No se puede ser juez y parte en la protección de datos personales

JULIETA DEL RÍO VENEGAS

¿Cómo podemos confiar en que autoridades, a las cuales les han vulnerado bases de datos con datos personales, asuman la tutela del derecho a la protección de nuestra información? Sin duda, es una gran incógnita que no responde la reciente iniciativa presentada por el titular del Ejecutivo federal que busca desaparecer al Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).

Actualmente, el INAI es la institución encargada del derecho a la protección de datos personales, tanto en posesión de sujetos obligados, como de particulares; en estos últimos, es la única autoridad en la materia para investigar cualquier irregularidad. La actual iniciativa señala que “en lo que se refiere a la tutela y protección de los datos personales en posesión de particulares, las atribuciones y obligaciones quedarían a cargo del Ejecutivo Federal, conforme se determine en la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal”.

No se puede ser juez y parte, y en el caso de la privacidad de las y los mexicanos, vale la pena cuestionarse: cuando se vulnere otra base de datos, qué hará el Ejecutivo, ¿investigará con imparcialidad a las dependencias?

Recordemos la vulneración de información de periodistas que cubren la conferencia matutina, o la filtración de información de declaraciones patrimoniales en resguardo de la Secretaría de la Función Pública. En ambos casos, en teoría, debería existir una predisposición de las dependencias por mostrar soluciones y castigar a los responsables, además de reparar el daño, lo cual no ha sucedido.

El camino por seguir sí es el de una reforma, pero para fortalecer al INAI en el tema de sanciones ejemplares que sean parte de un sistema que reduzca las irregularidades. También vendría bien una reforma simplificar a nuestro propio Instituto.

El INAI ha impuesto multas a, por ejemplo, un banco por solicitar información médica de solicitantes de créditos sin contar con su respectivo aviso de privacidad; la sanción fue por $32,006,691. A un operador de telefonía móvil también lo multamos por $6,602,880, por obstruir datos de verificación de este Instituto para revisar un correcto resguardo de la información de los correos de los clientes. A otra empresa la sancionamos con $1,737,600 por el uso indebido de la imagen de un menor de edad para publicidad. Todas estas sanciones las recibe la Tesorería de la Federación. ¿Esto es suficiente? No, pero por eso impulsamos un fortalecimiento a nuestras facultades.

No hablamos por hablar cuando defendemos la utilidad del acceso a la información y a la protección de datos personales para poder ejercer otros derechos. En 2023 y lo que llevamos de 2024, el ISSSTE cuenta con mil 164 solicitudes relacionadas con pensiones y semanas cotizadas, mientras que el IMSS acumula 11 mil 168. Con esto, personas han accedido a un retiro justo.

Además, el INAI es la instancia que tiene la facultad de interponer controversias constitucionales o acciones de inconstitucionalidad cuando considera que ciertas leyes contravienen los principios de la protección de datos personales.

Ejemplo de ello es el Padrón de Telefonía Móvil (PANAUT), que a la postre fue invalidado por la Suprema Corte. Pero también sobre iniciativas como la nueva Ley General de Población para agregar en la CURP datos biométricos. Ante el riesgo que especialistas y el propio INAI advirtieron, la iniciativa fue devuelta a comisiones del Poder Legislativo para un nuevo análisis.

En el contexto de austeridad se descuida o no se invierte lo suficiente en materia de ciberseguridad; es así como la protección de los datos personales de las y los ciudadanos no son una prioridad, lo que los deja vulnerables ante delitos que dañan su patrimonio e integridad en el mundo físico y virtual.

Desde el INAI y el Sistema Nacional de Transparencia mantendremos la defensa de nuestra labor a favor de México, pues derechos ganados por la sociedad no deben caer en retrocesos. La imparcialidad, autonomía y división de poderes son un bien de la democracia que debemos mantener.

@JulietDelrio