“Pitecántropos” agresivos
RAÚL MANDUJANO SERRANO
El amanuense se aprieta las manos… Que pinche coraje (disculpe usted la destemplanza del escribano) pero, es que igual que miles de mexicanos, vio la cruda imagen del ataque rabioso de un imbécil golpeando a un adolescente de tan sólo 15 años, que dispuso trabajar durante las vacaciones, en una sucursal Subway, en la capital de San Luis Potosí. Hoy se encuentra hospitalizado, con la nariz fracturada, esperando que el cerebro se desinflame, al igual que otras lesiones en el cuerpo. Y todo porque un sujeto de marras, identificado como Fernando Medina Ramírez, se sintió agredido porque le pidieron que se formara para ser atendido.
En “X” (antes Twitter), este individuo fue llamado “pitecántropo” por cibernautas, que refieren que tiene protección política, porque forma parte de un grupo de golpeadores al servicio del gobierno de San Luis Potosí. Pero lo relevante es cómo en la actualidad, las redes sociales muestran escenas que antes hubiera sido imposible imaginar. Recuerda usted el brutal ataque de ese matrimonio que quisieron cobrar venganza de una supuesta agresión a su hijo en el kínder. Laura “N” y Jesús Adib “N” –Frente a su vástago-, atacaron a Brenda, una maestra, la insultaron, golpearon y “encañonaron” con una pistola, la hincaron y le gritaban que le pidiera perdón al niño de sólo 3 años, quien reía y aplaudía ante dicho escarmiento.
Y ahora quiúbole con esos policías municipales de Zacualtipán, en Hidalgo, que aparecen en video golpeando a un adulto mayor de nombre Estanislao Hernández, quien murió por las aparentes lesiones que le causaron. La gente quemó e hizo destrozos en el Ayuntamiento, y después hicieron lo mismo en la casa del alcalde. Y es que los ciudadanos vivimos inmersos en la violencia que se ha normalizado, pero, además, que nos ha hecho estar alertas y reaccionar de forma agresiva o defensiva.
Son cientos de ataques más, y de violencia excesiva que se publican a diario en redes sociales, así que, lo que sucede dejó ya de ser una novedad. México padece de un aumento en los niveles de violencia. Desde la verborrea majadera de un senador que aspira a ser presidente, como Gerardo Fernández Noroña, hasta los ataques físicos de sujetos como los que le mencioné, y súmele usted también los cientos de homicidios diarios, las desapariciones, secuestros, extorsiones, los colgados en puentes, los ataques sexuales, y las agresiones en el hogar. Tanta exposición a la violencia también es causante de trastornos mentales, de consecuencias para la salud y el bienestar, que si bien, no son definitivas para reaccionar violentamente, si influyen para tener y vivir en sociedades agresivas y peligrosas, y sabe usted qué influye también, los malos servicios públicos, el transporte, los baches… En fin…
Los malditos baches de Toluca
Mientras degusta de unos tacos de picaña con guacamole, acompañados de una deliciosa agua de durazno, el hacedor de noticias irreverentes piensa que, si el señor Raymundo Martínez decidiera reelegirse como alcalde de Toluca, perdería. Es una mala idea. Los tolucos están (diría estamos) hartos de la mediocridad política. La ciudad no es el centro, también está en las 47 colonias y barrios llenos de baches y agujeros peligrosos. Circule usted por Primero de Mayo, desde Isidro Fabela hasta la prolongación de Comonfort, y entenderá qué terrible y riesgoso, y póngale nombre a la calle que usted quiera, de cualquier barrio. Aún no sé cuál es la obra del señor, pero esa promesa de: “Vamos por calles seguras, más iluminadas y dignas para el tránsito peatonal y vehicular”, fue puro atole con el dedo… Hasta otro Sótano.
Mi “X”: @raulmanduj