La Casa de los Perros: Las rupturas de la 4T
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
La bancada de Morena en la LXIV Legislatura, que hoy es encabezada por Maribel Galván Jiménez, hizo oficial su rompimiento con los diputados del Partido del Trabajo, María Luisa del Muro García y Xerardo Ramírez Muñoz.
Si bien la ruptura ya era más que evidente, fue ayer cuando la fresnillense la remarcó al señalar que los únicos partidos políticos aliados de Morena eran el Verde Ecologista y Encuentro Social.
Es decir, los siete diputados morenistas –contamos a Lorena Oliva Benítez que mañana viernes rendirá protesta en sustitución de Roxana Muñoz que hoy es dirigente estatal del partido guinda y aún es diputada—, tienen de su lado a los verdes Georgina Miranda Herrera y al prestado Nieves Medellín Medellín.
Y también a Zulema Santacruz Márquez, que representa a un partido que, de entrada, la desconoce a ella, pero que mientras la nueva gobernanza siga manteniendo a su hermano, ahí estará lista para levantar a mano las veces que sean necesarias.
Con Nueva Alianza, y según lo expresado por Maribel Galván, ya no juegan a las canicas ya no son afines a la 4T. Susana Barragán Espinosa, Martha Rodríguez Camarillo y Priscila Benítez Sánchez andan en otro patín. De Imelda Mauricio Esparza no se sabe. Ella aparece en el portal oficial de la LXIV Legislatura como parte del partido esmeralda, pero su corazón, que dejó de ser perredista cuando ya no le convino, al parecer se mantiene morenista. Pero con la de Villa González Ortega no se sabe.
Por lo pronto, los diputados se reunirán mañana para llevar a cabo un segundo periodo extraordinario de sesiones en el que, además de analizar, discutir y, suponemos, aprobar las cuentas públicas del Gobierno del Estado, “diversos municipios y otros entes”, respecto del ejercicio 2020, le dirán adiós a Roxana Muñoz sin que, hasta el momento rinda cuentas sobre los extraños manejos que de recursos públicos hizo. Sí, ella es parte de la Estafa Legislativa, como lo denunció su compañero Ernesto González Romo.
Pero como para Morena, Andrés Manuel López Obrador y sus seguidores, eso de que la ley es la ley no aplica, que viva pues la impunidad.
Además, los legisladores aprobarán reformas a la Ley Orgánica del Poder Legislativo y su Reglamento General, porque no tener empleado del mes ya no les gustó y ahora quiere regresar a aquellos tiempos en los que el presidente de la Mesa Directiva se elegía cada 30 días.
Mal perdedor
López Obrador se distingue no sólo por decir cuanta mentira se le ocurre cada mañana, sino por ser un mal, pero muy mal perdedor. Y la venganza ha sido, es y seguirá siendo su motivación principal.
Hoy, nadie lo duda, el zape que el zacatecano Ricardo Monreal Ávila le acomodó al presidente de la República en el Senado, al dejar a su candidato Higinio Martínez Miranda como el perro de las dos tortas: sin presidencia en el Senado y sin candidatura a la gubernatura en el Estado de México, lo debe tener vuelto loco.
Y más cuando la oposición también le mandó un mensaje a quien hoy a las cinco de la tarde contará todas sus invenciones de un jalón. Nomás le brindó, en una de las tres votaciones para designar presidente del Senado, 52 votos a Ricardo Monreal, sin estar siquiera anotado en la lista de prospectos.
Alejandro Armenta Mier, gallo del exgobernador de Zacatecas, ya rindió protesta, y en cada evento, López Obrador le tendrá que ver la cara como un recordatorio no sólo de que la cerrazón tiene consecuencias, sino de que dejar de invitar a desayunar tamales de chipilín a Ricardo Monreal no era una buena idea.
Lo malo de esto es que Zacatecas será el que sufra las consecuencias porque, aunque López Obrador venga a pasearse y contar más falsedades al estado con cara de felicidad, la ruptura con el mayor de los Monreal tendrá secuelas. El apoyo del Ejecutivo federal a esta tierra será menos, y menos, y menos cada vez. Al presidente no le interesa un estado en donde su popularidad no es la que le gusta presumir.
Y también estará en la mira del inquilino de Palacio Nacional, el fresnillense Saúl Monreal y sus aspiraciones al Senado.
Eso sí, la ganona podría ser Verónica Díaz Robles, pues todos saben que quien encabeza su lista negra, esa que carga para todos lados, es el senador y hermano del inquilino de La Casa de los Perros. Y nadie duda que aprovechará la ocasión para, al oído, echarle más tierra al líder de la bancada de Morena en el Senado.
Zacatecanas
Para el segundo año de ejercicio de la LXV Legislatura, son tres las diputadas federales zacatecanas que tendrán presencia en la Mesa Directiva que presidirá el panista Santiago Creel Miranda.
La panista Noemí Luna Ayala fue elegida segunda vicepresidenta, mientras que la priista Fuensanta Guerrero Esquivel y la petista Magdalena Núñez Monreal serán secretarias.
Veremos qué tal el desempeño de estas tres zacatecanas, porque la última referencia que se tiene es la de Lyndiana Bugarín, quien renunció a ser secretaria porque tenía que ir a trabajar y pues eso no era de su agrado. Ahora ella cobra en la Secampo.
Si bien esta posición es importante para el lucimiento personal de cada una de las diputadas, que demuestran así que al menos son tomadas en cuenta en su respectiva bancada, esto no significa que mañana Zacatecas tendrá un mayor presupuesto asignado, por ejemplo. Tampoco.
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