La Casa de los Perros: Arropados por la impunidad en Zacatecas
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
La protesta que organizaron las huestes del líder minero Carlos Pavón, en contra del senador Napoleón Gómez Urrutia, es una muestra más que clara de que ni a los organizadores, ni a la UAZ, ni los servicios de inteligencia que se supone debe tener la nueva gobernanza, tienen siquiera una idea de lo que pasa en la vida.
Los organizadores, que tuvieron la brillante idea de invitar al senador de Morena, Napoleón Gómez, a la tierra de su archienemigo Carlos Pavón, a presentar el libro “El Triunfo de la Dignidad”, pueden presumir que leyeron página por página la obra del minero, pero de ninguna manera serán capaces de decir que entendieron algo.
A ellos se les olvidó que el pleito entre los antes amigos y colaboradores por 55 millones de dólares que supuestamente se habría embolsado el senador de Morena, y protegido de Andrés Manuel López Obrador, nunca ha dejado de estar al rojo vivo. Se odian con odio jarocho.
Lo importante era mantener el papel de quedabién y punto. Lo demás, eso es lo de menos.
Y como son los neoliberales los que ocasionan todos los problemas en México, el mundo y el universo entero, pues de paso se señala al rico de la historia, Alberto Bailleres, mero dueño del Grupo Peñoles, de patrocinar la embestida en contra del honorable miembro de Morena.
En la UAZ, con tanto investigador y académico en sus filas, se les pasó el pequeño detalle que implicaba albergar en su territorio a un sujeto señalado por huir a Canadá en medio de serias acusaciones de corrupción que, aunque hayan sido borradas como por arte de magia por los líderes de la 4T, siguen calando hondo entre quienes se dicen timados, robados y saqueados.
Se deja ver que no existe una investigación, un filtro, algo que se analice antes de soltar en préstamo o en renta cualquiera de sus edificios, incluido el histórico Teatro Calderón que ayer, para vergüenza de propios y extraños, lució mancillado.
Lo bueno es que, según el rector Rubén Ibarra, la denuncia correspondiente ya se presentó… ¡Qué alivio!
Y de las autoridades de la llevada y traída Mesa de Construcción de Paz, Tranquilidad, Alegría y Felicidad en Zacatecas pues nada, tampoco se supo nada. Al parecer sólo se enteraron de que un senador de Morena, amiguis amiguis del presidente López Obrador, vendría a presentar un interesante libro. Información suficiente para voltear a otro lado y dedicarse a otras cosas.
Quizás la inteligencia a escuchar que el senador Napoleón Gómez Urrutia alguna vez fue acusado por el gobierno del panista Felipe Calderón Hinojosa de hacer cosas indebidas con el dinero de los mineros, pero seguro pensaron: eso no es falso, pero tampoco verdadero, y se echaron a dormir.
Las huestes de Carlos Pavón, integradas en el Sindicato Nacional Minero Metalúrgico – FRENTE, que todo mundo sabe, bueno, al parecer no todo mundo, son de armas tomar, seguirán actuando con impunidad, la misma que dicen arropa a su archienemigo Napito, que desde el escaño que le regaló su amigo Andrés Manuel López Obrador, seguirá riéndose de todos los mexicanos, pero más de aquellos que siguen creyendo que la 4T es sinónimo de verdad, lealtad y honestidad.
Él, desde la trinchera que le facilitó la 4T, seguirá incólume y orgulloso denunciando las “prácticas corruptas e ilegales que algunos empresarios utilizan para someter la libertad de los trabajadores”. ¡Vaya pues!
Eso sí, Napito, muy molesto, no se fue sin antes dejar en claro que fueron las autoridades municipales y estatales, léase de Morena, las que permitieron los desmanes, ya que, según la oficina de prensa del senador, se “solicitó apoyo a las fuerzas de seguridad pública estatales y municipales, cuya respuesta fue omisa puesto que informaron que tenían la instrucción de no intervenir para detener los actos de vandalismo que se cometieron en el recinto del evento”. ¡Ups!
Y mientras tanto, el histórico edificio queda ahí como muestra de la ineficiencia de las autoridades gubernamentales, la inocencia de los que mandan en la UAZ, y la ingenuidad de quienes invitaron a Napito a Zacatecas.
Y va de nuez
Los diputados oficiales, es decir los Morena, se negaron otra vez a permitir que el secretario de Finanzas, Ricardo Olivares Sánchez, acuda a la sede de la LXIV Legislatura a presentar un informe sobre el estado que guardan las finanzas de la entidad al inicio de la actual administración gubernamental.
Fueron los diputados Gabriela Basurto y Enrique Laviada Cirerol quienes presentaron un Punto de Acuerdo para que se citara a comparecer al funcionario; pero, como se necesitaba el voto a favor de las dos terceras partes de los presentes, pues la idea de rendir cuentas no pasó. Ya será para la otra.
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