La Casa de los Perros: El cantante de la 4T
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Una pesada, pero muy pesada carga resultó al final el que los estrategas del candidato a la gubernatura de Zacatecas por la coalición Juntos haremos historia, David Monreal Ávila, decidieran que, para llenar los eventos que al inicio resultaron muy desangelados, lo mejor era llevar hasta en la sopa al cantante Marco Flores.
Este hombre, cuyas canciones cien por ciento misóginas y altamente vulgares lo han llevado a la fama liderando a La Banda Jerez, no sabe de buenos modales, pero sí de cómo colarse para aparecer siempre en las boletas electorales. En eso es experto.
Primero le dio cobijo el desaparecido Partido Encuentro Social, que presume ser defensor de las buenas costumbres pero que al final llevó como su candidato a la gubernatura al artista, vistiendo día y noche un chaleco antibalas.
Ya después, el que dice que es de Jerez pero que tiene sus intereses económicos en Aguascalientes, coqueteó con el PAN, con Movimiento Ciudadano y con cualquiera que lo quisiera llevar como llavero para, a grito pelado, cantar en los eventos a cambio de votos. Así se hace política hoy en México. El cartel que los ciudadanos no saben si anuncia los eventos de un palenque de feria de pueblo o candidaturas es el vivo ejemplo de ello.
Valiéndose de su buena verborrea convenció a David Monreal y su equipo de que él, y nadie más que él, debía ir anotado en la lista plurinominal de candidatos a diputados federales. Y sí, ahí está: en el número 10 de la Segunda Circunscripción, por encima de militantes y fundadores. En Morena poco importa el trabajo partidista, la preparación académica o la ideología, de lo que se trata es de hacer bola y punto. Y para ello, pues quién más que Marco Flores.
Este cantante dejó encantado al candidato David Monreal cuando en sus primeros eventos, sobre todo en Fresnillo, a donde acudió sin avisar al hermano menor que haría campaña por esos rumbos, logró arrimar gente que hasta que no escuchó la música se acercó. Definitivamente esa era la fórmula: harto circo.
Y así comenzaron a circular los videos en los que feliz de la vida se veía al candidato de Juntos haremos historia bailando y bailando. La fiesta al ritmo de la banda en plena pandemia había comenzado.
Pero la primera señal de alerta surgió cuando en Pinos, el municipio más priista de Zacatecas, al cantante se le ocurrió enviar a pasear al rancho de Andrés Manuel López Obrador a Gustavo Uribe Góngora, actual secretario del Campo en el gobierno diferente, y exalcalde del lugar.
Fue justo en la comunidad La Laborcilla, de donde es originario el expresidente del PRI y justamente en donde vive toda su familia, en el lugar en el que a Marco Flores se le ocurrió la brillante idea de mandar a chingar a su madre y tacharlo de ladrón, corrupto y demás linduras.
Pero la gota que derramó el vaso ocurrió también en Pinos, cuando al calor de la música, invitó a un par de mujeres a bailar junto al candidato y soltó la ya famosa frase: ¡Arriba las pinches viejas!
Obviamente, las organizaciones feministas pegaron el grito en el cielo y exigieron al Instituto Nacional Electoral (INE) poner cartas en el asunto. Inconcebible que Morena, el partido que sacó de la contienda a Ulises Mejía Haro e Iván de Santiago, con la complicidad de los magistrados del Tribunal de Justicia Electoral de Zacatecas (Trijez) justamente por “ejercer” violencia política de género, ahora se ufane de insultar y utilizar a las mujeres para hacer campaña.
Hasta el momento, la única consecuencia de este acto ha sido eliminar al payaso que fungía como maestro de ceremonias de las giras, pero un pronunciamiento oficial de parte de David Monreal al respecto nada. Silencio total.
Y qué decir del otro candidato presente en el evento, el exrector Alfredo Femat Bañuelos, quien feliz de la vida aplaude a rabiar la ocurrencia del animador de la 4T.
Así transcurren las campañas, sin propuestas, con promesas huecas y errores garrafales que tanto han querido evitar y que, al final, como dicen que dijeron en una oficina del Senado de la República, le podrían costar el sueño de que esta tercera, sea la vencida.
Carlos Peña con todo
En el Distrito 3 federal, con cabecera en Zacatecas, las cosas comienzan a pintar más que bien para el candidato de la coalición Va por Zacatecas, Carlos Peña Badillo, al grado que las alertas en el cuarto de guerra de Juntos haremos historia, en especial del PT, ya se encendieron.
El carisma de Peña Badillo, así como su arraigo en Río Grande, lo suben ya como la espuma en las mediciones internas, esas que no se publican pero que se realizan diario por parte de Morena. Ese Distrito, de la mano también del panista Reynaldo Delgadillo, que busca ser diputado por el Distrito local II, y del Doctor Heladio Verver, como candidato a la presidencia municipal, los tiene nerviosos. Muy nerviosos.
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