el trato recibido, y con la certeza de que, por Fresnillo, ambos trabajarán de la mano. Tan bien estuvo la reunión que Saúl, no había cruzado por completo la Plaza de Armas, cuando varios funcionarios del gobierno estatal ya se comunicaban con él para iniciar la revisión de planes y proyectos. La orden de Tello Cristerna fue clara y de inmediato se acató.
A trabajar se ha dicho
Saúl Monreal, con el respaldo que le da haber obtenido la votación más alta que un candidato a alcalde recibió en Zacatecas, no quiere perder el tiempo y le planteó al gobernador que su prioridad es la seguridad para los fresnillenses. Ambos coincidieron en esa apremiante necesidad y, por lo pronto, la promesa de un trabajo coordinado ya se dio.
El próximo alcalde de El Mineral también le esbozó el proyecto de la construcción de un anillo periférico que iniciaría en Chilitos y concluiría en el puente del Jorobado. La revisión de este ambicioso proyecto, señaló Alejandro Tello, tendría de entrada su respaldo, por ello, el titular de la Secretaría de Infraestructura, Jorge Luis Pedroza, de inmediato se comunicó con Saúl Monreal para iniciar su revisión.
Pero como Saúl lleva prisa, también se reunió ya con el fiscal general, Francisco Murillo Ruiseco, y hasta con el secretario de Finanzas, Jorge Miranda Castro. Y, como el día tiene 24 horas, también encabezó el arranque de los trabajos de entrega-recepción, en un ambiente de colaboración, con el actual jefe del Ayuntamiento, Pepe Haro de la Torre.
Alejandro Tello y Saúl Monreal son hoy el ejemplo de que las cosas sí se pueden hacer. Que, a pesar de las diferencias ideológicas, que todos sabemos las hay, puede haber un trabajo específico cuya única finalidad sea el desarrollo económico y social de los zacatecanos.
Según lo adelantó el propio gobernador, esta misma semana recibirá a su ex colaborador, Julio César Chávez, quien abandonó el barco tricolor para pasarse a las filas de Morena, desde donde se ganó el derecho a gobernar Guadalupe; también se reunirá con Ulises Mejía Haro, el próximo alcalde de la joya de la corona, la capital de Zacatecas.
También, necesariamente, habrá reuniones con Soledad Luévano y José Narro, futuros senadores de la República, así como con Mirna Maldonado, Alfredo Femat y Samuel Herrera, próximos diputados federales de extracción morenista.
Poco le duró el gusto
Luego del lamentable papel que Víctor Manuel Carreón Velasco jugó como representante del Gobierno de Zacatecas en la Ciudad de México, se tomaron las medidas necesarias y este servidor público ya habría hecho sus maletas para que Raúl Rodríguez Márquez, el candidato perdedor al Senado de la República, se reintegre nuevamente a sus funciones.
Y aunque el gobierno no es una agencia de colocación de quienes no pudieron ganar la elección, también se reconoce el trabajo que algunos venían haciendo y, por ello, para enderezar ese barco, el del Verde Ecologista vuelve a las oficinas de Zacatecas en la capital del país.
Lo importante será que así como se le abre un espacio a quien sí trabaja, también se comience a depurar la administración de quienes sólo hacen bulto y no contribuyen a que al estado le vaya bien.
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