Democracia y partidos políticos
FREDY BARAJAS
En términos históricos los partidos políticos tienen una reciente vinculación con la democracia. En sus inicios, la democracia moderna tuvo sus primeras experiencias sin la presencia de partidos tal y como hoy los conocemos. No obstante, una vez que los partidos surgieron y se consolidaron, adquirieron una vinculación íntima con la democracia representativa, a grado tal que hoy no se concibe ésta sin la existencia y la actuación de los partidos políticos.
Desafortunadamente en nuestro país, los propios partidos políticos en su interior, se han encargado de degradar y violentar la democracia. Sus procesos de selección de candidatos son todo, menos democráticos, se vuelven verdaderas cenas de negros y confrontaciones estériles que solo confunden a los ciudadanos cundo se llega el momento de elegir a algún representante, puesto que ya viene de un proceso de degradación y linchamiento.
Si bien es cierto, que el Partido Revolucionario Institucional es el que mejor librado termina después de sus procesos de selección porque entre sus militantes aún existe algo de disciplina política. Pero no con esto se puede decir que sus candidatos sean los mejor vistos por los votantes, lo anterior se debe a que la misma disciplina mostrada por sus adversarios, es un reflejo de autoritarismo e imposición que durante muchas décadas le han hecho mucho daño a las instituciones y a la democracia en su conjunto.
Por todo ello EL VOTO INTELIGENTE vuelve a tomar relevancia en los procesos mencionados anteriormente; los partidos tienen la oportunidad en cada proceso interno que viven, de permitir un verdadero ejercicio democrático, en el que permita que sus militantes hagan uso del VOTO, pero de un voto libre, sin presiones ni chantajes, y mucho menos bajo amenazas o promesas de beneficios a cambio de.
Los partidos políticos además de funcionar como mecanismos de agrupación de intereses, también son necesarios para gobernar, y tienen como finalidad promover la participación del pueblo en la vida democrática; y eso debemos tener en cuenta a la hora de emitir un voto.
Son asociaciones de interés público que se conducen de acuerdo con ciertos principios e ideas, como la de canalizar y transmitir los intereses y demandas de la población para que sean consideradas en la toma de decisión gubernamental. Votar por alguien que transmitirá nuestras ideas y defenderá nuestros intereses no es cosa menor; estamos dando además del voto, toda nuestra confianza, hagámoslo pues con inteligencia.
