Universidades del Bienestar pueden legitimarse con transparencia
JULIETA DEL RÍO VENEGAS
La educación de infancias y adolescencias en México se refuerza con el derecho de acceso a la información. Por ejemplo, mediante la Plataforma Nacional de Transparencia, cualquier estudiante puede acceder a información sobre becas, vacantes para poder laborar, información para realizar trabajos de investigación para su tesis o tareas, requisitos o procedimientos para titulación, además del presupuesto que ejercen las universidades públicas del país, entre otros datos.
El proceso educativo de las niñas, niños y jóvenes debe ir acompañado de transparencia, y hacia allá debemos dirigirnos todas las instituciones involucradas. Por ejemplo, la construcción de los planteles, los salarios de los docentes de escuelas públicas, el padrón de beneficiarios de becas, entre otras cuestiones, debe realizarse teniendo como base la rendición de cuentas. De lo contrario, se le da entrada a la opacidad, que es una posible causa de corrupción.
Hace unos días, en la Ponencia que coordino en el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), resolvimos un recurso relativo a este tema. Una persona, a través de la Plataforma Nacional de Transparencia, requirió al Organismo Coordinador de las Universidades para el Bienestar Benito Juárez García, conocer qué empresa o persona física fue la encargada de la construcción de las 203 sedes de las Universidades del Bienestar, así como la copia del contrato o los contratos que se adjudicaron para dichos proyectos.
Dado que el Organismo Coordinador de las Universidades para el Bienestar no contestó, la persona solicitante interpuso su queja (llamada “recurso de revisión”) en el INAI. Después de un análisis, determinamos ordenar a esta autoridad a que realice una búsqueda exhaustiva en sus unidades administrativas competentes para atender la solicitud ciudadana.
Es importante resaltar otra cuestión en este asunto. La persona solicitante acudió primero con la Secretaría de Educación Pública, instancia que señaló no contar con las facultades para conocer de lo requerido, por lo que la orientó a presentar su solicitud ante el Organismo Coordinador de las Universidades para el Bienestar, sujeto obligado que no respondió.
El objetivo de las Universidades para el Bienestar es valioso y el Estado necesita ofrecer más y mejores espacios educativos para las y los jóvenes en nuestro país. De acuerdo con el Banco Mundial, la tasa de cobertura de educación superior en México es de 46 por ciento, lo cual demuestra que se requieren más universidades.
En este objetivo por un México más preparado y con un mejor presente y futuro, la transparencia es una aliada que beneficia a toda la sociedad. Además, como lo hemos señalado anteriormente, la adjudicación de contratos para la construcción de infraestructura gubernamental requiere transparencia. Así se brinda claridad a la sociedad sobre el uso de los recursos públicos.
Desde el INAI lo que buscamos es que las y los jóvenes estén mejor preparados cada día y que ejerzan sus derechos. Para ello, necesitamos información. Es obligación de todas las autoridades hacer efectiva esta realidad.
X: @JulietDelrio