Obtienen universitarios premio en categoría de conservación
Zacatecas, Zac.- La empresa constructora mexicana “CAV. Diseño e Ingeniería” obtuvo el “Premio Francisco de la Maza”, otorgado por el INAH, en la categoría de “Conservación del patrimonio arquitectónico y urbanístico”.
Al externar el orgullo que representa el que docentes y estudiantes de la UAZ hayan formado parte del equipo que desarrolló este proyecto entre 2009 y 2010, Francisco Montoya Mar, docente-investigador de la Unidad Académica de Antropología y quien tomó parte en este trabajo, expresó: “Sabíamos que era un reto de trabajo y una inversión de esfuerzo bastante grande y decidimos entrarle”.
Explicó que este proyecto de restauración del Templo de Santo Domingo se presentó en la primera reunión que se tuvo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia, la Diócesis de Zacatecas y Obras Públicas de Gobierno del Estado.
Acerca de cómo se involucraron los antropólogos universitarios en los trabajos, dijo que la invitación directa provino de Francisco Román Gutiérrez, docente-investigador de la Unidad Académica de Historia, quien intervino en la puesta en valor y la historia del templo y de todos sus retablos.
“A nosotros nos correspondió la parte técnica y sistemática de las excavaciones en las tres naves del templo y en el salón general”. De manera concreta –continuó– la intervención arqueológica consistió en pozos de sondeo, cimentaciones y rellenos, para elaborar un diagnóstico estructural del edificio.
De acuerdo con Montoya Mar, en las naves se encontraron 42 entierros humanos (cuerpos completos), osamentas (infinidad de huesos dispersos); metal presente en monedas, medallas y anillos; vidrio, cerámica y papel. Aclaró que los objetos no tienen un valor económico muy alto. Su valía –aseguró– es para la investigación arqueológica.
Resguardo
Sin duda, expuso el universitario, los hallazgos más importantes fueron los entierros humanos, algunos momificados debido a las condiciones del terreno (poca presencia de humedad y alto contenido de sales y minerales en la tierra), que permitieron que los cuerpos se conservaran.
Con base en las disposiciones del INAH, añadió, se decidió que los 42 entierros se conservaran en una capilla de Santo Domingo; posteriormente, podrían formar parte de una exposición itinerante por el país.
Los demás objetos, incluyendo las osamentas, están en resguardo de la Unidad Académica de Antropología de la UAZ, con el fin de analizarlos, a la vez que son trabajos de investigación para elaboración de dos tesis de licenciatura enfocadas al proyecto de Santo Domingo: Una a cargo de Aidé Alicia Valdés Escobedo, y otra de Abraham Cortés Escobedo.
Luego de añadir que, también como producto de estos trabajos, se encontraron vestigios de otro templo (en adobe), del siglo XVII, considerando los elementos arquitectónicos, Francisco Montoya apuntó que para la realización de excavaciones controladas y sistematizadas de acuerdo con proyecto se contó con la participación de Angélica Medrano, docente de Antropología, de egresados del mismo plantel universitario y de 20 alumnos de la Unidad.
Estos últimos realizaron sus prácticas profesionales y el diagnóstico del problema estructural que tenía el templo de Santo Domingo.
Tesis doctoral
Asimismo, en los premios anuales INAH 2011 Tomás Dimas Arenas Hernández, egresado del Doctorado en Historia de la UAZ, obtuvo mención honorífica, por su tesis “La población de la parroquia de Sombrerete, 1558-1825”. Lo anterior en la Categoría Historia y Etnohistoria del “Premio Francisco Javier Clavijero”.
