La ineficiente capacidad de Trump para controlar una crisis
RAÚL SILVA TORRES
La madrugada del viernes 30 de septiembre, el aspirante republicado a la Casa Blanca, Donald Trump no pudo dormir. Utilizó como válvula de escape a su insomnio, su cuenta personal de Twitter para atacar a su adversaria política, Hillary Clinton.
Desde el debate presidencial del lunes por la noche, no pudo o supo contener la crisis mediática que lo ha perseguido; contrario a extinguir el fuego lo reavivado con comentarios en contra de la ex Miss Universo, Alicia Machado.
Su conducta misógina je ha traído como consecuencia un declive en la preferencia electoral de los estadounidenses.
Trump posteó su primer tuit a las 3 de la mañana hora de Estados Unidos del viernes en el que escribió: «Cada vez que vea una historia sobre mí o mi campaña diciendo ‘dijeron fuentes,’ no lo crea. ¡No hay fuentes, no son más que mentiras!».
El segundo tuit, a las 5.14 am: «Vaya, Hillary fue engañada y utilizada por mi peor Miss Universo. Hillary la trató como un «ángel» sin comprobar su pasado, el cual es terrible!
«El uso de Alicia M en el debate como un ejemplo de virtud sólo demuestra que Hillary sufre de MAL JUICIO! Hillary fue estafada», escribió a las 5.19 am.
«¿Hillary ayudó a la repugnante (echen un vistazo a su video sexual y su pasado) Alicia M a convertirse en una ciudadana de EEUU para que pudiera usarla en el debate? concluyó a las 5:30.
La realidad es que Trump no pudo contener la crisis, definida como “cualquier evento que amenaza la imagen y reputación de una institución, compañía o persona, que tiene el potencial de generar publicidad negativa y de tomar un tiempo extraordinario por parte del equipo directivo para enfrentarlo”.
La noche de ese viernes fue inquietante para el republicano. Los hechos reflejan su poca capacidad para enfrentar estados de crisis, pues dedicó la madrugada del viernes para desahogarse en su Twitter.
Por su parte, Hillary Clinton calificó los tuits de Trump contra Alicia Machado como un acto desquiciado, y consideró que él «no está temperamentalmente apto» para ser presidente de Estados Unidos.
Recordemos que Clinton ventiló, durante el debate presidencial, los maltratos que padeció la ex Miss Universo venezolana por parte de Trump, llamándola «Miss Piggy», por haber aumentado de peso, y » Miss Housekeeping», por ser latina.
Tras el debate y los escándalos del aspirante republicano, Hillary Clinton remontó en las encuestas, logrando una diferencia de tres puntos, según un sondeo publicado este viernes por la canal Fox News.
La candidata demócrata recibe el 43% de la intención de voto de los electores susceptibles de ir a las urnas, contra un 40% para el republicano.
Clinton contaba con 41% de las intenciones de voto y Trump con 40% en un sondeo precedente realizado por la misma cadena antes del debate.
Las cosas no parecen frenar la actuación de Trump, pues ha declarado que utilizará como arma de ataque las infidelidades de Bill Clinton para desacreditar a su oponente en el próximo debate presidencial del 9 de octubre.
Ha dejado en claro que hará pasar a Hillary como una encubridora de los ataques sexuales de su esposo contra las mujeres.
Cuando se presenta una crisis, lo importante es abandonar el estado de pánico, trazar objetivos; es decir, hay que ser más estratégico y menos emocional. ¿Trump lo logrará?…
* Periodista Independiente