Por la educación pública: Diálogo y acuerdos
CAMERINO ELEAZAR MÁRQUEZ MADRID
El movimiento de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE) con el respaldo de diversas organizaciones de la sociedad civil, padres de familia y de la opinión pública nacional e internacional, logró que el gobierno federal haya aceptado dialogar a efecto de revisar la mal llamada reforma educativa, misma que representa un claro retroceso a los derechos laborales del magisterio.
Recientemente los dirigentes de la CNTE y el Secretario de Gobernación anunciaron la instalación de las mesas de diálogo para dar solución al conflicto magisterial con motivo de la aplicación de la citada reforma.
La CNTE, con argumentos válidos puso en tela de juicio y ante los ojos del mundo los graves problemas que se viven en México, principalmente la situación en que se encuentra la educación pública.
Se demostró que la reforma educativa emanó sin la legitimidad del pueblo mexicano, sin la aprobación y consulta previa e informada del sector magisterial, de padres de familia así como de las organizaciones civiles que luchan en pro de los derechos laborales de los maestros.
Son inaceptables los hechos desencadenados luego de la entrada en vigor de la reforma educativa que encabezó Enrique Peña Nieto, un claro ejemplo son los lamentables actos autoritarios y de represión, suscitados el pasado 19 de junio en el municipio de Nochixtlán, Oaxaca, donde los enfrentamientos dejaron al menos diez muertos y más de cien heridos.
La implementación de Ley General del Servicio Profesional Docente impactó y afectó al magisterio y la sociedad mexicana, su contenido atenta contra la estabilidad y el futuro laboral de los maestros, derechos laborales adquiridos que todo trabajador debe tener garantizados.
Dicha ley vulnera los derechos del magisterio, debido a que se maquinó una evaluación sin la previa capacitación a los docentes y sin considerar la situación precaria en que laboran, así como las condiciones pluriculturales y socioeconómicas de cada zona de nuestro país.
En 2015 y 2016 la evaluación ha sido una simulación, ya que únicamente fueron evaluados 300 mil maestros de los 1.2 millones que hay en México. Además, la supuesta evaluación es antipedagógica toda vez no contempla las diversas circunstancias, materiales y culturales, de las regiones en que laboran nuestros maestros.
De los siete indicadores para la aplicación de la evaluación docente sólo son tres los que se utilizan: Opción múltiple, Muestras de trabajo de alumnos y Plan de clase.
Es necesario referir que en varios casos la mal llamada reforma educativa quedó bajo la ejecución de los gobernadores, desde la emisión de convocatorias hasta la asignación de plazas.
La evaluación docente es sólo una herramienta del sistema educativo en México, por lo que ésta no debe direccionarse al condicionamiento laboral de los maestros, por ello deben implementarse mecanismos y procedimientos que salvaguarden sus derechos, asimismo para que las autoridades estatales y federales los reconozcan.
Por otro lado, la gente debe saber cuáles son los aspectos de mayor relevancia para que un maestro pueda ser evaluado, mismos que no son considerados en Ley del Servicio Profesional Docente, muestra es que la reforma educativa no contempla un sistema nacional de becas y de mejoramiento de escuelas.
En primer término la reforma debe mejorar los métodos de enseñanza-aprendizaje, las condiciones de estudio, los salarios de los maestros y la infraestructura educativa, por ello, la necesidad de que existan indicadores verdaderos de esos aspectos.
En ese sentido, debo decir que esa reforma se creó con el objetivo principal de impulsar un modelo educativo centrado en el individuo y no en el ser colectivo, inclusivo se promueve la diferencia y la competencia entre los alumnos.
Asimismo, en la reforma educativa siembra la existencia de maestros autoritarios pues quedan obligados a impartir un programa académico único, con contenidos que inhiben la crítica e iniciativa entre los alumnos, por ejemplo materias como Historia, Civismo, Ética y Filosofía son tratadas de forma irrelevante.
El pasado 11 de julio, la CNTE y la Segob, acordaron entablar tres mesas de diálogo, la Política, la Educativa y la de Carácter Social, en las que los legisladores federales podrán participar, todo con el propósito de llegar a consensos que generen acuerdos entre los maestros y las autoridades.
Cabe mencionar que senadores y diputados federales del PRD, PT y Morena crearon un frente parlamentario para derogar la reforma educativa y con ello superar el encono y el conflicto magisterial y social, no sin antes castigar a los actores materiales e intelectuales de los hechos violentos en Oaxaca.
* Secretario de Organización del Comité Ejecutivo del Partido de la Revolución Democrática (PRD)