Respalda Mejía elevar a rango constitucional derecho al agua
México, D.F.- El senador del PRD, Antonio Mejía Haro, celebró la decisión de la Cámara Alta de elevar a rango constitucional el acceso al agua como un derecho de todos los mexicanos, al considerar que “es un bien escaso” que determina la preservación y equilibrio de los ecosistemas, la producción de los alimentos y, además, es indispensable para el bienestar y salud del ser humano.
El legislador por Zacatecas señaló que “el agua es un recurso vital para la supervivencia de todo microorganismo en nuestro planeta”, por lo que es necesario preservarlo y garantizar su aprovechamiento en los diferentes usos, incluyendo el uso doméstico.
Comentó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) reporta que en el mundo 900 millones de personas, es decir, 14 por ciento de la población del planeta, carece de agua potable. Y de acuerdo a la Conagua, en 2009 había 10 millones de mexicanos que carecían de agua potable y 13.7 millones que no contaban con alcantarillado en sus viviendas y el tratamiento de aguas residuales apenas alcanzaba el 33.3 por ciento.
“La carencia de los servicios de agua potable y de drenaje son causas de enfermedades infecciosas gastrointestinales, parasitarias (…) y otras enfermedades que están ligadas a la pobreza, inclusive hasta respiratorias”, dijo.
Comentó que se estima que para 2030, en algunas regiones del norte del país y en el Valle de México, la disponibilidad media anual de agua sea inferior a los mil metros cúbicos por habitante al año, es decir, una condición que se califica como de escasez grave, la cual se acentuará aún más en las regiones enclavadas en las zonas áridas como es el estado de Zacatecas, en donde todavía se tiene el problema de la sobreexplotación de los mantos acuíferos.
“Como vemos, la situación del agua en nuestro país es compleja y delicada, derivada entre tantos factores, de la falta de disponibilidad, la contaminación, el desperdicio, sobreexplotación, crecimiento acelerado de la población, la utilización irresponsable del recurso y de la falta de infraestructura hidráulica e hidroagrícola”, expresó.
Lo anterior, aseveró, ha producido impactos devastadores al medio ambiente y a la economía nacional, “el irreversible impacto ecológico nos enfrenta a la desaparición de lagos, la disminución de canales de ríos, agotamiento de manantiales, pérdida de vegetación, desaparición de ecosistemas, depreciación de la calidad del agua, hundimiento y agrietamiento del subsuelo, alza de costos de extracción del agua para diferentes actividades del hombre y, sobretodo, relacionadas con la producción de alimentos”.
“Es momento de cambiar la política pública priorizando la construcción de infraestructura para captación y almacenamiento de agua como son las presas, la infraestructura para el uso eficiente del agua para su saneamiento y reciclaje. No debemos de seguir dilapidando este líquido vital en la agricultura que consume un 77 por ciento de aguas disponibles con riesgos de inundación, riegos rodados, riegos negros, donde se desperdicia hasta un 60 por ciento del agua, eso ya es un sacrilegio”, enfatizó.