La Casa de los Perros: la venganza de la 4T en Zacatecas

CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ

Lo que en verdad mueve a los que dicen formar parte del movimiento de la cuarta transformación es la venganza. Viven para ella. Se regodean en ella. Es su prioridad. Su todo.

En las pasadas elecciones, quienes habitan la capital de Zacatecas acudieron a las urnas y le dieron la espalda a Morena, al Verde Ecologista y, de paso, al Partido del Trabajo.

Esa derrota, a la que se sumaron las ocurridas en Fresnillo y Jerez, los volvió locos.

Un trago de lo más amargo que todavía tienen atragantado.

A todo ello se le debe agregar que el legítimo ganador de la presidencia municipal de Zacatecas, el panista Miguel Varela Pinedo, se perfila como un serio contendiente por la gubernatura del estado.

Y eso, de ninguna manera, lo van a permitir.

Por ello, en lugar de ponerse a trabajar en lo que deben, dedican su tiempo a ponerle piedritas en el camino al alcalde que, para colmo, es un hueso duro de roer.

No se anda con chiquitas y es bien respondón. No se dobla pues.

En días pasados, cuando reveló millonarias irregularidades en presuntamente ocurridas en la pasada administración que encabezó el verde ecologista Jorge Miranda Castro, como avispas saltaron.

Un par de diputados de Morena advirtieron que, desde la Legislatura, en donde tienen mayoría, le harían la vida imposible a Miguel Varela. Así, sin empacho.

Hoy, el embate llega desde la nueva gobernanza.

Echando por tierra los acuerdos, Miguel Varela recibió una llamada telefónica en la que le avisaban que los 32 millones de pesos solicitados –y prometidos– como adelanto de las participaciones no llegarían a las arcas municipales.

Que no habría de limón, que le hiciera como pudiera y que la cuenta bancaria aperturada para tal efecto podían pasar a cancelarla.

Ese dinero serviría para cerrar el año con proveedores y pagar el salario correspondiente a la segunda quincena de diciembre a los trabajadores.

Obviamente, Miguel Varela deja en claro que tal decisión tiene motivos netamente políticos. La nueva gobernanza hizo el favor a los gobiernos municipales consentidos. A los que son gobernados por la oposición les dijeron que otro día, con más calmita, podrían atender su solicitud.

Para lograr brincar el 2024, el alcalde capitalino adelantó que recurrirá a la banca privada a la que solicitará un préstamo de 30 millones de pesos, y realizará convenios con la iniciativa privada, porque el salario de los trabajadores es sagrado y él está dispuesto a salvaguardarlo.

Miguel Varela detalló sobre las participaciones que el trámite estaba autorizado. “Todo venía bien: la documentación, los mensajes, el documento de viabilidad financiera, y ayer por la tarde nos dijeron que hubo una reunión virtual en donde el gobernador mencionó que para Zacatecas capital no iba a haber adelanto ni para otros municipios de oposición”.

Vaya, vaya…

Pero, para que hagan muina en la nueva gobernanza, los trabajadores municipales recibieron su aguinaldo, la primera quincena de diciembre y la prima vacacional. Pero sigue pendiente la segunda quincena y los pasivos pendientes con los proveedores.

La cuestión, lo dijo el presidente municipal, no es si se puede o no cumplir los compromisos, sino el mensaje político de revanchismo.

La postura en contra de la construcción del segundo piso que ha emitido Miguel Varela, y por la que hoy la nueva gobernanza anda haciendo circo, maroma y teatro para que la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes les ceda ese tramo y, según ellos, así evitar los permisos municipales, los tiene más locos.

Aunque, la mera verdad, verlo como aspirante a la gubernatura es lo que realmente los desquicia.

De ahí que, por la noche, el que trabaja atendiendo las instrucciones del inquilino de La Casa de los Perros, Rodrigo Reyes Mugüerza salió a redes para dejar en claro que no es obligación del Ejecutivo andarle adelantando participación alguna a nadie, a pesar de tener una enorme, gigante, morrocotuda, inconmensurable visión municipalista.

Porque, eso sí, la nueva gobernanza primero atenderá sus necesidades y, si de casualidad por ahí le sobra algo, con esa ingente, colosal y grandiosa visión municipalista los ayudará, pero otro día y atendiendo el orden en el que pidieron.

Obvio, sin importar colores. ¡Ajá!

Se acabó lo que se vendía

Ayer, a la medianoche, concluyó el plazo para la recolección de firmas para solicitar la revocación de mandato del inquilino de La Casa de los Perros.  

Como se esperaba, la meta no se logró, así que la oportunidad se dejó pasar. Ni modo. Será para la otra.

Pero no para después dejamos la oportunidad de desearle a nuestros queridos lectores un feliz final de año. A disfrutar de la familia, de las fiestas y, claro está, de lo votado…

Nos vemos el próximo año…

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