Terror en Maratón de Boston; tres muertos y más de cien heridos
Boston, Massachusetts.- Dos explosiones cerca de la línea de meta del maratón de esta ciudad causaron la muerte de tres personas, dejaron heridas al menos a 130 y desataron en Estados Unidos y el mundo una ola de tristeza e indignación.
Entre los fallecidos está un niño de ocho años; 17 de los heridos fueron reportados en estado crítico.
El primer estallido ocurrió a las 15:00 horas locales (2 de la tarde de México), cuando el reloj de la meta del maratón, uno de los más tradicionales del mundo, marcaba 4 horas, 9 minutos y 43 segundos, dos horas después de que cruzara el ganador de la justa, el etiope Lelisa Desisa. La segunda explosión ocurrió sólo 10 segundos después de la primera.
Aunque el presidente Barack Obama evitó calificar los hechos como un acto terrorista, prometió que los responsables sentirán “todo el peso” de la justicia.
“Todavía no sabemos quién lo hizo y por qué y no debemos adelantar conclusiones antes de contar con todos los datos”, advirtió en su mensaje.
El mandatario instruyó al FBI y a la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, movilizar los recursos apropiados para investigar y responder a un acto “sin sentido”.
Asimismo, ordenó “incrementar la seguridad en Estados Unidos si es necesario”, lo cual iniciaron desde ayer las ciudades de Washington y Nueva York.
La tragedia motivó que el grupo de ocho senadores que negoció durante meses una propuesta de reforma migratoria aplazara la conferencia donde daría a conocer su plan, prevista para hoy.
En su cuenta de Twitter, el presidente de México, Enrique Peña Nieto, expresó sus condolencias con las familias de las víctimas y al pueblo estadunidense. Asimismo instruyó a la Cancillería a contactar a los mexicanos que estaban en el lugar; se informó que 231 connacionales se inscribieron para competir en la justa.
Madaí Pérez, Magda Morales y Jesús Nieto, atletas mexicanos que participaron en la justa, narraron cómo vivieron el momento de las explosiones, al igual que José Castillo, profesor de la Universidad de Harvard.
Boston vive jornada de terror por explosiones
El comisionado de la policía de Boston, Massachusetts, Ed Davis, confirmó ayer que tres personas murieron a raíz de las dos explosiones ocurridas durante el maratón en esta ciudad, que dejó también más de 130 heridos.
Entre las víctimas se encuentra un niño de ocho años. De los heridos, 17 se encuentran en estado crítico.
Las explosiones se produjeron cerca de la línea de llegada de la carrera, con un intervalo de unos doce segundos, cuando todavía había corredores en la pista y numeroso público presenciando la competencia, una de las más prestigiosas de este tipo de acontecimientos deportivos.
Davis añadió que la investigación está liderada por la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y pidió no adelantarse a las afirmaciones de que se trató de ataques terroristas, pues la indagación apenas se lleva a cabo; sin embargo, se estudiará por ese ángulo.
El comisionado desmintió, por otro lado, que las fuerzas de seguridad hayan detenido a algún sospechoso, contrariamente a lo que informaron algunos medios.
Por su parte, el gobernador de Massachusetts, Deval Patrick, reiteró que las autoridades locales, estatales y federales trabajan estrechamente para esclarecer los hechos de este “horrendo suceso” y que miembros de la Guardia Nacional “han resguardado la escena del crimen”.
“He visto dos explosiones, la primera directamente detrás de la línea de meta. Oí un gran estallido y luego vi salir el humo”, dijo Chris Cassidy, periodista del diario Boston Herald y participante en el maratón.
“Vi a muchos heridos graves”, dijo otra testigo. Las fotos mostraron manchas de sangre en la acera próxima a las explosiones. “Todo era un caos”, contó Chad Wells a CNN.
Varios espectadores fueron llevados en un primer momento a la carpa médica destinada a atender a los corredores fatigados, afirmaron los testigos citados por los medios locales.
Según algunos testimonios las explosiones tuvieron lugar detrás de las barreras de contención del público y relativamente lejos de los corredores, en una carrera en la que participaban 26 mil personas.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se unió a las condenas a una “violencia sin sentido” y manifestó sus condolencias a las familias de las víctimas.
De confirmarse que se trata efectivamente de un acto terrorista, podría ser el primer ataque mortal de este tipo en Estados Unidos desde los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York y Washington.
“He dirigido todos los recursos del gobierno federal para ayudar a las autoridades locales y estatales para proteger a nuestra gente, incrementar la seguridad alrededor de Estados Unidos cuando sea necesario e investigar qué pasó”, informó el presidente Barack Obama.
Aplazan presentación de reforma
El Grupo de los ocho senadores estadunidenses, que negoció durante meses una propuesta de reforma migratoria, aplazó la rueda de prensa en la que debía presentar hoy formalmente el plan reformista debido a las explosiones en Boston, informaron fuentes legislativas.
Una fuente del Senado, que pidió el anonimato, confirmó que la rueda de prensa fue cancelada hasta nuevo aviso.
El proyecto de ley para la reforma migratoria pretende la legalización y eventual ciudadanía de los 11 millones de inmigrantes indocumentados en Estados Unidos.
Fue justo donde estuve: profesor
El mexicano José Castillo, profesor de la Universidad de Harvard en Graduate School of Desing, caminó por la acera norte de la calle Boylston cuando el reloj del maratón marcaba tres horas con 35 minutos y en el lugar reinaba un ambiente festivo.
Como cada año en el tercer lunes de abril, ayer se celebraba el prestigioso Maratón de Boston que se organiza desde 1897.
“Este es un día muy especial para Boston, de hecho muchas escuelas y oficinas se toman el día porque es como un día de asueto y el maratón es un evento de mucha tradición. La energía era increíble, el cielo tenía un azul sensacional y se percibía una energía muy positiva”, relató Castillo en entrevista para Excélsior.
Tan sólo 34 minutos después de que Castillo abandonó el lugar ocurrieron las explosiones que dejaron tres muertos y decenas de heridos.
Castillo, quien dijo sentirse abrumado por las explosiones, recibió la noticia cuando llegó al campus de la Universidad de Harvard y se preparaba para impartir su cátedra: “empecé a ver las fotos y la información publicada y me dije: no puede ser, es justo donde yo estuve”.
El campus de la Universidad de Harvard se encuentra en el distrito de Cambridge, Massachusetts, a 5.3 kilómetros de distancia de donde explotaron las dos bombas, en Boston.
“Hay un ambiente muy extraño en Boston, incluso en esta zona de Cambridge de repente se escuchan patrullas con las sirenas, se suspendieron muchos eventos públicos que estaba programados para hoy y se percibe preocupación, indignación y un poco de miedo”, afirmó para este
rotativo.
Comentó que muchas personas decidieron retirarse a sus hogares, por lo que se observa las instalaciones menos concurridas.