Otra muerte sobre el asfalto: la carretera de la muerte cobra una vida más
Zacatecas, Zac.— La autopista federal 45, en su tramo Osiris-Aguascalientes, volvió a teñirse de sangre. A las 11 de la mañana, en el kilómetro 96 de esta vía que los lugareños ya conocen como “la carretera de la muerte”, un tráiler de quinta rueda embistió de frente a un automóvil compacto. El saldo: un muerto, un vehículo calcinado y una vez más, la impunidad rugiendo a alta velocidad.
El tractocamión, que circulaba presuntamente con exceso de carga y fallas mecánicas —particularmente en el sistema de frenos—, perdió el control y se estrelló contra el sedán. El impacto fue brutal: el coche ligero terminó a un costado de la carretera envuelto en llamas, alimentadas por el combustible derramado tras la colisión.
Elementos de la Coordinación Estatal de Protección Civil y del municipio de Guadalupe llegaron al lugar para combatir el incendio. Las labores fueron inmediatas, pero infructuosas para salvar al ocupante del vehículo compacto, cuyo cuerpo fue encontrado sin vida entre los restos carbonizados. Así lo confirmó Jorge Luis Gallardo Álvarez, titular estatal de Protección Civil.
El conductor del tráiler fue detenido por autoridades mientras la Guardia Nacional, división caminos, tomó control del lugar para realizar el peritaje correspondiente y deslindar responsabilidades. La investigación preliminar apunta a negligencia: exceso de carga, una unidad mal mantenida y, probablemente, un operador imprudente.
La autopista 45 acumula ya una larga lista de tragedias. Cada muerte se suma a una estadística fría, pero detrás de cada número hay una familia rota y una autoridad que no ha sabido —o no ha querido— contener el infierno mecánico que ruge sobre esta carretera.
Hoy fue un desconocido. Mañana puede ser cualquiera.
LNY/Redacción
