¿Y dónde quedó el arte de convencer?
GERARDO DE ÁVILA (*)
Se fue una semana más de campañas políticas vacías, ocurrentes y frívolas. El panorama rumbo al 7 de julio es incierto para todos los partidos políticos como para los candidatos (as), aún y con las tendenciosas encuestas de LEMA que se acostumbró a vivir bien desde el sexenio anterior. ¿Y el IEEZ?, bien gracias.
¡Y todos son todos!
El arte de convencer se ha perdido. Hay pocos oradores capaces de mover conciencias. El desprecio hacia la política y los políticos crece en este sistema de República. Las viejas prácticas de coacción del voto persisten. La clase política está caduca y agotada y los nuevos cuadros no tienen idea.
¡A dónde iremos a parar!
Y aunque no lo parezca, el segmento de ciudadanos (as) indecisos va a la alza. De tal suerte, que no sorprendería que el abstencionismo haga acto de presencia el día de la jornada electoral. Los partidos políticos y los candidatos deben hacer lo posible para que el porcentaje no sea tan alto. Complicado.
¡La legitimidad también está en duda!
Si el PRI de Juan Carlos Lozano Martínez se casa con la idea de que obtendrán el “carro completo” en la elección de julio próximo, el golpe podría ser más duro si los resultados no se dan. Para la oposición (o lo que queda de ella), compite, pero sin una estrategia sólida. Están en la idea de recuperar algo de poder.
¡Por lo pronto se vale soñar!
Así las cosas, a tres semanas de que iniciaron las opacas campañas políticas, los candidatos y candidatas a presidentes municipales o las diputaciones locales ya se dieron cuenta que cada vez resulta más complicado convencer a los electores. El PRI, PAN-PRD, PVEM, PANAL y PT-PC la están viviendo.
¡Muy complicado convencer hoy a la gente!
Los candidatos podrán seguir dando despensas, cemento, pintura para las casas, utensilios para el hogar, prometer desde ahora empleo, pero eso no garantiza nada. Nadie se salva, todos están haciendo exactamente lo mismo. Muy poco aspirantes han apelado a otros sentimientos y necesidades de la gente.
¿Acepte lo que le den, pero su voto razone bien?
Ahora bien, dentro de este panorama sombrío para todos, los abanderados del PRI se encuentran, por lo menos, más coordinados en el discurso, en imagen y en la problemática social, pero apenas tienen unos cuantos días. A los partidos y candidatos de la oposición les ha costado más trabajo.
¡Pero no basta sólo estar coordinados!
Paradójicamente, es muy notorio, que tanto los partidos políticos como los candidatos no están cuidado la atención hacia los diferentes sectores de la población, peor aún: no ponen énfasis donde lo deben hacer. Hay un descuido evidente en esta parte. No pueden conducirse igual en todos los sectores.
¡Cada sector requiere atención distinta!
Con las manos maniatadas…
Por lo pronto, el gobernador del estado Miguel Alonso Reyes tiene las manos maniatadas porque, literalmente así lo mandata la ley electoral, aunque se supone que no ha dejado de trabajar. En el papel, las ayudas a grupos vulnerables y los apoyos a sectores productivos siguen su marcha.
¡No así su difusión!
Como nunca antes, el electorado debe estar más al pendiente de lo que están proponiendo quienes aspiran a un cargo de elección popular. Y aunque la forma de hacer política sigue siendo la misma, seguramente, a la hora del juicio final la sociedad, la que acuda a votar, tendrá que hacerlo por el menos peor.
¡Cuidado, no es lo mismo Juana que Chana!
En medio de todo esto, no faltamos a la palabra, cuando decimos que la política como los políticos atraviesan por una crisis de credibilidad enorme, por eso, cada vez es más difícil convencer a los electores que se muestran escépticos. Desde luego, la apatía tiene una explicación: partidos y los políticos han fallado.
¡Nuevamente, todos son todos!
Como se añoran a aquellos políticos que con el sólo discurso convencían. Cuando del peso de la palabra hacía el gran discurso que le llegaba a la gente. En el pasado, -muy en el pasado- los políticos se la pasan hablando de cambios y leyes, ahora, sólo hablan de negocio y de cómo brincar de un lado a otro.
¡Hay honrosas excepciones, pero muy honrosas!
A partir de este momento, los partidos políticos y sus abanderados contarán sólo con cinco semanas para intentar convencer a la población de que representan la mejor opción. A partir de hoy, quien no modifique su estrategia política se quedará atrás con todo y encuestas.
¡Porque la encuesta que vale es la del 7 de julio!
No perdamos de vista, que nos encontramos en la elección intermedia del actual gobierno Aquí, tanto el jefe del Ejecutivo, como los actuales presidentes municipales y diputados serán evaluados por una sociedad que muestra rasgos de hartazgo e indiferencia ante el estado de cosas.
¿Cómo está Zacatecas, ese es el tema?
En resumen, sin bien el panorama político es poco halagüeño, la sociedad debe de dejar la apatía a un lado e interesarse por la política, a pesar de todos y a pesar de los políticos que hoy piden el voto. Es lo que tenemos y el 7 de julio hay que acudir a las urnas. Votemos, aunque sea por el menos peor.
¡Sino, otros lo harán por nosotros y eso es peor!
Para el anecdotario:
1) Parece que los presidentes estatales de los partidos políticos en Zacatecas no les preocupa que buena parte de sus candidatos anden en la frivolidad. Es real, la ausencia de propuestas que comienza a molestar a los posibles votantes. Cuidado, un alto en el camino para replantear la estrategia no es malo. Se vale equivocar, lo que no es aceptable es que quieran engañar a la sociedad.
* Habrá cambios en varios lados, es claro.
Es mi opinión.
(*) Periodista.
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