La Casa de los Perros: Les gusta hacer, pero que no les hagan…

CLAUDIA G. VALDÉS DIAZ

Fue el 20 de octubre cuando tres mantas fueron colocadas en puntos muy visibles de Fresnillo, en las que, supuestamente, un cartel de la delincuencia organizada liderado por Ismael El Mayo Zambada acusaba al coordinador nacional de Ganadería, David Monreal Ávila, de haber dejado entrar a los del Cartel Jalisco Nueva Generación.

Este hecho revivió las quejas del senador Ricardo Monreal Ávila. La infamia, dijo, se hace presente otra vez y, por eso, los 12 hermanos cerraban filas a favor de David a quien, otra vez, le ponen piedritas en el camino para que no llegue a ser el gobernador de Zacatecas.

Claro está que, aprovechando la sesión ordinaria de la LXIII Legislatura, los diputados de Morena, Jesús Padilla Estrada y Héctor Menchaca Medrano salieron en defensa de quien, hasta hoy, no sólo ha guardado silencio con respecto a las denuncias en su contra por malos manejos en la Coordinación Nacional de Ganadería, sino también sobre este espinoso asunto.

Los legisladores dijeron que estas campañas negras y sucias no hacen bien al proceso electoral y por ello exigieron al fiscal general de Justicia, Francisco Murillo Ruiseco, y al presidente del Instituto Electoral del Estado de Zacatecas (IEEZ), Virgilio Rivera Delgadillo, que se ponga a trabajar, investiguen y castiguen al o los osados.

En el pleno había 20 diputados. Susana Rodríguez Márquez, del Verde Ecologista, secundó el Punto de Acuerdo de los morenistas y pidió que el asunto fuera de resolución urgente y se aprobará de inmediato. Fueron 19 los que levantaron su mano. Solo la priista Perla Martínez se abstuvo.

Y aunque la mayoría le dio el visto bueno y reprocharan este “un nuevo escenario de infamia, calumnia y mentira contra el puntero inobjetable de todas las encuestas, sondeos y opiniones públicas para la gubernatura de Zacatecas”, en los pasillos se escuchó fuerte y sonoro: Les gusta hacer, pero que no les hagan. ¡Auch!

De chivo los tamales

Una vez más es el alcalde morenista de Fresnillo, Saúl Monreal Ávila, quien le pone el cascabel al gato y, vía Facebook, hace manifiesto su enojo al evidenciar que la rifa del avión presidencial fue un circo mediático y nada más.

Resulta que, con bombo y platillo, en Zacatecas se celebró que el gordo de la lotería había caído justamente en El Mineral, y que el beneficiado era nada menos que el Hospital General del ISSSTE. Por lo cual 20 millones de pesos serían canalizados para cubrir las múltiples necesidades que ahí se tienen.

De hecho, la propia delegada de los Programas para el Desarrollo, Verónica Díaz Robles, festejó que la rifa del avión era la pura verdad y que Fresnillo y los zacatecanos resultaban beneficiados con la brillante idea del presidente de la República.

Pero resulta que ha pasado más de un mes y del premio mayor ni sus luces.

Por eso, Saúl Monreal Ávila denunció públicamente que habría una negra intención de impedir que el recurso llegue al nosocomio, como se prometió y procedió a hacer un llamado a su excuñada, a los directivos del ISSSTE y, claro está, a la Presidencia de la República, para que no intenten desviar ese dinero a ninguna otra institución.

De hecho, las denuncias por el incumplimiento han llegado también de hospitales y escuelas de Veracruz, Tamaulipas, Estado de México, Nayarit y Oaxaca que siguen esperando les hagan válido uno de los cien premios de 20 millones de pesos.

A garantizar derechos

En la sede nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y con la presencia del dirigente Jesús Zambrano, 40 organizaciones de la sociedad civil signaron un convenio de colaboración que obligará a los otros partidos a proceder de la misma manera.

Y es que, así como se garantiza por ley que el 50 por ciento de las candidaturas sea para las mujeres, el 30 por ciento para jóvenes y en Zacatecas, al menos dos posiciones para los migrantes, hay otros grupos que también quieren ser parte de la repartición del pastel.

En la elección del 2018, el hoy diputado local del Partido Acción Nacional (PAN), Pedro Martínez, la supo jugar, y bien. Dos legisladores blanquiazules llegaron al Congreso del Estado vía voto directo: Edgar Viramontes Cárdenas, por el Distrito XIII con cabecera en Jalpa, y José Guadalupe Correa Valdez, por el Distrito XIV, con cabecera en Tlaltenango. Ellos se ganaron su lugar a pulso.

Pero luego, tras el acomodo y las sumas y restas que realizó el IEEZ, para garantizar el 50 por ciento de las curules para las mujeres y las respectivas posiciones para los migrantes, al PAN le correspondieron dos diputaciones plurinominales. Y La lista entregada por el blanquiazul decía que en primer lugar iba Pedro Martínez y en segundo la jerezana Emma Lisset López Murillo, pero se decidió que el de Calera debía dejar su lugar a Marisela Navarro de Robles.

Esta mujer vivió aproximadamente dos meses con la idea firme de que sería diputada, pero unas horas antes de que tomara protesta, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación le dijo que no, que Pedro Martínez era una persona con discapacidad y a él le correspondía la posición. Y el gozo se fue al pozo.

Con esta resolución, el zacatecano se convirtió en la primera persona con discapacidad en obtener un cargo de representación popular por su condición. Marcó así un precedente.

En algunas entidades cuya población indígena tiene suficiente peso, esa condición obliga a que tengan mínimo un lugar asegurado en los congresos estatales.

Ahora son los integrantes de la comunidad LGBTTTI quienes aspiran a que se les garantice su participación en 2021 haiga sido como haiga sido. Y para ello ya sentaron las bases en el PRD que, como parte del convenio signado, creó varias comisiones regionales que se encargarán de vigilar que en la repartición esté presente esta población considerada vulnerable.

Y para sorpresa de algunos, el zacatecano Raymundo Moreno fue nombrado coordinador regional para Zacatecas, Aguascalientes, Jalisco, Nayarit y Colima. Con esto podemos decir que el activista tendría un lugar asegurado en el próximo congreso estatal.

Bien calificado

La empresa Target Agencia de Inteligencia Política publicó una medición en la que el alcalde de Zacatecas, Ulises Mejía Haro, para dolor de algunos, obtuvo la aprobación a su gestión de parte de seis de cada 10 habitantes.

La cuestión es que, en octubre del 2018, el morenista alcanzó el 52.6 por ciento de aprobación; para el 2019 llegó al 58.4, ahora se trepó al 60.2 por ciento.

En las mediciones, el todavía inquilino de La Casa de los Perros alcanzó un 41.3 por ciento, mientras que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, obtuvo un 48.7 por ciento.

Según Target Agencia de Inteligencia Política, fueron 400 los habitantes mayores de 18 años a los que se les aplicó la encuesta ente el 16 y el 17 de este octubre.

Nos leemos el domingo

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