Risaterapia, antidepresivo para liberar ansiedad
La risa es un liberador de ansiedad que disminuye la presión arterial, vigoriza el corazón y libera endorfinas que generan una sensación de plenitud y paz. Por ello, en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) se cuenta con la participación de grupos que acuden a los hospitales del organismo para practicar la risaterapia.
Dicho tratamiento es una actividad de interacción entre dos o más personas, con la finalidad de mejorar el estado de ánimo de pacientes trasplantados, así como en los servicios de oncología y hematología, entre otros.
María Lydia Rodríguez Moreno, jefa de Trabajo Social del Hospital General del Centro Médico Nacional (CMN) La Raza del IMSS, dijo que niños entre seis y diez años son los principales derechohabientes beneficiarios de esta terapia.
Las personas que otorgan la risaterapia están capacitadas para realizar el tratamiento mediante el trato directo con pacientes, en un ámbito de respeto, con el que logran pasar un tiempo agradable mediante risas, detalló.
Dicha interacción se lleva a cabo a través de ejercicios y juegos grupales, que potencian el sistema inmunológico, utilizando técnicas que ayudan a liberar la tensión del cuerpo como expresión corporal, danza, juegos, ejercicios de respiración y masajes. Las sesiones de risaterapia se llevan a cabo dos o tres veces por semana.
Rodríguez Moreno comentó que reír es un aliciente para las personas, que los motiva a seguir realizando sus actividades; es antidepresivo y, por lo tanto, genera pensamientos y acciones positivas.
Por ello, detalló, la risa no es exclusiva de pacientes que se encuentran hospitalizados, sino para la población en general, ya que los actuales estilos de vida, sobre todo en las grandes ciudades, provocan estrés que deriva, principalmente, en problemas de salud.
Recomendó que reír 10 minutos al día ayudará a las personas a liberar la ansiedad, fortalecer vínculos con la familia o amigos y sentir plenitud. Además, mejora la función del sistema circulatorio y permite un mejor descanso.
Un niño se ríe en promedio 300 veces al día y un adulto, entre 15 y cien veces. Los pequeños ríen más porque la visión que tienen del mundo es muy diferente a la de los adultos.
En contraparte, un adulto se encuentra en constante estrés por las responsabilidades y obligaciones que va adquiriendo; no obstante, tanto niños como adultos tienen la misma capacidad de reír tantas veces quieran y con ello prevenir problemas de salud.