Urge legislar la video vigilancia
RAÚL MANDUJANO SERRANO
Es muy simple –argumenta el hacedor de las blasfemias periodísticas-, si es la tecnología una herramienta capaz de identificar a un presunto delincuente ¿por qué no puede ser admitida como prueba penal en casos criminales? Mire, agrega el amanuense, allá por marzo de 2004, René Bejarano, en ese tiempo diputado local y dirigente del PRD, estuvo con Víctor Trujillo (Brozo), en el programa “El Mañanero” y se transmitió al aire su imagen recibiendo fajos de billetes. Bejarano fue desaforado e ingresó al Reclusorio Sur por uso de recursos de procedencia ilícita y lavado de dinero, para luego ser absuelto el 6 de julio de 2005. Curiosamente, uno de los pretextos de libertad fue el uso de una videograbación “no autorizada” por el imputado.
Le pasó a Eva Cadena Sandoval, diputada local y candidata de Morena a la alcaldía de Las Choapas, Veracruz. Fue grabada cuando recibía en fajos de billetes, medio millón de pesos para –según dijo- Andrés Manuel López Obrador. Aquí no pasó nada y de nada valen los esfuerzos municipales para instalar cámaras en el Edomex si no son consideradas por el Juzgador como pruebas que acrediten la participación de delincuentes. En la Ciudad de México, en 2018, la Suprema Corte de Justicia de la Nación avaló como legal el seguimiento de las cámaras de video vigilancia del C-5 a personas que hayan cometido delitos, es decir, es la única entidad en posibilidades de usar como documental alguna evidencia en video.
Aquí, en la entidad se tienen 20 mil cámaras conectadas al C-5 mexiquense para inhibir la incidencia delictiva, mientras que una demanda social a los concesionarios del transporte de pasajeros es la instalación de cámaras, así que, si son útiles para detectar hampones ¿Por qué no se legisla al respecto?
Nelson Arteaga, un investigador de la UAEMEX, refirió en 2016, que en México, el uso de la video vigilancia en leyes y reglamentos (que son pocos), están centrados en garantizar que los datos que recaben sirvan para castigar faltas administrativas y penales (que no son admitidos por jueces), y evitar violaciones al derecho de privacidad (lo que sí es sancionado con la defensa en el manejo de imágenes y sonidos).
Se debe legislar en el tema, sin duda, piensa el periodista, con sus pros y contras, a fin de que sea una herramienta y no un estorbo. Así que ¡ya! A ponerse las pilas diputados, que el combate al crimen se logra con inteligencia.
Colofón.- Terrorismo o extorsiones en el transporte de pasajeros
Mientras degusta de un Guacabaqui, que les quedó de rechupete. Se trata de un platillo sonorense, típico de los Yaquis, preparado con garbanzo, carne de res y trozos de elote, calabacitas, zanahorias, papas, repollo, sazonado en chile de árbol, acompañado de un arroz blanco con una yema de huevo y un vaso de agua de limón fría, el curandero de los prefacios impertinentes observa como una granada lanzada por criminales extorsionadores a una “combi” de pasajeros, es un tema que parece minimizarse.
De acuerdo con el fiscal general de Justicia estatal, don Alejandro Gómez, este incidente fue propiciado por una banda que exigen a transportistas “derecho de piso”, y para obligarlos también quemaron varias unidades. Operan en Tecámac y se hacen llamar “Los Monterrey”, una organización que fue iniciada por un Tal Miguel Ángel “N”, capturado, dicen, en Sonora y cuyo hermano la heredó y lidera, pero ¡ojo! Ni idea por dónde anden… Imagínese Usted que hubiera video cámaras en esas unidades, que pudieran ser identificados y capturados, y que MP y Jueces tuvieran herramientas para condenarlos… El líder sotanero debe dejar de soñar…
La del estribo.- Las velas
Cierto día un representante de los derechos humanos hizo una visita a una cárcel de Estados Unidos, pasando por una de las celdas notó que de adentro salían unos gritos espantosos, y pregunto ¿qué son esos gritos? y el carcelero le dijo es que ahí está la silla eléctrica, ¡pero como no hay luz pos lo están ejecutando con velas!
Twitter: @raulmanduj