Evalúan en la UAZ el impacto ecológico que generan las personas
Zacatecas, Zac.- En la Unidad Académica de Ciencias Biológicas de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UACB-UAZ), un equipo de investigadores evalúa el impacto ambiental generado por las personas —docentes y alumnos— que habitualmente ocupan el espacio físico del área de Ciencias Básicas de dicha universidad, considerada como biológicamente productiva. Este indicador ambiental es conocido como huella ecológica.
Las personas involucradas en este proyecto son las doctoras Claudia Maldonado Tapia y María Alejandra Moreno García, así como las alumnas de noveno semestre de la licenciatura en biología, Alejandra Dayane Reveles Magadán y Aleissa Itzel Balderas Bañuelos.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, la doctora María Alejandra Moreno García informó que este proyecto tiene un antecedente de otra investigación de educación ambiental que fue implementada en 2006, titulado Cultura ambiental y desarrollo sostenible en la Universidad Autónoma de Zacatecas, a raíz de que la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) de manera conjunta solicitaron a las universidades de México desarrollar proyectos de educación ambiental.
“Con base en este primer proyecto fueron colocados focos ahorradores, botes de basura para su clasificación y fue nombrada 100 por ciento libre de humo de tabaco. Cada dos o tres años visitan las escuelas para evaluar la cultura ambiental, por lo que para el equipo involucrado en este proyecto, realizar este diagnóstico de la huella ecológica nos permite conocer el impacto sobre el agotamiento y disponibilidad de los recursos, en la manera en que se están utilizando debido a la demanda de producción y consumo, así como generar una conciencia en quienes acuden regularmente a las instituciones, como estudiantes y docentes”, expuso.
Por su parte, la alumna Alejandra Dayane Reveles Magadán explicó que el análisis de la huella ecológica también indica cuál es el nivel que tiene la biósfera para absorber los residuos generados por sus habitantes, así como su capacidad para regenerar sus recursos naturales.
“La problemática ambiental es un fenómeno que ha impactado a la sociedad en diversos niveles, estamos en un momento crítico en el que la humanidad debe elegir su futuro. El desarrollo y aplicación de metodologías para identificar el impacto en nuestro planeta es la huella ecológica, que nos brinda una comprensión acerca de los impactos de nuestro consumo”, describió.
La doctora María Alejandra Moreno explicó que existen proyectos de cultura ambiental que no requieren inversión financiera y representan un ahorro en recursos económicos para las instituciones. “Lo que necesitamos es mantener una constancia en brindar la información para que las personas se unan a las acciones que a todos nos favorecen”, enfatizó.
Caracterización de espacio físico, población y aplicación de encuestas
Dayane Reveles manifestó que otro de los objetivos de este estudio es hacer una propuesta para la optimización de los recursos, clasificación de los residuos y generación de conciencia en docentes y alumnos. Para ello aplicaron un instrumento —encuesta— en ambas instituciones, en donde el equipo determinó si las escuelas cuentan con focos ahorradores, suficientes botes de basura y si es correcto el manejo de la energía eléctrica.
“Respecto a los resultados obtenidos mediante las encuestas, observamos que en las instituciones no se está llevando a cabo una gestión ambiental adecuada, ya que no separan los residuos y el manejo del agua y energía eléctrica es inadecuado. Esto indica que el impacto al medio ambiente es significativo”, comentó.
Por su parte, Aleissa Balderas informó que las encuestas aplicadas en la escuela de Matemáticas señalaron que 29 por ciento considera que en su institución no existen suficientes contenedores de basura, 40 por ciento indicó que no cuenta con servicio de agua potable al menos una vez a la semana, mientras que 20 por ciento afirmó que diariamente se presenta este problema.
“Estas cifras nos parecen alarmantes, puesto que no contar diariamente con los servicios básicos es algo que se debe solucionar; por ejemplo, con el caso del agua, sabemos que es un problema del mal uso, puesto que la escuela cuenta con un presupuesto especial para el suministro de agua y la razón por la que se acaba es el desperdicio de la misma”, expresó.
Dayane Reveles indicó que 71 por ciento de los encuestados afirmó que en la escuela de Física sí existen suficientes contenedores de basura, 40 por ciento señaló que al menos una vez a la semana la institución educativa carece de servicio de agua potable.
Propuestas de remediación para las instituciones
La doctora María Alejandra Moreno manifestó que a pesar de que en esta primera etapa del proyecto se caracterizó la huella ecológica de dos instituciones, el objetivo final que busca el equipo involucrado es aplicarlo a todas las escuelas de la UAZ, cuya cantidad de alumnado oscila entre los 43 y 45 mil estudiantes.
“La promoción de ideas de cuidado ambiental y prevención ante el desperdicio de agua y energía eléctrica en la totalidad de la población estudiantil representa un impacto importante, porque si la mitad llega a aplicar lo que les enseñemos, hablamos de al menos 21 mil estudiantes que contribuirían a la protección ambiental en nuestro estado”, explicó.
Manifestó que el equipo elaborará un manual dirigido para estudiantes y alumnos de la escuela de Física para informar acerca del manejo de desechos peligrosos en los laboratorios. Con esto se previene el desarrollo de focos de contaminación e incrementará el aprovechamiento de los residuos y favorecer el desarrollo sostenible de la institución.
“El cuidado del medio ambiente es deber de todos. Tratamos de generar conciencia y fomentar la cultura ambiental con las demás personas. Sabemos que un gesto que se tenga al día ya logra una diferencia y ya estamos fomentando acciones positivas en el ambiente”, concluyó.
LNY/AgenciaConacyt
