La Casa de los Perros: ¿Interés superior?
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Y fue el diputado de Morena, Omar Carrera Pérez, quien en la sesión de la Comisión Permanente de la LXII Legislatura, solicitó la comparecencia de la directora del Sistema Estatal DIF, Yadira Galván Sánchez. Y es que alguien, seriamente, debe dar explicaciones a lo que sucede al interior de la Casa Hogar para Jóvenes de Zacatecas.
Vigilar en todo momento que la integridad física y emocional de quienes, por diversas circunstancias son albergados, ni es un invento ni un cuento chino ni una ocurrencia, es una obligación que debe no sólo cumplirse, sino asumirse con responsabilidad.
El argumento de que «son niños problema» no sólo es incoherente, sino muy, pero muy inhumano. Claro que son menores que se encuentran en situación extraordinaria. Si no tuvieran problemas estarían felices en su casa. ¿O no?
El legislador de Morena hizo incapié durante su intervención en la sesión, que el personal que labore en la Casa Hogar, y en cualquier otra casa asistencial a cargo del Estado, debe no sólo ser gente capacitada, sino que entienda que el respeto y el bienestar hacia los menores internos es prioridad, de lo contrario claro que deben ser amonestados o despedidos.
Bañar a una niña con agua con hielos por haberse orinado, y que el hecho se pase por alto, porque eso ha sucedido en la realidad, nos habla de que el respeto a los niños, niñas y adolescentes en el Estado no es importante. Se ha quedado en el discurso.
Que a los albergados en la Casa Hogar se les maltrate, se les humille y no se les proporcionen los cuidados obligados nos deja ver qué hay otras prioridades, como proteger a una directora que, se deja ver claramente, es muy influyente. ¡Qué vergüenza!
«No creemos que bromear o usar un lenguaje coloquial como el que se escucha en el audio, sea referente de una planeación basada en la salvaguarda de la condición de los menores», expresó claramente Carrera Pérez.
Y es que aquí sólo debe haber un interés superior: los infantes y adolescentes, y sobre todo aquellos que sufren, que están solos, que desesperados buscan ayuda y cariño.
Los funcionarios involucrados, todos, perdieron la oportunidad, su oportunidad, de demostrar que son diferentes, que su actuar es en verdad comprometido, que antes que una amistad o un compromiso político está la responsabilidad que adquirieron al recibir sus nombramientos. De cualquier forma el tiempo, la vida misma, se encargará de poner a todos, a cada quien, en su lugar.
Seguimos al pendiente.
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