La Casa de los Perros: Mal y de malas en el gobierno de Jorge Miranda
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Cuando Jorge Miranda Castro llegó al Auditorio Marcelino González, en donde ofreció su primer informe de actividades “al pueblo” de la capital de Zacatecas, las butacas estaban ocupadas en un 80 por ciento de su capacidad.
Cuando terminó su alocución, casi una hora de agradecimientos después, la prisa de los asistentes por abandonar el lugar era evidente. De hecho, el inquilino de La Casa de los Perros dirige su mensaje a un público que nunca le prestó atención. Todos iban rumbo a la salida. Esa era su prioridad.
La preocupación y molestia en el rostro del presidente municipal de Zacatecas no la pudo ocultar. Lo que quería él, y los asistentes, era que ese martirio llegara ya a su fin de una buena vez.
Cuando Jorge Miranda Castro llegó a la Presidencia Municipal de Zacatecas, abanderando al Partido Verde Ecologista, en alianza con Morena y el Partido del Trabajo, la percepción de inseguridad entre la población, según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) que realiza el INEGI, en septiembre del 2021, era del 86.1 por ciento.
Cuando se preparaba para cumplir su primer año al frente de la alcaldía, la realidad para el exsecretario de Finanzas en el sexenio de las herencias malditas resultó apabullante: del cuarto lugar a nivel nacional, Jorge Miranda consiguió llevar a Zacatecas, con un 90.4 por ciento, a ser la segunda ciudad más peligrosa para la población, en todo México.
Como quien dice, nueve de cada 10 capitalinos tienen miedo de vivir en la que hoy han optado por llamar “la capital de la transformación”.
Pero las malas nuevas para el presidente municipal de Zacatecas no terminan ahí. De hecho, él mismo las destaca en el mensaje al pueblo que brindó en la cancha de basquetbol.
Reconoce que, de parte del presidente de la fallida 4T, Andrés Manuel López Obrador –a quien primero da una estocada y después le soba asegurando que en Zacatecas sí tiene “apoyo” –, para el municipio no ha habido nada de nada.
Quien imaginaba administrar una fortuna como la que manejaba en la Secretaría de Finanzas se topó con “tiempos muy complejos para gobernar”, porque hoy, gracias a los diputados federales de Morena, y obvio a López Obrador, “no tenemos Fortaseg (Programa de Fortalecimiento para la Seguridad) que eran como 30 millones de pesos para la capital”, se quejó amargamente.
Y cómo no, si la desaparición de este programa acabó por desmantelar las estrategias de fortalecimiento de la seguridad de los municipios más afectados por el crimen, como Zacatecas.
Pero fue más allá en sus lamentos: “tampoco (tenemos) el Fondo Minero, que eran 50 millones de pesos que se invertían en infraestructura básica. Tampoco tenemos 3×1, ese recurso que el gobierno federal le ponía, el estado le ponía, los connacionales le ponían y el municipio también”.
Pero, aun así, ni su llanto ha servido para que los habitantes de la capital de Zacatecas se apiaden de él a la hora de evaluarlo.
Porque Miranda Castro, además de aguantar el fuego amigo en el Cabildo — de ahí el sutil llamando a la síndico Ruth Calderón Babum a dejar las grillas para el 24 y trabajar en unidad–, tiene que soportar verse como el peor alcalde de las capitales de país.
Ahora muchos entienden por qué siempre anda de malas el presidente. Y es que observar que la empresa Consulta Mitofsky, en el ranking de alcaldes lo manda al lugar 31 con apenas el 25.6 por ciento de aprobación no es para nada agradable. Y lo peor, su tendencia es a la baja.
Muchos achacan esa pésima calificación al arrastre que de él hacen desde la nueva gobernanza, pero la verdad es que, sea Chana o Juana, ese último lugar es un pesado lastre que nunca siquiera imaginó sufrir.
Porque observar horrorizado que un 74.7 por ciento de la población desaprueba su gestión sí debe ser feo, aunque quieran aparentar que no les importa, que se trata de pura percepción. Pues sí, esa es la percepción y ni modo.
Ayer comenzó a circular otra medición, de la empresa laencuesta.mx en donde sólo tres de cada 10 zacatecanos están de acuerdo con la gestión realizada por Jorge Miranda Castro en la capital de Zacatecas. Muy triste.
Pero como todo no puede ser tan trágico, gracias a CE&Research, otra empresa dedicada a medir el desempeño de los alcaldes le dio una buena al presidente municipal de Zacatecas. Del lugar 28 en agosto pasó al 14 en septiembre (aunque el mes todavía no haya concluido).
Lo difícil de entender es que el mes pasado la aprobación a su desempeño era del 52.1 por ciento, y esta vez es del 51.4, lo que quiere decir que todos los alcaldes en el país recibieron bajísimas calificaciones y eso ayudó a Jorge Miranda a escalar.
Y aunque diga que “la gente ve ahora a un gobierno que está trabajando sin improvisar”, y jure y perjure que ha sido polémico ya que ha afectado “grandes y mezquinos intereses” porque “gobernar no es para timoratos”, nadie le cree.
Menos cuando en el documento oficial de su informe los resultados no saltan a la vista. Las cifras, mediciones y comparaciones son escasas tirando a nulas.
Por ejemplo, en lo que se refiere a la seguridad que, en Zacatecas, es el tema de temas, dice que aplicaron 668 pruebas psicométricas a elementos de la Secretaría de Seguridad, y que tras calificarlas entregaron 166 certificados de salud mental, un requisito para la portación de armas.
Eso quiere decir que 502 pruebas tuvieron resultados reprobatorios. Entonces 502 elementos no tienen permiso para portar armas ¿o cómo?
Otra: Jorge Miranda dice en su informe que del 15 de septiembre de 2021 al 14 de junio de 2022 “logramos la expedición de 20 certificados para integrantes oficiales de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal de Zacatecas” que otorgan los Centros de Evaluación y Control de Confianza.
Es decir, los demás integrantes de dicha Secretaría ¿fueron evaluados, ya tenían la certificación, los volvieron a evaluar, reprobaron? Eso sí que sólo Obama lo sabe.
Refiere también que en mayo de 2022 se lanzó la convocatoria para reclutamiento de nuevos elementos “para nuestra policía”. Se ofertaron un aproximado de 100 plazas con todas las prestaciones de ley, pero se les olvidó anotar cuántas se ocuparon o si las 100, dadas las condiciones de inseguridad, siguen vacantes.
Una más: Informa Jorge Miranda que se practicaron a los elementos de la corporación un total de 24 exámenes de confianza de septiembre a enero de 2021; 15 más de enero a junio de 2022, y ocho para aspirantes de nuevo ingreso (que serían los que atendieron la convocatoria de 100 ¿verdad?). Pero lo mismo, nos quedamos con la duda de cuántos aprobaron, si los reprobados fueron despedidos, y si a final de cuentas sólo hay 47 elementos o, ¿a los demás no los evaluaron?
Total, pura confusión en un gobierno municipal patas para arriba.
Blindados de Zacatecas
En los límites de los estados de Coahuila, San Luis Potosí, Zacatecas y Nuevo León, se puso en marcha una base de operaciones mixtas para blindar la seguridad en esa zona.
Fueron más de cinco millones de pesos los invertidos en dicha base que contará con una sala de juntas, habitaciones con una capacidad para albergar hasta a 50 personas y las 24 horas del día, los 365 días del año, albergará a elementos de la Policía del Estado de Coahuila y Policía Municipal de Saltillo.
El lugar elegido fue el ejido La Ventura, que se encuentra al suroeste por la Carretera Federal 54, Saltillo-Zacatecas.
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