Zacatecas: La crisis de las mujeres desaparecidas y la lucha por la memoria y la justicia

Zacatecas, Zac.- En el marco del Día Internacional de la Mujer, la Plazuela Francisco Goitia, en el corazón del Centro Histórico de Zacatecas, se convirtió en un espacio de memoria y exigencia.

Fichas de búsqueda de mujeres desaparecidas o no localizadas fueron colocadas en este simbólico lugar, acompañadas de veladoras que iluminan la oscuridad de una crisis que parece no tener fin.

Esta intervención, organizada por la Secretaría de Promoción Política de la Mujer del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Acción Nacional (PAN), busca visibilizar la grave problemática de desapariciones que afecta a cientos de familias en el estado.

Zacatecas vive una emergencia silenciosa. Cientos de mujeres no han regresado a sus hogares, dejando tras de sí historias truncas, abrazos pendientes y un vacío que sus seres queridos no logran llenar. Cada ficha colocada en la Plazuela Goitia representa más que un nombre: es la ausencia de una madre, una hija, una hermana o una amiga. Es un grito de justicia que clama por ser escuchado.

Organizaciones y colectivos feministas han denunciado reiteradamente que la violencia de género en Zacatecas sigue siendo una crisis sin control. Las cifras de mujeres desaparecidas no solo reflejan la incapacidad de las autoridades para garantizar la seguridad de las mujeres, sino también la impunidad que rodea estos casos. Las familias de las víctimas, mientras tanto, no cesan en su lucha por encontrar respuestas y exigir justicia.

El acto en la Plazuela Goitia no es un hecho aislado. Se suma a una serie de manifestaciones y actividades realizadas en todo el país para denunciar la violencia contra las mujeres y demandar medidas efectivas que garanticen su seguridad y acceso a la justicia. «Cada ficha que sostenemos en nuestras manos no es solo una hoja de papel, es una vida que importa, un corazón que late en la esperanza de volver», expresaron representantes del PAN durante el evento.

La instalación de estas fichas de búsqueda es un recordatorio de que, en Zacatecas, el amor y la memoria son más fuertes que el miedo y el olvido. Pero también es una interpelación directa a las autoridades: las mujeres desaparecidas no son cifras, son personas cuyas vidas fueron interrumpidas y cuyas familias merecen respuestas.

Mientras las veladoras siguen encendidas y las fichas permanecen en la plazuela, la sociedad zacatecana y las organizaciones civiles reafirman su compromiso: no descansarán hasta que cada una de estas mujeres sea encontrada. Porque, como lo expresaron durante el acto, «el amor es más fuerte que el miedo, y la memoria más grande que el olvido».

En Zacatecas, la lucha por las mujeres desaparecidas es, al mismo tiempo, una lucha por la dignidad, la justicia y la esperanza. Y mientras haya una mujer sin regresar a casa, esa lucha no terminará.

LNY/Redacción