Unos van por JVM; otros, por Intocable
Monterrey, NL.- Impaciente por bailar con su grupo favorito, Yuleika Vélez se aburría en pleno mitin.
«¿A qué horas empieza Intocable?», decía la joven de 19 años, con cara de fastidio.
Filas atrás, Esther López, de 79, emocionada gritaba su apoyo a la candidata panista a la Presidencia, Josefina Vázquez Mota, quien subía al escenario para su cierre de campaña en la Ciudad.
«Yo apoyo a Josefina», decía la mujer con el rostro emocionado, en las primeras filas.
En la Explanada de los Héroes podía verse al núcleo duro panista que agitaba al cielo sus banderolas, y a los otros, que las usaban para cubrirse el sol o echar relajo mientras esperaban la hora del baile.
La multitud ayer comenzó a arribar a las 17:00 horas. Los acarreados llegaron en 266 camiones.
Unas mujeres que bajaban de los autobuses provenientes de la Colonia Unidad Pedreras, confesaron que llegaban para apoyar a Margarita Arellanes, candidata albiazul a la Alcaldía regia, presente en el evento, pero que hoy volverían a la Macroplaza para apoyar a Enrique Peña Nieto, el gallo priista a la Presidencia.
–¿Por qué a esos candidatos?, se les preguntó.
«Porque son los buenos. Ya nos dijeron», señaló una de ellas.
Los convencidos de la propuesta albiazul llegaron por su propio pie atraídos por su candidata, «La Jefa», quien inició su discurso a las 20:00 horas.
Vázquez Mota lució entusiasta.
Se puso un sombrero norteño y desató una de las ovaciones más fuertes al criticar, sin decir su nombre, al Gobernador Rodrigo Medina.
«El candidato del PRI es un joven que le tiene miedo a los jóvenes.
Se parece al Gobernador de acá», dijo la panista.
La multitud abucheó.
«¡Miedoso!», gritó María Medina, 69 años, quien aseguró que llegó al mitin desde Tamaulipas.
Mientras que la rechifla de los panistas no se hizo esperar al escuchar la alusión a Medina, al preguntárseles en entrevista sobre el ex Presidente Vicente Fox el silencio fue sepulcral. Ni siquiera Vázquez Mota lo mencionó en su discurso al hablar de la llegada del PAN al poder en el 2000.
El escenario, armado con tres pantallas gigantes, comenzó a iluminarse al apagarse el sol. El mitin parecía llegar a su fin al dar al escenario un aire más de concierto.
Alrededor de las 21:00 horas, Vázquez Mota se despidió. El grupo Intocable apareció en escena.
«La neta no vengo a hacer política, vengo a cumplir con mi trabajo», dijo Ricky Muñoz, vocalista del grupo, camino al escenario.
«Lo que sí es que hay que votar».
Con los primeros acordes de Intocable, la Macroplaza se convirtió en pista de baile, en la que fanáticos del grupo y panistas se olvidaron de las banderas y algunos en parejas comenzaron a gastar suela.
Con información de: El Norte