La Casa de los Perros: El lodazal en el que está atascado México

CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ

A pesar de los argumentos alegres que la nueva gobernanza narra cada vez que tienen al frente un micrófono oficial, la única verdad es que Zacatecas, durante agosto del 2023, registró la cuarta peor caída anual de las 32 entidades del país en lo que a la prestación de servicios se refiere.

Esto, como resultado de los ínfimos ingresos reportados por empresas relacionadas con el golpeado sector turístico.

Las cifras no son una ocurrencia, son las que aporta la Encuesta Mensual de Servicios del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), quien informó que la Secretaría de Turismo (Sectur), a través de su sistema Datatur, registró una reducción en la ocupación hotelera durante los primeros siete meses del 2023.

Así las cosas, de enero a julio, la ocupación promedio fue de sólo 27.4 por ciento, 11 puntos menos que en el 2022.

Estas cifras muestran que la caída experimentada en este 2023 es sin duda la peor de los 40 destinos turísticos del interior de la República que monitorea la Sectur.

Además, el Inegi señala que según los datos de los ingresos en los servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas, estos en Zacatecas sufrieron una disminución del 24.6 por ciento en comparación con el mismo periodo del año pasado.

Como quien dice, vamos como los cangrejos.

Eso sí hay que decirlo, en el país hubo tres estados que en el país tuvieron mayor retroceso que Zacatecas: Jalisco con menos 28.3 por ciento, Durango, con un menos 27.5 por ciento, y Baja California con menos 27.4 por ciento.

Pero bien dicen que al perro más flaco se le cargan todas las pulgas y según el INEGI, Zacatecas también sufrió una reducción en el personal ocupado en los servicios de alojamiento temporal y preparación de alimentos y bebidas, en un 8 por ciento.

Lo peor del caso es que no se ve una mejora. Porque no será el Festival del Día de Muertos el que saque del hoyo a los empresarios del ramo turístico, mientras no exista una estrategia integral y todos los integrantes del gabinete se pongan en serio a trabajar.

Y es que si bien el duro golpe a la delincuencia que la Secretaría de Seguridad Pública, al mando del General Arturo Medina Mayoral, ha dado estos días con la detención de 13 delincuentes en Luis Moya, así como los avances en el caso de la ejecución de policía vial con la detención del probable responsable, y la aprehensión de quien puede ser el culpable de la agresión registrada el pasado 5 de octubre, en inmediaciones de La Bufa, en la que perdieron la vida dos personas, la gente tiene miedo de visitar Zacatecas.

Sobre todo, cuando se enteran de que el estado forma parte de la lista de 10 entidades en donde ocurrieron más atrocidades durante el periodo de enero a septiembre de 2023, junto con Chihuahua, Guanajuato, Baja California, Guerrero, Morelos, Jalisco, Puebla, Veracruz y el Estado de México.

La peor vergüenza

Lo sucedido ayer en el viaje que el líder de la fallida 4T, Andrés Manuel López Obrador realizó a la zona de desastre en la que quedó convertido Acapulco, tras el paso del huracán Otis, no puede sino causar una inmensa vergüenza a todos los mexicanos.

Resulta increíble que, a pesar de los múltiples reportes de que las carreteras que conducían al puerto estaban bloqueadas, el presidente de la República ¡viajó por carretera!, quedando obviamente atrapado con integrantes de su gabinete entre los que estaban los máximos jefes de la Marina y la Sedena.

Y ahí estaba, López Obrador, en medio de un lodazal y sin comunicaciones adecuadas.

Los videos que sobre el hecho circularon en verdad causaron pena ajena. No se sabía si reír o llorar ante tanta estupidez. Primero, montado en su Suburban y después en un jeep que quedó atascado en el fangal en medio de la sierra, el presidente se mostró de cuerpo entero.

Y si su show era para distraer a los mexicanos y, sobre todo a los guerrerenses, del hecho de que la gobernadora Evelyn Salgado, no haya aparecido en la zona de desastre ni siquiera en fotografías, esta vez no le funcionó.

Porque el observar las caravanas de integrantes del ejército avanzando lentamente a Acapulco, cuando debían estar ahí desde un día antes, creo ya no causa vergüenza, sino un enorme coraje.

Hoy a nadie le queda duda que el lodazal en el que se atascó López Obrador es el mismo en el que la 4T tiene anegado a todo México.

Pero que no panda el cúnico, porque el inquilino de La Casa de los Perros, gracias al Santo Niño de Atocha, está bien, varado en Acapulco, pero bien. Ya lo dicen los de Morena, lo importante es sonreír por ¡ya ganamos!

X: @lasnoticiasya @claudiag_valdes Díaz

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