La Casa de los Perros: Intensidad perredista
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
El Tribunal de Justicia Electoral del Estado de Zacatecas (Trijez) hasta ayer por la mañana, había recibido más de 40 Juicios de Protección de Derechos Políticos Electorales del Ciudadano, los conocidos como JDC, presentados por unos 70 militantes del Partido de la Revolución Democrática (PRD), de al menos 22 municipios, quienes sienten, en lo más profundo de su corazón, que sus ansias de ser candidatos fueron truncadas sin sentido ni razón.
La cuestión es que justamente ayer venció el plazo para que todos aquellos que sintieron sus derechos vulnerados, en la elección y posterior registro de candidatos a regidores, síndicos y presidentes municipales, presentaran sus JCD ante la autoridad electoral, lo que quiere decir que esa cifra de 40 no se acerca ni poquito a la realidad.
Claro está que todos aquellos a los que les frustraron sus sueños de ser candidatos se encuentran muy desesperados porque las campañas ya han iniciado, y aprecian que el Trijez, al no resolver casi casi que de un día para otro sus quejas, vulnera el principio de equidad: Mientras unos hasta en los espectaculares exhiben sus fotografías, otros no pueden salir a las calles a pedir el voto ciudadano.
Pero el Trijez, que encabeza Esaúl Castro Hernández, sí está trabajando – estos juicios ya están en instrucción y análisis– y por ello sería hoy o mañana cuando, en sesión pública, se dicte sentencia y decida, de una vez por todas, si el IX Consejo Estatal que se realizó por el rumbo de Sauceda de la Borda es el que vale, o decide que sea el que encabezó dirigente estatal Arturo Ortiz Méndez, hoy el enemigo público número 1 en el sol azteca, es el bueno.
Aquí la cuestión es que habría una resolución, a nivel federal, que ya da la razón a los que se reunieron en un salón de fiestas convertido en sede del Consejo Estatal y que sí, echaría por la borda varias candidaturas que ya están en marcha.
En juego están, por ejemplo, Valparaíso, en donde Eleuterio Ramos sigue luchando hasta el final por el ser el candidato a la alcaldía; también Concepción del Oro, lugar en el cual Ruth Ríos no da su brazo a torcer y quiere ser la abanderada de la coalición Por Zacatecas al frente, además de Sombrerete, donde Ignacio Castrejón, el actual presidente municipal que, por cierto, ha hecho un trabajo impecable en el Pueblo Mágico, quiere que se le respete su derecho a pedir a los ciudadanos que lo pudieran reelegir.
Además de, claro está, la candidatura a la diputación del Distrito local con cabecera en Río Grande, que a como dé lugar quiere Juan Mendoza, y que no está dispuesto a ceder.
Así las cosas, el Trijez estaría a unas horas de resolver esta situación que no sólo afecta a los militantes del PRD, sino también a los del Partido Acción Nacional (PAN) y de Movimiento Ciudadano, que a estas horas ven como la elección, de por sí bien complicada, se les puede caer en varios municipios y todo por aliarse con los siempre intensos perredistas.
No se debe pasar por alto el hecho de que si la resolución del Trijez no les gusta a los más de 70 militantes quejosos, ellos acudirán a la segunda instancia, la Sala Monterrey del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), sin olvidar que los otros, a esos a los que bajarían de las candidaturas, obviamente también se quejarán y, de risa loca, ya lo sé, esto será un cuento de nunca acabar mientras los días de andar en campaña se consumen uno a uno.
De vacaciones
Con motivo de la veda electoral, la mayoría, sino es que todos, los funcionarios del Gobierno del Estado se dedican a nada y a nada, y con singular alegría se encuentran en modo vacaciones, disfrutando de días de asueto a coste de los ciudadanos.
Baste sólo echar un vistazo a la agenda diaria de las dependencias en donde pareciera que el único que trabaja es Simitrio Quezada, director del Inselcap, quien ofrece una capacitación por aquí, otra más por allá, firma un acuerdo un día sí, y otro, pues también.
Y es que la nula planeación que se aprecia en la administración gubernamental tiene a todos inmovilizados porque no están capacitados ni saben qué significa una veda electoral. Entonces, ante su desconocimiento, pues prefieren quedarse quietos rascándose la pancita.
O, para sorpresa de propios y extraños, optan por encabezar ocurrencias como el certificar a pilotos de drones, sí, así como lo lee, a pilotos de drones.
Por ello, la Secretaría de Economía, cuyo titular, Carlos Bárcenas Pours, fue uno de los que pasearon por Alemania y que, se supo, gastaron la friolera de un millón y medio de pesos, ahora, a través del Icatez, ofrecerá este singular curso de 20 horas de duración, y con un costo de 660 pesos, para que los amantes de los drones los sepan alzar al vuelo de la manera correcta.
En serio no hay cosas más importantes qué resolver en este estado sumido en la pobreza, el subdesarrollo y la violencia desenfrenada. En fin.
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