México 2024: La sombra del feminicidio se extiende en el norte
El 2024 cerró con una cifra escalofriante: 797 feminicidios en México. Sin embargo, lo que más preocupa es el drástico aumento de casos en los municipios del norte del país. Juárez, con 25 casos, Tijuana con 17, Chihuahua con 14, Monterrey con 12 y Sinaloa con 11, encabezan una lista negra que revela una tendencia alarmante. Los datos provienen del informe ‘Información sobre violencia contra las mujeres: Incidencia delictiva y llamadas de emergencia 9-1-1’, del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Pero la realidad podría ser aún más cruda. María de la Luz Estrada Mendoza, coordinadora del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF), advierte que persisten fallas en la acreditación de este delito. Desde Cimacnoticias se ha documentado la llamada “Operación limpieza”, una estrategia del Gobierno federal para maquillar cifras, registrando feminicidios como homicidios dolosos. Además, existe un vacío en la forma en que las fiscalías reportan los datos al Secretariado Ejecutivo: no se sabe si lo hacen durante las investigaciones, al finalizarlas o solo cuando hay un presunto culpable.
El mapa del horror
A nivel nacional, el número de feminicidios disminuyó ligeramente, pero el estado de México sigue siendo la entidad con más casos, registrando un aumento de 50 a 73. Le siguen la Ciudad de México con 65, Nuevo León con 60, Veracruz con 53 y Morelos con 50. En la capital, la alcaldía de Iztapalapa se encuentra entre los cinco municipios con mayor riesgo, junto con Cuauhtémoc, Álvaro Obregón, Benito Juárez, Coyoacán, Iztacalco, Venustiano Carranza, Xochimilco y Miguel Hidalgo.
En cuanto a los homicidios dolosos contra mujeres, la cifra ascendió a 2,598, 18 casos más que en 2023. Guanajuato lidera esta trágica lista con 365 casos, seguido de Baja California con 253, el estado de México con 195, Guerrero con 189 y Chihuahua con 164.
La violencia feminicida: un problema estructural
De acuerdo con la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, la violencia feminicida es “la forma extrema de violencia de género contra las mujeres, las adolescentes y las niñas, producto de la violación de sus derechos humanos y del ejercicio abusivo del poder, tanto en los ámbitos público y privado, que puede conllevar impunidad social y del Estado”.
Este tipo de violencia se manifiesta a través de conductas de odio y discriminación, poniendo en riesgo la vida de las mujeres y culminando en muertes violentas como feminicidios, suicidios, homicidios y otras formas de muertes evitables.
Fiscalías especializadas: ¿una solución insuficiente?
El Censo Nacional de Procuración de Justicia Estatal y Federal de 2024, elaborado por el INEGI, reveló que en México existen 138 agencias o fiscalías especializadas en feminicidios, 207 en delitos de violencia contra las mujeres, 248 en delitos sexuales, 281 en violencia familiar y 89 contra la trata de personas. Estas fiscalías surgieron tras la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso González vs México (2009), conocido como Campo Algodonero, que obligó al Estado a estandarizar protocolos y criterios de investigación.
Sin embargo, Amnistía Internacional ha señalado que las investigaciones penales presentan graves deficiencias: pérdida de evidencia, falta de exhaustividad, ausencia de perspectiva de género y omisión en la implementación de medidas de protección.
El norte: un foco rojo
Tijuana y Ciudad Juárez, las dos ciudades fronterizas con mayor riesgo de feminicidio, son también puntos clave en la estrategia de seguridad del Gobierno federal. Actualmente, 3,599 elementos de la Guardia Nacional están desplegados en estas zonas para controlar el flujo migratorio y de drogas hacia Estados Unidos, como parte de un acuerdo entre la presidenta Claudia Sheinbaum y Donald Trump.
Pero la militarización no ha traído paz. En 2022, un análisis del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM reveló que más de 68,000 mujeres sufrieron violencia en su comunidad por parte de militares o marinos, según datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh, 2021). Organizaciones feministas ya habían advertido sobre las consecuencias de esta militarización, señalando que las mujeres son las principales víctimas de la violencia extrema, incluido el feminicidio.
En Monterrey, otro fenómeno preocupa: la desaparición de mujeres que terminan en feminicidios. Casos como el de Ana Carolina Sausedo Bahena, cuyo cuerpo fue encontrado en el Cerro de las Mitras, reflejan un patrón que se repite en la región. Su historia se suma a las de Debahni Escobar, Yolanda Martínez Cadena y Bionce Jazmín Amaya Cortez, cuyos casos quedaron impunes.
Rumbo al 8M: una lucha que no puede esperar
En un contexto nacional marcado por la violencia de género, y con el Día Internacional de la Mujer (8M) en el horizonte, es urgente poner el foco en el norte de México. La sombra del feminicidio no solo crece, sino que se arraiga en regiones donde la impunidad y la militarización agravan el problema. Las cifras son frías, pero detrás de cada número hay una vida truncada, una familia destrozada y una deuda pendiente con la justicia.
Fuente: Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. Enero-diciembre 2024.