La Casa de los Perros: Los muertos de López Obrador
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, a unos días de las vacaciones de Semana Santa, aseguró, en el reality show “La Mañanera”, que este año, en Zacatecas, el homicidio doloso mensual promedio ha disminuido, ligeramente respecto al año pasado.
Los datos que ofreció el gobierno de la 4T señalan que, sumados enero y febrero, hubo una media de 79.5 casos, mientras que en el 2022 fue de 81.75. Como quien dice, se festeja una disminución de 2.25.
El problema es que las cifras no cuadran.
En La Mañanera aseguraron que, en Zacatecas, durante los 31 días de enero se presentaron 93 homicidios dolosos, cuando las cifras publicadas diariamente por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) indican que hubo 145 homicidios, siete homicidios más que enero de 2022.
Eso de tener otros datos y acomodarlos al contentillo es muy, pero muy raro. Y peor, muy mentiroso.
Siguiendo lo dicho en La Mañanera, resulta que aseguraron que en los 28 días de febrero se registraron 66 homicidios dolosos, cuando las cifras de la SSPC señalan que hubo 106, 22 crímenes más con respecto a febrero del 2022 que ellos dicen ahora fueron 56.
En La Mañanera dijeron que el año con más homicidios dolosos en Zacatecas fue el 2021, con mil 134 casos, de ahí que se presente una disminución de 156, pues en el 2022 fueron 981.
Hoy, según sus cifras, ya van 159 homicidios entre enero y febrero de este 2023, cuando la realidad que pinta diariamente la SSPC nos dice que no, que van 251, es decir, 22 homicidios dolosos más con respecto a los mismos meses, pero del 2022.
Pero ellos son felices con sus cuentas alegres y ¿quién carambas es uno para señalarlos como mentirosos? Pues nadie.
Y menos cuando se les recuerda que en los gobiernos neoliberales de Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón, las cifras, de por sí alarmantes, no llegaron nunca a lo visto hoy por todos los mexicanos.
Por ejemplo, en Zacatecas, entre el 2015 y el 2019, las cosas eran duras, feas, pero no tanto.
Ahí les va un ejemplo, en el 2015, cuando gobernaba el priista Miguel Alonso Reyes, se cometieron 215 homicidios dolosos. Las cosas se le comenzaron a complicar hasta llegar al 2018 con 561 crímenes. El doble.
Con el otro priista, Alejandro Tello Cristerna, las cosas no mejoraron, tanto así que en el 2020 los homicidios dolosos llegaron a los 789.
Ahora, en estos tiempos de transformación, pues las cifras se dispararon, aunque no les guste aceptarlo. Pero, hay que decirlo, en lo que va de marzo, las cosas sí pintan mejor. Hasta ayer se habían cometido 65 homicidios, comparados a los 76 que en el mismo periodo del 2022 ya se habían presentado en Zacatecas.
Los otros muertos de López Obrador
Y para que sigan diciendo que no son iguales, porque son peores, resulta que a los casi 150 mil muertos por homicidio doloso que van en este sexenio de la transformación, se suman algo así como 15 que desde ultratumba firmaron para cumplir capricho de López Obrador.
El Instituto Nacional Electoral (INE) impondrá una multa a la organización “Que Siga la Democracia”, de la morenista Gabriela Jiménez, que se encargó de promover ese costoso e inútil ejercicio de revocación de mandato del presidente López Obrador.
¿La razón? Pues nada menos porque presentaron las firmas de 14 mil 957 personas muertas.
Sí, estos son los otros muertos de López Obrador. Vaya, vaya…
Zacatecanos en el ojo del huracán
Hoy, ante el pleno del Senado, los integrantes del INAI, encabezados por la presidenta Blanca Ibarra Cadena, presentarán el informe anual de actividades.
Y claro que ahí estarán los zacatecanos Julieta del Río Venegas, y en su último acto oficial, Francisco Acuña.
Ellos, integrantes del INAI, quizás el último organismo autónomo de las locas decisiones de Palacio Nacional, se verán las caras con el líder de la Jucopo, Ricardo Monreal Ávila.
Los tres, en el ojo del huracán luego de que López Orador, terco como dice que es, insista en desaparecer a quien lo tiene en la mira y ha desvelado muchas transas del gobierno de la transformación. A través de mecanismos de transparencia que nomás no le cuadran a los de la 4T.
Sin duda, el evento sacará chispas y los zacatecanos que hoy juegan en las ligas mayores, sabrán sacar la casta por su tierra.
Vergüenza
Y por estos rumbos, se espera que hoy los integrantes de la LXIV Legislatura elijan a quien será la próxima magistrada del Tribunal Especializado en Justicia para Adolescentes.
La terna está integrada por Olivia Carlos Hernández, Ruth Lucio Sánchez y Liliana Velázquez Orozco. Y los que circulan por los pasillos del Congreso dicen que los dados ya están cargados a favor de Olivia Hernández.
Pero lo que muchos esperan con ansias locas es la lectura del dictamen de las comisiones que dice que sí, que sí procede el juicio político en contra de Maribel “N”, la funcionaria de la nueva gobernanza que, aunque cause risa, viajaría en la cajuela de su camioneta para que nadie la vea cuando llega a las comparecencias de la Glosa.
Luego de leer el dictamen, los diputados votarán a favor o en contra del dictamen y, si como todo indica procede el primer juicio político en contra de un funcionario en Zacatecas –dijeron que harían historia ¿no?—la Junta de Coordinación Política deberá nombrar una comisión instructora compuesta por tres diputados que se encarga de llevar a cabo el procedimiento.
El veredicto de esta comisión baja nuevamente al Pleno que decidirá cuál castigo se le impondría a Maribel “N”: destitución de su cargo o una inhabilitación. En este último caso entraría al juego el Tribunal de Justicia Administrativa, sí, ese en donde los magistrados cobran, pero ofrecen pocos resultados.
Por lo pronto, ante los nulos resultados que Maribel “N” ha entregado a los zacatecanos desde su encomienda en la nueva gobernanza –sólo figura como dama de compañía en la repartición de uniformes–, la vergüenza de ser sometida a un proceso de este tipo no se la quitará ni Obama.
Twitter: @lasnoticiasya @claudiag_valdes