Cartero, una profesión y un servicio que se resisten a morir

RICARDO EVODIO CABRAL VERA

Jerez de García Salinas, Zac.- Con la aparición de modernos y ágiles mecanismos de intercomunicación personal, podría considerarse a uno de los personajes centrales en la historia, como lo es el cartero, como una especie en extinción pues si existen las redes sociales, la telefonía móvil y fija, la comunicación de persona a persona a través de una pantalla y otros mecanismos modernos, quien puede pensar en escribir una carta, en enviar una postal, una tarjeta de felicitación o un mensaje navideño.

Y es quizá esa nueva costumbre lo que ha ido acabando con una de las tradiciones más peculiares del año, como es la celebración del Día del Cartero, el 12 de noviembre, que en Jerez, prácticamente pasa de noche, como ha ocurrido en los últimos tiempos.

Miguel Martínez Alemán, empleado de correos por espacio de 30 años, recuerda que todavía en la parte final del siglo pasado, la autoridad municipal se hacía presente, de manera personal o por lo menos enviando algún representante, para festejarles su día, alguna vez estuvo con ellos el alcalde Juan de Santiago Silva, la alcaldesa Bertha Torres Valdés y Arturo Villarreal, de los que personalmente recuerda; otros enviaban representante, pero desde el gobierno del exlíder cetemista se acabó la tradición.

En la actualidad el correo ha dado un giro en sus actividades, los mensajes de persona a persona o lo que conocemos como cartas, ha disminuido considerablemente, sin embargo hay aun quienes utilizan ese romántico y arcaico mecanismo; en promedio se manejan menos de 50 por día, algunas 35 cartas nacionales y 15 internacionales.

Muy lejos está de la gran cantidad que durante el siglo pasado, saturaba las valijas y que representaba una intensa labor para su clasificación y entrega a domicilio; eran toneladas de papel con millones de mensajes.

El apartado postal funciona todavía, aunque en menor proporción de lo que predominaba todavía en los últimos años del siglo pasado, antes de la expansión de las redes sociales y la telefonía móvil que abarca también a las comunidades rurales.

El trabajo principal de la oficina de correos, se concentra en el reparto de documentación bancaria y de instituciones privadas, que hacen llegar notificaciones, estados de cuenta, recibos o mensajes de telefonía y otros documentos a sus clientes, por esta vía, así como el correo certificado de paquetería.

Actualmente el trabajo lo realizan entre cinco carteros, aparte del personal de oficina que consta de administración y dos auxiliares de ventanilla.

Miguel Martínez Alemán, recuerda a compañeros de trabajo como don Martín Acevedo que era administrador cuando él ingresó como cartero; asimismo a José Luis Martínez Gaona, Isidro Martínez Alemán, Antonio Valdez Alvarado, Emiliano Ley Campos,  Joel Rodríguez Mier, Manuel de la Torre y personas a las que conoció pero no coincidieron en su tiempo de servicio, como el recordado Martín perales.

Afirma que gracias a este trabajo, logró  tener un gran contacto con la población y conocer a muchos amigos, que dondequiera lo saludan y lo recuerdan como cartero o empleado de la oficina postal; “mucha gente nos da el agradecimiento, eso es muy satisfactorio, algunos comerciantes incluso, en aquellos años nos daban hasta algún regalo, en gratitud”, dijo el servidor público, quien concluye la charla con una expresión “gracias por acordarse siempre de nuestro día”.

LNY/RECV

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