La Casa de los Perros: Favores políticos
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Los diputados de la LXII Legislatura, sólo 29 porque el panista Arturo López de Lara no fue a trabajar, en maratónica jornada que concluyó alrededor de las cinco de la mañana cumplieron finalmente con elegir al Concejo Municipal que se encargará de gobernar esta capital.
Una vez que comenzaron a circular los nombres, las redes sociales se encendieron y de inmediato el carácter de ciudadano que se suponía debía tener dicho Concejo se desvaneció.
Los 16 cargos, más los suplentes, fue una burda repartición cupular en la que los partidos políticos hicieron valer los parentescos y los favores y compromisos políticos. Sin el menor rubor, eso sí se debe decir.
Así, el Partido Revolucionario Institucional terminó con seis lugares, mientras que Morena se hizo de cinco. Para el PVEM, la cuota fue de dos.
Al Partido del Trabajo (PT), al Partido de la Revolución Democrática (PRD) y al Partido Acción Nacional (PAN) les correspondió sólo uno.
El PRI de antaño, ese que ha sido olvidado en la repartición de los cargos públicos en el Gobierno del Estado, se impuso con Rosa María Caloca y Catarino Martínez, quien llegó con credencial de elector de Pinos, pero carta de residencia de Zacatecas. Más vale tener dos domicilios por si se ofrece.
Susan Cabral, directora de APAC, y tiradora a todo el puesto que esté vacante, esta vez contó con el impulso de su amiga, la candidata perdedora a la alcaldía, Judit Guerrero. Y la cuota para la ex gobernadora Amalia García Medina, que ya colocó a sus incondicionales en la administración que dice gobernar el inquilino de La Casa de los Perros, fue para Julio Rafael Medina Salman, hijo del querido y siempre extrañado Rafa Medina.
El vocero, dirigente, representante ante el IFE, senador e integrante de la Asamblea Constituyente, por el Partido Verde Ecologista, Carlos Puente Salas, impuso a su sobrina Paulina Salazar Castanedo, y ya entrado en su nuevo puesto de gerente de una agencia de colocación, llevó hasta el Concejo a Miriam Vázquez Cruz, antes encargada de cargarle la mochila a la ex regidora y también sobrina del dueño del PVEM, Cecilia Espino Salas.
Por el PAN hizo su aparición el ex diputado federal, esposo de la ex diputada local y ex candidata a la alcaldía, Guadalupe Medina, el siempre dispuesto a arrasar con las plurinominales y cargos en los que el esfuerzo sea el mínimo, Arturo Ramírez Bucio. Él vive en Guadalupe.
La repartición en Morena corrió a cargo del dirigente estatal Luis Medina Lizalde, quien con Soledad Luévano, no dejaron ni una rebanada del pastel para los que le batallaron en la campaña y que finalmente, con su esfuerzo, llevaron al partido de Andrés Manuel López Obrador, a ganar la capital y la diputación para Mónica Borrego.
Por lo pronto, la decisión de unos cuantos, a los que llamaron «sedentarios», no gustó al grueso de los simpatizantes de a pie de Morena y ahora han lanzado la amenaza: Para la elección extraordinaria, que se atengan a las consecuencias.
El ex rector de la UAZ, ex diputado y ex dirigente del PRD, Jorge Eduardo Hiriartt, es quizá el único que llega con méritos para hacer un buen papel.
Apareció ahí en la lista José Roberto Román delgado, que según su perfil de Facebook, es actualmente coordinador estatal de Jóvenes en el Partido Nueva Alianza.
Este Concejo Municipal ejercerá sus funciones a partir de hoy jueves y hasta que se elija un nuevo ayuntamiento.
Amigos de verdad
Cuando los amigos son de verdad no hay pero que valga al momento de ofrecer el apoyo incondicional. No existen, ni debe existir los pretextos.
Enrique Peña Nieto sin duda quiere mucho a José Eduardo Calzada Rovirosa, pues aunque cayó en desgracia y perdió la elección en su natal Querétaro, en donde el PAN llegó y arrasó, lo arropó de inmediato, tanto así que ni siquiera terminó su mandato. Solicitó licencia el 27 de agosto de 2015 (su periodo concluía en octubre) y ese mismo día, el presidente de la República, su cuate, lo nombró titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa).
Miguel Alonso Reyes siempre presumió su enorme amistad con Peña Nieto. El ex gobernador ostentó el título de ser el principal promotor del PRI, al grado de ser Zacatecas el estado más priista del país. Entregó buenas cuentas para su partido hasta el final.
Sin embargo, no se vislumbra que un nombramiento de peso, no de consolación o de segunda, le vaya a ser entregado, y ahora menos que los diarios nacionales, le comienzan a sacar sus trapitos al sol, en momentos en que el combate a la corrupción es la bandera del tricolor y del presidente, aunque todo sea simulado.
Unos mails en los que el hermano incómodo y ex florista en desgracia Juan Alonso, es el principal protagonista son publicados hoy en El Universal, en donde se evidencia como familiares del ex gobernador Alonso Reyes «solicitaban moches a empresas».
Implicados están también en este teje y maneje de los recursos públicos el ex secretario de Salud, Raúl Estrada Day; Dino Enríquez, ex subdirector de Recursos Materiale, y Le Roy Barragán, hoy diputado con fuero y antes secretario de Administración.
El mismo Miguel Alonso dice que «quieren machar su administración», pero ya cuando el río suena…
Adiós
Quien sin duda dice adiós a su carácter de presidente municipal de Guadalupe, no sólo concluyendo su mandato, sino entregando obras hasta el último día fue Roberto Luévano Ruiz.
Y claro que el más beneficiado con esto será Enrique Flores –quien hoy toma protesta a las 18:00 horas–, luego que el futuro dirigente estatal del PRI le hereda una administración ordenada en sus finanzas, con una deuda manejable y, lo más importante, con liquidez.
Esto quiere decir que los trabajadores podrán estar tranquilos, pues sus quincenas les llegaran a tiempo; los proveedores fueron liquidados en su mayoría y podrán seguir prestando su servicio con tranquilidad.
Hoy se despidió, oficina por oficina, de cada uno de los trabajadores, quienes no sólo lo abrazaron y besaron, sino hasta las gracias le dieron.
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