La Casa de los Perros: Cayeron de la gracia de los zacatecanos
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Al final, el “homenaje” de los zacatecanos a su hijo predilecto, Antonio Aguilar, terminó reducido a una lucha de egos que enfrentó a los integrantes de la LXIV Legislatura y dejó mal parados a todos.
Por un lado, Susana Barragán Espinosa, la diputada más votada de la última elección, consiguió quedar bien con los dueños de Tayahua y alrededores al lograr que los diputados, que no supieron ni qué votaron, aprobaran el 17 de mayo, por unanimidad, su Punto de Acuerdo para que en el municipio de Villanueva, de donde ella es “representante popular”, se llevara a cabo la Sesión Solemne para la entrega del reconocimiento “Antonio Aguilar Barraza”.
Pero no todo quedó ahí, pues en la propuesta de Susana Barragán se incluía, un día después de que los mismos diputados aprobaron “por unanimidad” emitir la convocatoria para entregar el llevado y traído reconocimiento, modificar la fecha de entrega trasladándola de “la sesión inmediata posterior del 17 de mayo”, como reza el Decreto 433 del 9 de enero del 2021, al 19 de junio, día del aniversario luctuoso del también llevado y traído actor.
Los integrantes de la LXIV Legislatura no se percataron jamás que la Comisión de Desarrollo Cultural, que preside la panista María del Mar de Ávila, no estaría en posibilidades de emitir un dictamen, llevarlo a la Junta de Coordinación Política, pasarlo al pleno, juntar quórum (lo más difícil de todo) y votarlo a favor.
Pero quien sí sabía perfectamente que la convocatoria cerraba el 5 de junio y que María del Mar de Ávila no tendría todo listo para el 19 de junio fue la diputada de Nueva Alianza e hija de Le Roy Barragán, secretario de Turismo y también, claro está, super amigo de los Aguilar, Susana Barragán.
Esta diputada, que desde enero de este 2023 a la fecha ha presentado dos iniciativas de reforma, una al Código Penal y otra a la Ley de Justicia para Adolescentes (mismas que están en la congeladora), y un Punto de Acuerdo para proteger a la Biznaga, dedicó eso sí dos puntos de acuerdo al merequetengue llamado homenaje a Antonio Aguilar.
Porque ella, con su sonrisa de oreja a oreja, hizo a un lado a su compañera María del Mar de Ávila, la dejó atendiendo una convocatoria que hasta los diputados olvidaron, y logró, otra vez, que se aprobara “por unanimidad”, que la Presidencia Municipal de Villanueva fuera declarado recinto oficial el 19 de junio para entregarle un “reconocimiento especial” a José Jesús Antonio Aguilar Jiménez, que gracias a su padre lo conocen más allá de los muros de su casa.
El motivo: que este sujeto ha promovido la cultura de Zacatecas. Y que nadie se ría.
Así, con la presencia del inquilino de La Casa de los Perros, también amiguis, amiguis de los Aguilar, a quienes designó embajadores de Zacatecas en México, el mundo y más allá, y con la ausencia de 12 diputados, entre ellos la panista María del Mar de Ávila, se le entregó una medalla y los aplausos del respetable al tal José Jesús Antonio Aguilar Jiménez, por el simple y sencillo hecho de ser el hijo del fallecido y recordado cantante.
Mientras, la diputada María del Mar de Ávila, flamante presidenta de la Comisión de Desarrollo Cultural, acompañada sólo por el priista David González Hernández, y con la ausencia de la otra integrante, la de Morena, Gabriela Pinedo Morales, por fin, después de mucho esfuerzo y tras ocho días de arduo trabajo, el pasado 13 de junio logró un dictamen ¡Albricias!
Esta Comisión que es de tres, pero en la que sólo trabajaron dos diputados, estudió las también dos propuestas que llegaron antes del 5 de junio a la Oficialía de Partes: la de Juan Pablo Murillo Paniagua y de Catarino Martínez Díaz.
El dictamen, de manera por demás tardía fue inexplicablemente entregado en la Jucopo hasta el 19 de junio, justo el día en que Susana Barragán robaba reflectores y, con el aval de la nueva gobernanza, entregaba su propio reconocimiento.
Todo indica que hoy, si los diputados asisten a sesión y se logra el quórum, Juan Pablo Murillo Paniagua sería el merecedor de una medalla “diseñada por artesanos zacatecanos”, muy parecida a la entregada, gracias a la buena y rápida gestión de Susana Barragán, al hijo del Charro de México.
¿Cuándo?, eso no se ha decidido, porque el Punto de Acuerdo aprobado “por unanimidad” que marcaba como fecha de entrega el 19 de junio ya fue violentado, pisoteado y mandado a la basura legislativa.
Así termina esta telenovela en la que la protagonista, Marimar, pasó al olvido cuando la malvada Susy hizo su aparición y le demostró que tener de su lado a la nueva gobernanza sí ayuda, y mucho.
Marimar entendió a la mala que le falta mucho colmillo.
En este final de temporada, además se demostró, una vez más, en manos de qué diputados está Zacatecas. Unos legisladores que aprueban puntos de acuerdos sin leer para después abatirlos y mandarlos al olvido.
La corcholata
Adán Augusto López Hernández, la corcholata del líder de la fallida 4T, llegó a Zacatecas a prometer que, ahora sí, si él consigue ser el elegido de Palacio Nacional, “A Zacatecas le irá bien” y habrá seguridad y se protegerá a los migrantes y todos seremos muy felices.
Pero también arribó a una Plaza de Armas, vestida de paraguas blancos entregados por el senador José Narro Céspedes, a hacer enojar a los Monreal.
Y es que fue mucha la molestia que causó en las filas de los dueños de Puebla del Palmar, el ver a personajes como Martina Rodríguez, aplaudiendo a rabiar al exsecretario de Gobernación.
Quienes apostaban a que el calorón veraniego espantaría a los simpatizantes de Adán Augusto se equivocaron. La movilización que organizó José Narro resultó efectiva. Y si bien muchos de los convocados llegaron, recogieron su paraguas y se marcharon, otros más esperaron bajo los inclementes rayos del sol para escuchar a su nuevo Mesías.
Todo pareciera indicar que los Monreal, así como Los Aguilar, comienzan a caer de la gracia de los zacatecanos.
Pero que nada nos agüite. Usted sonría que… vamos requetebién.
Twitter: @lasnotociasya @caudiag_valdes
