La Casa de los Perros: Las «recomendaciones» del Sistema Estatal Anticorrupción en Zacatecas

CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ

Ricardo Bermeo Padilla dejó en claro que, al menos en Zacatecas, el Sistema Estatal Anticorrupción, que él preside, es un ente muy, pero muy parecido a la Mesa de Construcción de Paz, Tranquilidad, Alegría y Felicidad.

Sólo sirven para que sus integrantes se reúnan a tomar café, comer galletas y párele de contar.

Ancho como un pavo real, Bermeo Padilla desplegó sus alas en una conferencia de prensa. De pronto, cuando comenzó a presumir logros, sólo alcanzó a soltar un chillido: tres recomendaciones no vinculantes que servirán lo mismo que los exhortos del Poder Legislativo al Ejecutivo: para nada.

¿No lo cree? Imagine que estas recomendaciones se emitieron el 15 de julio y es la fecha que nadie estaba siquiera enterado.

Pero lo mejor, después de años de existencia de este Sistema, nadie había usado esas utilísimas herramientas. ¡Punto bueno! Ahora ya se enteraron de que lo pueden hacer. ¡Albricias!

El adalid en la lucha contra la corrupción en Zacatecas recomendó a los entes públicos del estado fortalecer sus Órganos Internos de Control, en cuya oficina debe haber un titular, otro para el área investigadora, uno más para la substanciadora, y sí, alguien para la resolutora y también una persona para la fiscalizadora. Eso dice la Ley de Responsabilidades Administrativas.

La idea, engordar la nómina que para eso y más hay dinero en Zacatecas.

Lo triste de la historia es que este Sistema Estatal Anticorrupción, que pareciera vive en un mundo alterno, recomienda esto a los municipios ahogados en deudas, sin policías y, por lo tanto, sin seguridad en sus calles y con una economía por los suelos.

Resulta que, dijo Ricardo Bermeo, la Auditoría Superior del Estado (ASE), en donde manda Raúl Rito Berumen, ya se cansó de observar estas deficiencias, pero pues nadie hace caso. Recordemos que vivimos en el México de la 4T, en donde no se puede ir con eso de que la ley es la ley. ¡Por Dios!

Y para que no digan que la luchita no se hace, también recomendaron generar un programa de capacitación anual para los Órganos Internos de Control, en donde, se supone, los titulares fueron designados precisamente porque le saben a la cuestión o, ¿en manos de quién están? ¿de un recomendado?

No piense mal, seguramente estas capacitaciones han sido recomendadas para poder contratar a un conferencista y tener al menos un evento por el cual se puedan emitir facturas.

¡Ah! También este Sistema Estatal Anticorrupción, que integran la Secretaría de la Función Pública, la Fiscalía General de Justicia del Estado, el IZAI, el Tribunal de Justicia Administrativa de Zacatecas, el Poder Judicial y la ASE, recomendó atender las convocatorias que emiten porque hasta hoy, nadie ni las fuma.

Y para terminar el año con bombo y platillo, recomendaron emitir a los gobiernos municipales, porque el estatal, aunque no lo crean ya lo tiene, un Código de Ética para que tengan algo en qué entretenerse.

Pero no todo es malo, o bueno, eso quiere hacer creer Bermeo Padilla. Resulta que el Sistema Estatal Anticorrupción medio cumplió con lo que impone la Ley de Transparencia, y es que sólo alcanzó a consumar el 90 por ciento de sus obligaciones ante la Plataforma Nacional Anticorrupción.

Y lo peor, lo cacareó feliz porque resulta que con este 10 por ciento de incumplimiento, Zacatecas es tercer lugar en el país.

La duda es: ¿incumplir con la Ley de Transparencia no es corrupción? Yo creo que no…

Finalmente, Ricardo Bermeo reconoció “la voluntad” de las instituciones del Sistema para participar en la Semana Estatal Anticorrupción.

Es decir, ahora además hay que agradecer a los integrantes de este ente amorfo que concurran a los eventos organizados en donde se habló de “Rendición de cuentas para una democracia plena” y “La corrupción en la agenda Política”.

Pero ahí están quejándose de que falta capacitación.

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